Mafter

Tenía algo de placer al ver que esa flecha iba a atravesar el pecho de Henry O'Hara, depués pensé bien !Una flecha y un arco! en estos tiempos no se ven uno de esos debe ser muy cara y antigua....................
Volviendo a la realidad decidí estropear el intento del encapuchado, con mi velocidad estaba seguro que lo iba a golpear gravemente, mi objetivo era empujarlo y averiguar de quien se trataba. Si se incorporaba y decidía atacarme simplemente debía esquivar sus ataques, me sentía apto en ese momento así que ataque.

Debía descubrir a toda costa el por qué Henry me metió en todo esto, talvez así como me metió, él me podría sacar.

Saludos.

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Mario Kart FC: 4597-1956-8838
Smash FC: 0345-1780-6302

luis_127

Obviamente, alguien con tantas prisas por huir sólo puede ser Fore. Las señales de ruedas de un coche en el suelo indican que Fore ha decidido salir de la ciudad, ya que si aún siguiera aquí en Dallas no necesitaría coche gracias a su gran velocidad.

Por tanto, si sigo las señales de su coche evientemente me llevarán hasta él, pero si vuelvo a fastidiarla..."Bueno, se puede decir que voy extraoficialmente, ya que me han apartado del caso" -pienso con ironía-"además, no creo que pueda estar peor de lo que estoy ahora con respecto al ONMI, es mi oportunidad de enmendar mi anterior fracaso. El ONMI...Como hecho de menos el viejo FBI".

Vuelvo a mi coche y me dispongo a seguir el rastro de Fore

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tyranitar 100

Todos estos hechos ocurridos tan rapidamente y sin imprevisto me habían dejado un poco anodadado. Sin embargo, bajo de las nubes y me centro en mi misión, escoltar al señor Fontalegre. En la resistencia me enseñaron que las misiones hay que cumplirlas, pase lo que pase. Decido esperar a ver que me contesta. Más tarde, me quedaré en Paris, que de momento parece más segura que Moscú. No quiero empezar a abusar de poder, pero les diré a los 3 supervivientes que se reunan conmigo en Paris o que vayan a Chicago con Mr. Guntrick, pero que sean cautos y que se separen, para intentar despistar a los OMNI.

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Naruto16

Tras pensarlo detenidamente, voy a confiar en el señor Izan Bravo, sólo él, de hecho, es el que puede ayudarme a saber exactamente lo que le pasó a mi mujer y resolver toda esta locura. Así que voy a ir con él. Lo único que haría llamando a los de seguridad es ganarme un enemigo y no resolver nada.

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Michael Freeman

Bien, he reunido información de varias localizaciones web que tienen información sobre catástrofes ocurridas con anterioridad a 2008 y que, quizás no en su totalidad, o quizás no al completo, pero si las ramas que produjeron o parte de la catástrofe se pudo detener rápidamente.

En el caso del Tsunami que fue devastador pero los países del mundo enviaron una suma total de más de siete mil millones de dólares para la recuperación de los países afectados. (Extraído de Wikipedia)
Como podemos observar en este buen ejemplo, hay casos de recuperación muy rápida de catástrofes. Se trata del incendio en el edificio Windsor que se produjo en Madrid en 2005. Aquí tenemos la información. Todo se recuperó rápidamente.
http://www.miliarium.com/monografias...logiaFuego.htm

Sin embargo, como ejemplo clave y preciso de nombramiento me haré referencia al crack del 29 y la gran depresión estadounidense de los años 30.
Durante la mayor parte de la década de 1920, los Estados Unidos gozan de un período de prosperidad disminuyendo el desequilibrio mientras crecian las ganancias de las granjas industriales. Un aumento de la deuda y un mercado de valores inflados culminó en la caída de 1929 que desencadenó la Gran Depresión. Después de su elección como presidente en 1932, Franklin D. Roosevelt respondió con el New Deal, una serie de políticas de aumento de la intervención del gobierno en la economía.
He aquí la clave, la nueva política de Roosevelt hizo que la economía de EEUU se recuperase de la “catástrofe”.
http://es.wikipedia.org/wiki/New_Deal


Saludos!

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True David

(a asgardiano no le funciona el foro por lo que me ha entregado la respuesta por msn y así poder seguir jugando)

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ShEiK_PeDrO

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True David

Hace aproximadamente tres años…

Ruinas de Greenville: Inmediaciones del cráter central, 1 de Junio de 2008, 6:34

- Hhhk. Aquí Andrews, ¿alguien ve algo?
- Hhhk. Hendrix, nada por aquí.
- Hhhk. Land, tampoco en mi campo visual… un momento, ahí, al noreste, fijaos.
- Hhhk. ¿Qué demonios es eso?
- Hhhk. Parece un cráter, es gigantesco, también todas las construcciones colindantes a él están reducidas a los cimientos.
- Hhhk. Tenemos que investigarlo.
- Hhhk. Espera, Klein, ¿sabes a qué me recuerda esto? A Hiroshima y Nagasaki, he visto las fotos millones de veces, el paisaje es semejante. Land, consulta los niveles de radiación.
- Hhhk. Moderados, en ningún caso perjudiciales, no hay rastro de ninguna bomba atómica si esa es vuestra preocupación, de darse esa situación los niveles se saldrían del gráfico.
- Hhhk. Quitaos entonces los trajes protectores y acercaos a la posición de Land.
- Hhhk. Roger.

Los cinco miembros de la expedición enviada a investigar en la devastada población de Greenville, Gregory Andrews, Sally Hendrix, Obadiah Land, Harry Dodds y Allison Klein, se quitan sus trajes anti-radiación y se reúnen en un punto a una distancia prudencial del cráter.

- ¿Qué lo habrá provocado? - pregunta Dodds extasiado en la perfecta redondez del cráter.
- Probablemente eso. - Hendrix señala al cielo y todos se fijan en una especie de rayo azul permanente que conecta el cielo con el centro del cráter.

