Originalmente publicado por Javier Gascón

Pese a las buenas noticias que llegaron antes del partido desde Sevilla y Madrid, el Barça no varió en Pamplona el ritmo cansino con el que camina últimamente. La posibilidad de distanciar a los rivales directos en la lucha por el título no sirvió de estímulo al equipo de Frank Rijkaard, que ni presiona como antes en campo contrario ni mueve el balón a la velocidad que le convirtió en las dos últimas temporadas en un equipo mágico. Aunque ayer no estuvieran Ronaldinho, Messi y Eto'o, calidad queda en las botas de Xavi y Deco para enlazar alguna jugada aislada y aspirar a la victoria, pero este Barça sigue sin convencer.


Rijkaard sorprendió de entrada con la suplencia de Iniesta, uno de los jugadores más en forma en las últimas jornadas, ya sea como centrocampista o extremo diestro. Parecía la solución ideal para cubrir la vacante de Ronaldinho en la izquierda, pero el técnico holandés apostó por Ezquerro en una carambola motivada por una jaqueca de Gudjohnsen, que iba a ser titular. El riojano alternó su posición con Saviola y Giuly no se movió de la derecha. Los tres pusieron voluntad, pero poco acierto.


En defensa también hubo una modificación. Rijkaard ordenó marcajes individuales a Edmílson y Márquez sobre Soldado y Milosevic, respectivamente, con Puyol (colosal una vez más) haciendo de libre en una especie de 3-4-3 cuando Osasuna tenía el balón, aunque Rijkaard siempre dirá que su 4-3-3 es inalterable. La posición de Milosevic en la media punta motivó que Márquez hiciera más de pivote que de central.


Un par de veloces internadas de Giuly, mal resueltas en el centro final, y una ocasión de Saviola que detuvo Ricardo fue el pobre bagaje ofensivo del Barça en la primera parte, periodo en el que la mejor oportunidad fue de Osasuna. Un cabezazo de Milosevic, que remató increíblemente solo en un saque de falta lateral, obligó a Víctor Valdés a salvar el gol con una intervención felina.


En la segunda parte, peor todavía, pero con Osasuna más rezagado dando por bueno el empate. El Barça aburrió con un fútbol control sin profundidad que sólo se alteró con una gran ocasión de Saviola, que remató alto a bocajarro después de que Márquez peinara el balón en una acción a balón parado, y con un disparo lejano de Xavi que puso en aprietos a Ricardo. La entrada de Iniesta por Saviola en el 64 tampoco cambió demasiado las cosas y la reaparición de Eto'o en el 84 tampoco obró el milagro de romper el 0-0, pues no le llegó ningún balón en condiciones, pero por lo menos sirvió para sacar la mejor conclusión del aburrídisimo encuentro de ayer. Eto'o ya está aquí. Vuelve el dueño del gol. El Barça sigue líder y con Samuel sólo puede mejorar.

Originalmente publicado por Andrés Astruells

Todo el mundo pendiente de las reapariciones de Eto'o y Messi y, al final, el que realmente volvió fue Ronaldinho. A lo grande. Con dos goles espectaculares y unos destellos técnicos de auténtico crack. El brasileño fue el gran héroe del triunfo azulgrana sobre un voluntarioso y ordenado Racing de Santander, que metió el miedo en el cuerpo al disponer de un penalti con el marcador a cero.


Entonces apareció el segundo héroe: Valdés. Sobre un duro y seco lanzamiento del zaguero Garay,el meta azulgrana se sacó una estirada llena de reflejos y valentía. Neutralizó la amenaza del 0-1 y disipó posibles dudas. Queda el tercer hombre de la noche, que fue Andrés Iniesta. El pequeño centrocampista, escorado en banda derecha, se echó al equipo a la espalda y fue el auténtico motor del Barça a lo largo y ancho de una primera parte en que el Barça jugó con más entusiasmo que precisión. Adoleció de remate y de capacidad resolutiva en los metros finales. Algo que ya se detectó ante el Celta y se confirmó la pasada jornada en Pamplona, pero esta vez estaba Ronaldinho. Poco después de reanudarse el juego, en la segunda parte, provocó una falta cerca de la frontal del área y su lanzamiento prodigioso burló la barrera y coló el balón pegado al poste. Una vez más, el brasileño desequilibraba a balón parado. Conseguido el 1-0, estaba claro que el encuentro no se podía escapar y, ciertamente, pudo tomar proporciones de goleada tras el segundo gol de Ronnie, también sobre lanzamiento de falta, esta vez de Deco, que fusiló con un gran cabezazo. Ronnie quedó suspendido en el aire como un Jordan futbolístico o quizá como homenaje al gran éxito de los gigantes azulgrana en la Copa del Rey. Lo cierto es que su espléndido testarazo dejó sentenciado el choque. La jugada se produjo justo en el momento en que Rijkaard había dado la orden de que Messi entrara en juego. El argentino también tiene algo mágico. Participó poco, pero su sola presencia coincidió con los mejores momentos de fútbol azulgrana. Al final, el técnico parecía tener reservados unos minutos para Eto'o pero el camerunés se negó a participar del exiguo minutaje previsto en la fiesta y salió Oleguer, muy aplaudido tras los últimos sucesos, el que agotara el cupo de cambios mientras Ronnie hacía diabluras por banda izquierda y acariciaba el tercer gol.


Rijkaard mantuvo su estilo prudente, de rotaciones y pequeños ensayos. Esta vez puso a Edmílson de central y a Márquez de pivote defensivo para que sacara el balón desde atrás. Colocó a Iniesta como falso delantero y respaldó los méritos de un Saviola que ya no es tan amigo del gol. Nada de precipitaciones con Messi ni menos con Eto'o, pero en su guión, no sabemos si por sorpresa o por fortuna, saltó un as de su manga: el regreso de un Ronnie estelar.

Originalmente publicado por Omeg

No me ha gusatado nada esta victora del Barça xD , ganadolo todo pero no nos masacréis , me habéis decepcionado cules xD...
Bueno creo que este año os volvereís a llevar la liga , lo normal , y la cahmpions facilmente .
El Racing a la UEFA xD.!!!

Originalmente publicado por Naruto16

No entiendo tu comentario en negrita... Explícate, si quieres.

PD: A ver si animamos este post, solo veo noticias de Zillo.

Originalmente publicado por PReSo

Y C.Ronaldo XD................................................ ..................................