Uno de ellos propone acercarse al cráter en si y comprobar si hay algo que esclarezca que es ese rayo y la relación que guarda con el cráter, todos asienten y se dirigen a él. Cuando están a quinientos metros, logran visualizar que el rayo se ensancha en el centro del cráter y forma una especie de portal de color azulado, de ese portal surgen tres figuras que inicialmente solo logran visualizar como tres puntos.

Hank, que todavía agarra a McFur, sale despedido del portal como si un viento huracanado le empujara. Cae de costado junto con McFur y este recae inconsciente sobre uno de sus brazos, que oye resquebrajarse. Bryan también ha caído cerca de ellos, pero parece no haber sufrido grandes daños. Los tres combatientes parecen estar en un cráter y enfrente de ellos tienen el mismo portal que cruzaron hace unos segundos, solo que este en vez de rosa es azul. Hank dolorido intenta levantarse y seguir combatiendo, Bryan hace lo propio pero tras comprobar visualmente su localización y ver algo que al parecer él no había visto, decide dar la vuelta e irse. Hank se dispone a perseguirlo pero el dolor le recuerda que está malherido aparte de tener un brazo roto, y eso le impide correr detrás de él, además que McFur sigue ahí.

Los cinco miembros del equipo se acercan a los dos heridos y deciden atenderles a la vez que investigan el fenómeno que ocurre detrás de ellos. Allison se acerca a McFur, Obadiah a Hank y los tres restantes al portal.

- ¡Esta parece ser la fuente de la Catástrofe! - grita Gregory Andrews a sus compañeros.
- Este está inconsciente, pero no parece tener ninguna lesión mortal, su pulso es estable y respira, prueba con el otro a ver si nos puede decir algo. - le ordena Allison Klein a Obadiah Land.
- ¿Se encuentra bien? ¿Cómo se llama? - le pregunta Obadiah a Hank.
- Ugh… me llamo… ugh… Henry… agh, el brazo… Henry O’Hara. - el dolor de Hank interrumpe sus palabras.
- ¿Henry O’Hara? ¿El físico Henry O’Hara? ¡Hendrix! ¡Es Henry O’Hara! ¡Ven aquí! - Obadiah llama a su compañero que acude inmediatamente.
- ¿Doctor Henry O’Hara? ¿El físico cuántico? ¿Cómo está? - Sally Hendrix parecía entusiasmada a la vez que preocupada.
- Parece que es él, está herido y le duele, pero nada grave, podrá ayudarnos.
- Henry, Henry escúcheme, somos del gobierno, nos han enviado a investigar como a usted, perdimos contacto con usted hace dos semanas, ¿qué ha pasado?
- ¿Dos semanas? Ugh… no tengo ni idea de que me hablas. - ya sea por el dolor o por las extrañas palabras, Hank no entendía nada.
- Henry, es importante que nos cuente que ha pasado, somos amigos, del equipo de…

Harry Dodds le hace un gesto a Sally que hace que se calle en ese momento y se replantee sus palabras, al parecer hay algo muy urgente que les hace actuar desesperadamente.

- Es muy importante que me escuche, es probable que solo usted sepa como remediarlo, lo que pasaba en Greenville, se ha extendido, ¿me oye? Se ha extendido, es importante que lo paremos, usted ha de saber como.
- Ugh… ¿cómo podría yo saberlo?
- No lo sé, doctor, ¿qué ha pasado en estas dos semanas?
- Solo he… ugh… estado un día en Greenville, solo un día. ¿Dices que lo que pasa allí se ha extendido?
- Si, hemos investigado donde se encontraba el centro y nos ha llevado aquí, justo cuando ustedes salían de ese portal.
- ¡El portal! Eso es, lo último que iba a hacer era cerrarlo, ¡hay que cerrar el portal! - mientras dice esas palabras, Hank se levanta y con todas sus fuerzas se dirige hacia el portal y se planta frente a él - Es la clave, si logro cerrar el portal, terminaré con esto, ¿pero como lo hago?

Plantado frente al portal que aparentemente le había llevado dos semanas en el tiempo y bajo la mirada de los que le habían encontrado, en su mente empezaron a aparecer una serie de números, letras y signos matemáticos, no tenía sentido, pero lo sabría al instante, eran ecuaciones, ecuaciones cuánticas. Ante si tenía las ecuaciones que correspondían a las distintas posibilidades cuánticas, las estaba viendo en su mente y se sentía capaz de alterar la realidad, con cambiar una variable aquí se produciría este efecto allá. Siempre había sido un experto en su campo, pero esto era algo nuevo. De entre la maraña de posibilidades, Hank hace que una sea la que haga que se cierre el portal, lo ve y lo sabe, puede cerrarlo y acabar con esto.

Da un paso al frente y extiende su brazo adelante, como buscando interactuar con el portal, intentando que se cierre, aplicando la ecuación cuántica que salvará a la humanidad. Siente que la realidad actual opone resistencia a la alteración y tiene que ejercer más fuerza mental para alterar la realidad, tiene que concentrarse más. Un hilillo de sangre mana de su nariz. El portal comienza a cerrarse pero la resistencia que opone es aún más grande, Hank se concentra más y más hasta que finalmente el portal se cierra. Hank finalmente había logrado su objetivo, había parado el avance de la Catástrofe, había salvado al mundo.

Instantes después de esta hazaña, Hank cayó inconsciente.

True David

Hace ocho meses…

Chicago: Instalaciones DIC, 7 de Enero de 2011, 11:45

A Hank le habían llegado rumores de que su nombre encabezaba una lista de posibles directores de un organismo internacional de investigaciones científicas, pero no les había dado demasiado crédito. Al menos hasta hace dos días, cuando había sido citado por el Secretario General de la ONU Karl Kotler en unas instalaciones a las afueras de Chicago. Al parecer esos rumores eran ciertos y había sido escogido para algo, aún tenía que hablar con Kotler, que estaba a punto de llegar.

Aparca el Pontiac en el amplio aparcamiento del edificio que tenía delante, formado por varios rectángulos de hormigón y cristal dispuestos a lo largo de un tercio de una extensión de terreno vallada de gran amplitud. Se guarda en el bolsillo las llaves del coche de segunda mano que compró hace año y medio tras no poder recuperar su Audi desaparecido junto con todo Greenville. Cuando se acerca al edificio ve el cartel que presenta al edificio:


De ese edificio sale el Secretario General de la ONU, Karl Kotler, viene hablando con una mujer, que es Claire Nesbitt, la directora de Norteamérica del ONMI, al verte paran la conversación y te saludan.

- Hola Dr. O’Hara, ¿puedo llamarle Hank? Llámeme Karl, supongo que ya conoces a la Sra. Nesbitt. - Kotler intentaba ser todo lo afable que estuviera en su mano, pero sabía de sobra la mala relación entre la canadiense y el físico.
- Si, me interrogó durante ocho horas seguidas, - tras despertarse en un hospital, Hank fue llevado a una sala de interrogatorios donde fue puesto a prueba durante toda una tarde sin ni un solo descanso a pesar de que había estado en coma más de un año hasta ese día- nos conocemos muy bien.
- Bueno, ella ya se va, Hank, ven conmigo. - Nesbitt se aleja con el ceño fruncido y Kotler hace un ademán a Hank para que le acompañe. Ambos se introducen en el edificio, que resulta ser una simbiosis perfecta de tecnología y naturaleza, ya que en su interior hay una cascada artificial y numerosas especies exóticas de plantas, aparte del entorno de cristal en el que se encuentra y del color blanco y plateado de todas las instalaciones. - Bien Hank, supongo que habrás oído los rumores, el Departamento de Investigaciones Científicas de la Iniciativa Nuevo Mundo está en marcha.
- En efecto, supongo que ese alto presupuesto se ha estado gastando en esto.
- Si, son las instalaciones más equipadas que hay actualmente en el mundo, ni siquiera los laboratorios privados de más renombre alcanzan el nivel que hay aquí, toda la equipación que cualquier científico desearía para sus investigaciones la encontrará aquí, mucho mejor que Princeton obviamente. - Kotler suelta una risita disimulada - Pero necesitamos personal a la altura, que sepa aprovechar esto, y a ese personal lo tenemos también, las noticias han volado por la red, miles de blogs se han hecho eco y los científicos han hecho cola a nuestra puerta. Pero necesitamos a alguien que los dirija. Necesitamos a alguien que tenga experiencia a la hora de trabajar con otros científicos, muchos de ellos estudiantes, que sea emprendedor, con iniciativa personal y, por supuesto, con experiencia en la Catástrofe.
- No había otro nombre en esa famosa lista, ¿verdad? Solo me queríais a mi.
- Es cierto, eres el único que puede dirigir esto. Tendrás total libertad, no serás un cargo político, no te reelegirán a los cuatro años, podrás dirigir esto cuanto quieras e irte en el momento que te canses, podrás modificar los laboratorios a tu antojo, tienes hectáreas de terreno construíble, más la zona subterránea que está a tu disposición.
- ¿Cuál es el fallo? Nada puede ser tan bueno, vale que me escogéis porque el público me quiere, porque me habéis vendido como un héroe y tenerme en un alto cargo mejorará vuestra imagen, pero hay algo más. - Hank había adoptado un semblante muy serio, no podía confiar de primeras en algo tan suculento.
- Los cinco países del Consejo de Seguridad se han reunido y he estado presente en esa reunión, la Iniciativa Nuevo Mundo se está forjando grandes enemigos, enemigos de gran poder económico, que no dudarán en atentar contra tu vida o la mía si eso les hace ganar más poder en este mundo inestable: mafiosos, terroristas, políticos corruptos, empresarios sin escrúpulos…
- Sería pintarme una diana en la frente para todos ellos.
- Efectivamente, ¿aún quieres el puesto?
- Tranquilo, yo me ocupo de mi propia seguridad.

Moscú: Torre Elder, 11 de Enero de 2011, 12:56

Hank había sido convocado por el multimillonario John Taylor a una reunión extraordinaria en la gigantesca Torre Elder en el centro de Moscú, el objetivo de la reunión era desconocido tanto por Hank como por su nueva secretaria, Heather, pero nadie desaprovecha una oportunidad para reunirse con el millonario John Taylor.

- Buenos días, Sr. O’Hara, y usted debe de ser la Srta. Baldwin, encantado.
- Sr. Taylor, he de decir que su llamada me ha sorprendido, ¿a que se debe que esté aquí en el vigésimo séptimo piso de la Torre Elder?
- No me voy a andar con rodeos, mi fortuna ya no es lo que era, una serie de malas inversiones tras la Catástrofe me ha hecho perder mucho dinero y mi empresa base, Taylor Tech Industries, está en unos números muy bajos. Me veo obligado a hacer una escisión y separar TT Industries de John Taylor Group para venderla.
- ¿Tiene algún interés especial en que sea yo el dueño de su empresa?
- Si le digo la verdad, ninguno, pero las circunstancias han hecho que sea usted el potencial comprador más sólido que hay actualmente. La mayoría de personas con el capital suficiente para comprar una participación mayoritaria de TT Industries serían multimillonarios en la misma situación que yo, que ya poseen gran cantidad de empresas y que muchas de ellas están en un proceso de desaceleración grave. En definitiva, no hay nuevos ricos. Excepto usted claro, usted recientemente ha firmado un contrato millonario con la Iniciativa Nuevo Mundo y ha recibido unos fondos casi ilimitados para administrar como vea oportuno. Le estoy dando la oportunidad de comprar mi parte mayoritaria de las acciones de TT Industries.

Hank se reclina en el sillón y finge reflexionar, ha estado viendo las probabilidades de que esto sea un engaño o una trampa, por su cabeza han pasado todos los números de la empresa, los fondos invertidos por la Iniciativa Nuevo Mundo, sus ahorros personales, lo ha visto todo a la vez que Taylor hablaba. Ha visto todas las posibilidades y hay unas cuantas que le gustan y una en especial que es la que le ha convencido, además, la suerte está de su mano.

- Heather, ¿qué tal suena O’Hara Corporations?
- Demasiado largo, no tiene gancho.
- Bien, entonces Harcorp. - Taylor sonríe al entender a que se refiere - Sr. Taylor, tiene usted un comprador.

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True David

Eusebio Fontalegre e Izan Bravo

París: Sala Rubens del Museo Louvre, 1 de Octubre de 2011, 18:35

Finalmente, Eusebio e Izan se dan la mano, en gesto de conciliación total. Izan le hace un gesto al anciano para que le siga y este lo hace intrigado, bajan una planta andando en silencio y van hasta la sala en la que se sitúa la Gioconda.

- ¿Qué hacemos aquí? - pregunta Eusebio
- Seguro que ya has estado en esta sala más de una vez.
- Si, ¿a dónde quieres llegar?
- Y siempre la gente está observando la Gioconda.
- En efecto.
- Pues si la gente de diera la vuelta, encontraría un cuadro mucho más impactante, pero se centran en cosas pequeñas y con una importancia relativa, obviando otras de mayor importancia y trascendencia. Es un símil de lo que ocurre actualmente en el mundo.
- ¿La gente no es capaz de ver cuadros grandes?
- El mundo se centra en los pequeños avances - Izan siguió hablando ignorando que para Eusebio esta conversación no tenía sentido - y migajas que ofrece la Iniciativa Nuevo Mundo, pero no ve los grandes males que ha causado y que ahora dice reparar. Vivimos en una mentira, en una gran sombra.

En ese momento, irónicamente, se cae el servicio eléctrico del museo y todo queda a oscuras excepto por la poca luz natural que entra. Izan saca del bolsillo un aparato de pequeñas dimensiones con una pantalla que emite luz y les permite ver que tienen enfrente, y que en esa pantalla aparece un minimapa que les guía hasta la salida más próxima, pero cuando se disponen a cruzar la puerta, esta se cierra. Dan la vuelta corriendo a la de detrás y se cierra. Una única luz se enciende, justo encima del anciano y el informático. Después se encienden las de toda la sala, que se encuentra vacía excepto por su presencia, y ahora por la de un hombre de cabello cano y que Eusebio reconoció como el que se había colado su casa esta mañana.

- Vaya, vaya, vaya. Me sorprende lo lejos que ha llegado su organización, señor Bravo. Parkfield cada día se saca un as de la manga, pero me parece que hoy la Resistencia ha jugado su última mano.
- ¿Quién es usted y qué quiere? - le pregunta con fiereza Izan - ¿Y quién es Parkfield?
- Oh, es verdad, que incluso con sus camaradas no usa su verdadero nombre. ¿Sigue usando el alias del señor Guntrick?
- ¿Guntrick? ¿Qué tienes que decir de Guntrick? ¿Cómo sabes quienes somos? ¡Operamos en secreto!
- Hahaha, ¿en secreto? Tenéis más agujeros en vuestra organización que Sonny Corleone en su cuerpo. Hace un tiempo fui amigo de vuestro jefe, pero la semilla de la desconfianza creció en nuestra relación por lo que cortamos lazos. Pero veo que sigue firmemente sus ideales, es una pena que la Resistencia hoy haya pasado a mejor vida. Aunque eso a mi no me interesa, a mi me interesa el señor Fontalegre.
- ¿Qué quieres de mi? - pregunta Eusebio, intrigado.
- No te metas Eusebio, Guntrick nos habló de este hombre, dijo que intentaría engañarnos, que posee información valiosa pero que sería capaz de matar por más.
- Oh, venga, vas a crear una imagen distorsionada de mi persona, solo quiero preguntarle a Eusebio por una cosa.
- Vámonos señor Fontalegre, salgamos de aquí.
- No váis a hacerlo.
- Si Izan, tienes razón, vámonos.
- Señor Fontalegre, no me obligue a usar la fuerza, tengo más de sesenta años, sería perjudicial para usted y para mi. - mientras Izan y Eusebio corren a una puerta de emergencia, el hombre se les aparece delante, de repente, como si se hubiera teletransportado - ¿Sorprendidos? Imagínense mi sorpresa la primera vez que pude hacer esto, ahora señor Bravo, se estará quietecito y usted Eusebio, me dirá todo lo que sabe acerca de algo llamado VIC.
- ¿VIC? ¡No conozco nada que se llame así!
- Algún lugar, algún objeto. - el hombre conservaba la calma, pero mientras había doblegado a Izan transportándolo en movimiento de cara a una pared - algo, ¡algo que responda a las letras V I C!
- Lo siento, pero no sé nada.
- Sucio bastardo, debería acabar contigo aquí mismo, pero haré algo mejor, mataré a tu amigo si no hablas.

El hombre saca una pistola del cinturón y agarra a Izan por el cuello, apoyando el cañón del arma contra la sien del informático.

Eusebio

No tienes ni remota idea de lo que quiere el hombre, pero va a matar a Izan y tienes que evitarlo… o no. Siempre puedes dejar que lo mate, pero puedes intentar hacer creer que sabes que es VIC, inventarte cualquier historia, pero tiene que ser creíble, porque parece decidido a acabar con Izan.

Izan

A pesar de que tu vida está en las manos de Eusebio, siempre puedes intentar colaborar un poco con la situación, la puerta de emergencia está a vuestra derecha y el hombre te tiene agarrado por el cuello con la pistola ya amartillada, si Eusebio consigue hacer que baje el arma y teniendo en cuenta que por lo menos uno de los dos brazos lo tienes roto, ¿cómo podrías neutralizarlo?

True David

Andrew Camel

Chicago: Chicago Spire - Central ONMI, 1 de Octubre de 2011, 20:48

Seguir el rastro del coche, que resultó ser un Shelby de color rojo y matrícula de Arizona te ha llevado unas cuantas horas, pero las distintas paradas en gasolineras y los diversos avistamientos del coche por parte de varios testigos han facilitado la tarea hasta el punto de llegar a Chicago. No te molestaste en continuar siguiendo el rastro, directamente te dirigiste al lugar a dónde técnicamente ya te tenías que haber dirigido hace horas, el despacho de tu jefa.

- Buenas noches, directora Nesbitt, ¿quería verme?
- Si, Andrew, por favor, cierra la puerta. - haces lo que te ordena y te sientas en una de las sillas que hay enfrente del escritorio - Nos ha decepcionado el resultado del operativo de hoy.
- No pudimos prever el desenlace de las acciones, nadie puede.
- Yo no estaría tan seguro… pero de cualquier forma, no ha cumplido con lo que le encomendamos, así que comprenderá que le hayamos apartado del caso.
- Lo entiendo, pero no lo comparto, me mantengo en mi intención de seguir investigando.
- Camel, le daré un aviso, no intente hacer nada, ya hemos destinado hombres a buscar otros rastros de Fore.
- ¡Sabe que yo soy el mejor en esto!
- Agente Camel, le ordeno que se tranquilice. Descanse una temporada, tiene una semana de vacaciones pagadas, hablaremos cuando vuelva.

Cabreado, sales del despacho dando un portazo. Toda la planta está viendo tu cólera pero te da igual, incluso te das el lujo de soltar alguna licencia como:

- ¡A la mierda el ONMI! ¡Nunca debería de haber vuelto!

Cuando te fuiste del FBI, estuviste en el sector privado una temporada. De esa etapa aún guardas algún contacto, en especial un misterioso hombre que es capaz de solucionar cualquier tipo de problema: coartadas, disputas, situaciones embarazosas… cualquier cosa. Nadie conoce su nombre, solo se sabe que le llaman Geoff el Arreglador. Sus actividades están en el límite de la legalidad, pero es eficiente y ante situaciones como esta, sabe como hacer las cosas.

- ¿Si?
- Hola, soy Andrew Camel, nos conocimos en el asunto del puerto, usted ayudó al dueño del astillero con…
- Si, me acuerdo de usted, ¿qué tal está su chica?
- Genial, mire, necesito su ayuda.
- Soy todo oídos, pero que sepas que no me gusta mezclarme en asuntos públicos, trabajo para lo privado.
- Vaya, las noticias vuelan. Bueno, es sencillo, me han apartado de una investigación y en parte está bien, pero me quieren mantener alejado de todo lo relacionado. Me han dado una semana para que me vaya a algún sitio de vacaciones y quiero ser capaz de estar en dos sitios a la vez, ¿me capta?
- Perfectamente, es sencillo, pasaporte y billetes a su nombre, alguien que encaje con su descripción… dos de los grandes, en metálico, no queremos que rastreen ninguna transacción. No se preocupe por el dinero, no me corre prisa, me fio de usted, pero necesito que hoy y mañana no sea muy visto. Ya le llamaré en unos días para darle más detalles.
- Eh, bien, ha sido rápido.
- Estaremos en contacto.

Tan simple como una llamada. Ahora tocan los asuntos importantes. Has logrado saber a dónde se dirigía el coche, pero has descubierto que en él no viajaba McFur Fore sino su posible compinche. Observando algunas grabaciones de seguridad de sitios cercanos, has logrado dar con una descripción fiable: mujer morena, ojos marrones, 1,70 de altura, unos 50 kilos de peso. Puede ser algo o no puede ser nada, ¿intentas dar con ella? Si decides investigar puedes usar la base de datos del ONMI, o ser más tradicional y preguntar por los alrededores de donde tiene el coche a ver si alguien la ha visto.

True David

Bryan Parkfield, Henry “Hank” O’Hara, Hiroshi Masaki y McFur Fore

Chicago: Centro de la ciudad, 1 de Octubre de 2011, 21:03

Cuando Bryan soltó su flecha, McFur se abalanzó sobre él como un rayo, haciendo que su arco cayera a la calle. Una explosión aturdió a ambos y los cristales del edificio de enfrente volaron por los aires. McFur no sabía si el tirador había dado en el blanco, pero en cuanto lo pensó se volvió a abalanzar sobre él, pero Bryan jugaba con ventaja, McFur no sabía que tras la capucha se escondía él, a quién ya había estudiado.

McFur intenta golpearle y lo consigue la mayoría de las veces, pero su oponente no gruñe, no retrocede, simplemente recibe los golpes, los acoge de una forma casi armónica. O al menos hasta el instante en el que McFur golpeó su hígado. El encapuchado no parecía esperar ese golpe y se encogió completamente al recibirlo, pero lo que venía a continuación sorprendería aún más a ambos, de los ojos de Bryan surge un haz rojo que en forma de rayos comienza a quemar todo lo que hay a su alrededor, incluido el torso de McFur, que cae de espaldas incapaz de moverse por el profundo dolor de las quemaduras.

- ¿Por qué me has atacado? - pregunta Bryan, sorprendido por su recién descubierto poder.
- ¡Ibas a matarle! No podía permitir que alguien se llevara a la única persona que es capaz de limpiar mi nombre. - McFur intenta incorporarse mientras habla, pero le es casi imposible.
- Así que ya sabes que eres inocente, bueno, supongo que el querer hacer pagar a los verdaderos responsables de lo de hace tres años es algo que tenemos en común.
- ¡No tengo nada en común con un asesino!
- Oh, no, nada más lejos de mi intención estaba el matarlo. Quería incapacitarlo, ¿alguna vez has probado a usar tus poderes bajo un profundo dolor? Es imposible, requiere una concentración muy alta, por eso es que con esas quemaduras aún no has podido echar a correr.
- Es… maquiavélico, ¿cómo sabes tanto de mi?
- Sé quién eres, todo el mundo lo sabe.
- Nadie sabe que tengo poderes, ni que soy inocente. Pero tú si y te reconozco por la capucha, te vi en la tele cuando me fugué. ¿El Sr. Guntrick, verdad? Pasaste de dar palizas en bares a liderar a unos terroristas, guau, debes tener un club de fans tremendo. Hgg…
- ¿El dolor intenta mermar tu humor? No hagas esfuerzos. Veo que has hecho los deberes, pero no somos terroristas, somos los buenos, traemos la verdad, la libertad.
- Y una mierda, ¿traéis la verdad y te cubres la cara?
- Mi cara no necesita ser cubierta para ti, sabes quién soy, mi nombre es…

A pocos metros de ahí, Hank se levanta de entre el polvo y los cristales. Ha sucedido tal y como él había hecho que sucediera, pero no había previsto que reabrir heridas recientes era tan doloroso. Saca los fragmentos que tiene alojados en la espalda y se incorpora. Los demás participantes están muy aturdidos y simplemente corren a esconderse ante el ataque terrorista, solo Hiroshi acude al rescate de Hank.

- Roshi, tengo que hacer algo, contacta con el equipo, los quiero aquí para analizar todo y que me pasen información por el camino.
- ¿No irás a ponerte el traje? Estamos rodeados de cámaras.
- Llama a una ambulancia y despéjamela, puedo ponerme el traje y salir ahí fuera.
- ¡Estás herido!
- Tranquilo, soy más duro que la mayoría, puedo aguantar un poco de dolor, además el traje me proporciona calmantes para eso.
- ¡No per…!
- Calla y haz lo que te digo, es importante.

True David

Hank no dejó continuar a su empleado, se levantó y bajó en el ascensor. Un reguero de sangre seguía a todos los movimientos de Hank, pero él contaba con algo que otros no y eso hacía las heridas un mero incordio. Tras ponerse el traje, salió de la ambulancia corriendo y subió por las escaleras de incendios a la azotea donde se había producido el disparo. La única sorpresa para Hank fue saber quienes eran los participantes en el juego.

- Hola señoritas, espero que no hayan empezado sin mi. - McFur seguía sin poder moverse del dolor pero Bryan se había levantado y parecía dispuesto a comenzar hostilidades con Hank.
- No creo que estés en condiciones para pelear.
- No sufras por mi, yo domino todas las condiciones. - en esto le asesta un puñetazo en la mandíbula con toda la fuerza que le disponía - ¿Ves? Me parece que este es un buen momento para conocernos. - esta vez le asesta un puñetazo en las costillas.
- Hank, me parece que te estás embruteciendo.
- ¿Qué esperas cuando intentan asesinarte delante de las cámaras? Un momento, ¿cómo sabes quién soy?
- ¿Creías que no sabía quién eras? No hubiera llegado hasta aquí de no saber qué piezas hay en el tablero. Por cierto, se me olvidó darte las gracias por lo de por la mañana, ha sido como darme en bandeja una idea sobre tus poderes. - Bryan logra escabullirse de Hank y le da una patada en la parte posterior de las piernas, que hace que se caiga de rodillas. - Por cierto Henry, ¿qué se siente al haber matado a millones de personas?
- ¡Agh! ¡Hijo de puta mentiroso! - las palabras de Bryan enfurecen a Hank, que carga una vez más contra su contrincante y lo derriba completamente.
- Oh si, descarga todo contra mi, ¿aún tienes pesadillas por las noches? - el puñetazo que recibe Bryan tras decir esto rompe definitivamente la mandíbula si no lo había hecho hasta el momento. Pero aún escupiendo sangre, Bryan continúa provocándole - Todas esas voces en tu cabeza, los millones de futuros que sesgaste, además ¿tú puedes ver eso, no? Todas las posibilidades, los avances técnicos que hubieran hecho esas personas. Debes de estar loco. Debe de ser por eso que ahora usas máscara, como yo, solo que por razones distintas.
- No llevo máscara por eso, pero vamos, ahora estoy débil emocionalmente, dame con uno de esos rayos tuyos, ahora que me has desconcentrado estoy indefenso. ¡No puedes hacer nada! Te voy a meter en una puta jaula para perros, pasarás el resto de tu vida pagando por todo el mal que has causado desde hace ocho meses. - el propio Bryan sabía que estaba indefenso, tenía la mandíbula, unas cuantas costillas y, desde esa última patada, el fémur rotos, no iba a acabar con Hank de esa forma.
- ¿Y qué hay para ti? ¿Más condecoraciones? ¿Más contratos multimillonarios? ¡No eres un héroe! ¡Eres un exterminador! ¡Un asesino de masas! Tu máscara solo representa tu miedo, la mía, la nuestra, la de la Resistencia, representa al pueblo bajo la mentira y la oscuridad de gente como tú. Té conozco, sé lo que hiciste.
- Claro, Parkfield, ¿estás seguro de que la mentira no sale de tu boca?
- Pero… ¿cómo lo sabes? ¿cómo has sabido mi identidad?
- ¿Creías que no sabía quién eras? No hubiera llegado hasta aquí de no saber qué piezas hay en el tablero. Maldito cobarde, ¡huiste de ahí rápidamente! ¿Y sabes una cosa? ¡Tu Resistencia está acabada! Me han informado mientras te partía la pierna que han volado Resist Enterprises. - no era necesaria una respuesta por parte de Bryan, su cara de derrota lo decía todo - Vaya, parece que no somos tan listos, la escoria como tú no es nada, terroristas, debería matarte aquí mismo.
- Bien, hazlo, has ganado. Todo tu sistema ha ganado, ¿pero nunca has querido saber que pasó exactamente? ¿Cómo los mataste a todos? ¿Por qué se nos otorgaron estos poderes solo a nosotros?
- ¡Cállate! ¡Cállate de una vez! ¡Si no te callas te silenciaré de una vez por todas!
- Por favor, hazlo, mi muerte dará sentido a mi mensaje. Bryan Parkfield es solo una persona, el Sr. Guntrick es solo un alter ego, pero la Resistencia es un sentimiento, una unidad, y aunque no quede ninguno de sus miembros en el mundo, alguien recogerá el testigo, alguien que sea lo suficientemente inteligente para ver todo esto, ¡nosotros somos los buenos! ¡yo soy el héroe!

Hank había perdido la paciencia, le quitó la capucha que cubría por completo la cara de Bryan. Era él, la misma cara. Ya no tenía aquella melena rubia frondosa ni aquellos ojos azules angelicales, pero si que conservaba la cara de niño con ganas de luchar que tenía la última vez que se encontraron. Verdaderamente estaba convencido de que lo que decía era cierto, creía ser un héroe, creía representar unos ideales, creía que Hank era el asesino. Es la determinación de un Robespierre moderno, de alguien que cree que lo que está establecido no está bien y que hay que cambiarlo sea cual sea el precio. Incluso había conseguido hacer dudar a Hank, ¿de verdad era él el héroe? ¿qué hacía ahora con todo este jaleo? Hank se retiró del maltrecho cuerpo de su contrincante y se quitó la máscara. Llovía, llovía desde hace un rato pero era la primera vez que se daba cuenta, acababa de volver a conectar con la realidad. Una realidad imperfecta, pero que era necesaria y que gente como Parkfield, o como su alter ego el Sr. Guntrick, intentaban destruir. Era hora de hacer un sacrificio por el bien mayor. Y no es sino en el momento en el que Hank va a asestar el puñetazo definitivo a Bryan cuando Hiroshi sube a la azotea y lo detiene.

- ¡¿Qué crees que estás haciendo?! - le pregunta con indignación en su rostro.
- Este hombre es el Sr. Guntrick, Roshi, él es el que ha intentado matarme.
- ¿Y eso justifica que lo vayas a asesinar?
- ¡Es demasiado peligroso! ¡Con uno de sus poderes podría freírte con solo mirarte! ¡O lanzarte cualquier objeto como arma mortal!
- Nos ocuparemos de él, pero tú no estás en condiciones de continuar. Hank, déjaselo a las autoridades.

Escuchando las palabras de su empleado y amigo, Hank se fue dejando a Hiroshi con un inconsciente Bryan Parkfield. Mientras Hank desciende por las escaleras se da cuenta de que McFur se había ido mientras el jaleo estaba vigente. No había logrado nada, quizá hubiera sido una mala idea lo de jugar a ser superhéroes, quizá Quantum solo sea una utopía, un paradigma de la justicia, quizá sea hora de dejar todo.

True David

Pero para algunos no lo es, para algunos esto no ha hecho nada más que empezar, para otros como McFur Fore esto es solo el principio de una larga batalla. Y a pesar de haberle hecho mucho mal en el pasado consciente o inconscientemente, en Henry O’Hara se encuentra la figura de un posible aliado, de eso se ha encargado su compinche, de encontrar la forma por la que contactar con Henry O’Hara. Su comunicador del traje, que tiene una frecuencia de la radio específica.

- Hola Hank, hacía mucho que no nos veíamos. - le saluda McFur como quién lo hace a un viejo amigo.
- ¿Quién eres?
- El tercero en discordia, parece que ninguno hemos salido bien parados de esto, yo tengo quemaduras de tercer grado y la sensación de haber perdido el tiempo, tú tienes la sombra del nuevo mundo sobre tu cabeza y Bryan tiene una bonita y confortable habitación cúbica en unas instalaciones de máxima seguridad en el desierto.
- No tengo ganas de este juego.
- Ni yo, pero me he visto obligado a jugarlo, ¡gracias a ti me he visto obligado a jugarlo! Pero tú y yo no somos más que peones en el gran juego, eso está claro. A pesar de lo que dijera Parkfield, no creo que hayas sido tú el que causó la Catástrofe como tampoco creo que haya sido yo. Hay alguien detrás de esto, hay alguien moviendo los hilos y a mi me interesa que tú y yo saquemos algo en claro, nos beneficiará a ambos.
- ¿Me queda alternativa?
- Siempre tienes tu bonito ático en el Edificio Kevlar. Por cierto, ¿las manzanas son de verdad o están de adorno? Si decides hablar conmigo, ya sabes dónde estoy.

Bryan

¿Cómo discernir el resultado de la misión? ¿Se puede considerar un éxito? Te han dado una soberana paliza pero has logrado dejar una huella imborrable en todos los implicados, además has descubierto que posees otra habilidad especial relacionada con tu vista. Lo que te ha inquietado ha sido la afirmación de Henry O’Hara ¿la Resistencia desmantelada? No te preocupa que ahora mismo decidan encerrarte, lo tenías previsto y hay un plan de huída, pero ¿qué pasara si no tienes apoyo en el resto del mundo? Esta decisión no es inmediata, es a largo plazo, ¿irás a comprobar si tus camaradas están bien y era solo un farol? ¿o correrás con el riesgo? Piensa qué valoras más, si tu misión o tus compañeros.

Hank

Has caído una vez más en algo que no puedes manejar, ya habías decidido investigar toda esta trama pero establecer alianzas con supercriminales fugados es otra cosa. Aunque si lo piensas, nada está verdaderamente claro en este momento, ¿quién es el héroe y quién es el villano? ¿quién mueve los hilos de todo esto? Todos parecen saber algo de esto, pero solo McFur tiene intenciones de compartir esto contigo -es comprensible, es el que más tiene que perder-. Has de determinar hasta que punto confías en su palabra, si le vas a escuchar, vas a pelear con él para encerrarle, vas a presionarle para que te de toda la información sin ningún compromiso u otras soluciones.

Hiroshi

Te encuentras en una situación muy comprometida, ante ti tienes a un criminal buscado. Irremediablemente, de avisar a las autoridades estas seguirán el rastro hasta Hank y Harcorp. No es por ser egoísta, pero has de pensar en ti mismo, tu empleo es lo que más valoras, te ha costado demasiado estar donde estás para perderlo todo ahora mismo. Por otra parte está el dejarlo correr, que se vaya, ¿pero que diría tu jefe? ¿su archienemigo otra vez por ahí? Y por último tenemos el dejar que se encargue otra persona, te acuerdas de John Taylor ¿verdad? Dijo que le informaras, seguro que tiene un plan, algo que pueda hacer en estos casos, es un hombre de muchos recursos.

McFur

El dolor ha vuelto, esos rayos oculares que recibiste de Parkfield liberaron una sustancia en el lugar de impacto. La composición ácida semejante al ácido clorhídrico de la sustancia es la que está produciendo más quemaduras en el cuerpo y con ello el dolor. El ático de Henry O’Hara tiene un pequeño laboratorio en el que hay substancias químicas de todo tipo. Sabiendo el PH del ácido clorhídrico escoge una sustancia que logre neutralizarla.

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luis_127

Claro que intento dar con el compinche de Fore, y con el propio Fore si se presenta la oportunidad, para eso he montado todo este lio. Me dirijo primero a la base de datos del ONMI para buscar información y después iré a preguntar por los alrededores, cuanta más información compare más claro tendré su paradero.

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asgardiano

Siempre conte con la posibilidad de hacer alianzas poco recomendables, pero en este caso era Parkfield mi mayor amenaza, y como se suele decir, el enemigo de mi enemigo es mi amigo.
A pesar de querer trabajar junto al señor McFlash, no le voy a dar la opción de que crea que le necesito, intentaré que sea mas bien al reves, asique de la que llegue a casa, le abofetearé (si lo que sucede a continuacion no afecta ami persona, esperaré a ver que me dicen mis habilidades) para dejar claro quien es el jefe, que no le necesito pero que quiero ayudarlo. Resumiendo, trabajare junto a él, le ayudaré, pero intentaré estar un paso por delante por si en algun momento decide liarmela.

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Michael Freeman

Hiroshi Masaki

Hank me ha demostrado que puedo confiar en el de igual manera que lo hizo John en su día. El problema es que John parece no ser el mismo, me dijo que me lo explicaría todo sí, pero el aviso repentino después de tanto tiempo, las llamadas inusuales para pedir información y colgar… no me daba buena espina. Quizás el viejo John estaba detrás de algo gordo, quizás necesitaba mi ayuda para algún nuevo negocio. “Dios, ¿en qué lío me he metido? Me gusta ayudar a la gente que lo necesite pero, ¿realmente pondría mi vida en ello?”. Mientras me planteo todas estas preguntas, Hank y yo bajamos a la calle. Todo esta lleno de policías y periodistas.
-Hank, creo que será mejor ir por otro lado- le digo-. Además… tengo que contarte algo.
Definitivamente estaba dispuesto a ayudar a Hank, había estado pensando mientras bajaba las escaleras que él había sido muy sincero y confiado conmigo revelándome su alter ego e incluyéndome en todo este lío y tenía que ayudarlo. ¡Sí! Así lo hubiera hecho mi padre… Sigo a Hank hacia donde quiera que se dirija, por una serie de callejones en los que no parece haber nadie, o por lo menos nadie a quien le interese un tipo disfrazado y un asiático en traje con un encapuchado en brazos.
-¿Qué querías contarme Hiroshi?
-Verás Hank- comienzo decidido- antes de todo este jaleo de Quantum, Guntrick y demás, John Taylor estuvo contactando conmigo de manera un tanto inusual. Primero me envió un e-mail utilizando un pseudónimo y luego contacto conmigo vía telefónica para que le averiguara información sobre el intercambio de armas ilegal que desmantelaste en tu primera intervención y sobre ti mismo, bueno, es decir, sobre Quantum. Tras esto, yo no le dije que sospechaba de ti y por eso fui a hablar contigo. No me gusta traicionar a un viejo amigo pero encuentro que no es el mismo John de antaño, lo encontré muy raro. Así que lo que creo que debemos hacer es:
1)Llamar a John Taylor y darle alguna explicación que se nos ocurra.
2)Encarcelar de manera clandestina, sin que nadie se entere, a Guntrick o Parkfield o como demonios se llame, sin nada que pueda usar como proyectil y sin nada que pueda quemar y sonsacarle información.
3)Con esto, llegar al fondo de este asunto y solucionarlo de una vez por todas, porque te querían muerto y que demonios quiere John Taylor. Averiguar si hay alguna relación entre vuestros poderes y quizás los de ese delincuente, ¿cómo se llamaba? Ah sí, McFur Fore. En definitiva, encontrar información y solucionar esto.
-Mmmm- murmura Hank. Esta absorto con tanta información.
-Por cierto, quisiera pedirte una cosa antes de nada.
-Dime…
-Me gustaría que me contaras toda la información que sepas porque ya que he confiado en ti quiero que sepas que puedes confiar en mi en todo momento- le digo a Hank con una sonrisa de ánimo en la cara.


Saludos!

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Mafter

Estaba vez no seré yo quien salga con la desventaja de nuevo, iré con las debidas precuaciones. Esta vez intentaré trabajar la relación con cuidado, seré lo más amable posible necesito respuestas y las voy a conseguir.
Con respecto a la quemadura, lo único que puedo hacer es comprarme unos analgésicos, tomar agua, además puede que alguna crema me ayude. Pero no podré hacer nada, y no sé si esto solucione algo, sé que si el ácido clorhidrico topa mi piel me dejará marca de por vida. Espero que O'Hara me pueda por lo menos ayudar en algo.

De igual manera iré armado por si algo sale mal.

Saludos.

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Smash FC: 0345-1780-6302

ShEiK_PeDrO

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tyranitar 100

Esto ha sido totalmente inesperado, por si fueran pocos los problemas que ya tengo, ahora se presentan aun más. Confío en que en los años de vida del señor Fontalegre haya aprendido a improvisar, porque parece que no sabe qué es VIC.

Si consiguiera que bajase el arma, o por lo menos que bajara la guardia, le incustraría mi mini GPS en los ojos, teniendo cuidado de que no me vea venir, porque con la velocidad que tiene sería facil esquivarlo. Con un poco de suerte, la pantalla se romperá y se le clavavarán los cristales. Supongo que con la confusión soltará la pistola, momento en que la cogería y no dudaría en dispararle a una pierna. O a las dos. Sin embargo me interesa mantenerle vivo. Tengo que hacerle unas cuantas preguntas sobre Gruntick, o Parkfield.

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