Sé bueno y te recompensaremos
Imagino que todos conocéis el experimento del perro de Pavlov. Junto con el gato de Schrödinger, es posiblemente una de las mascotas favoritas de la ciencia y la filosofía, así como un ejemplo perfecto de lo que pretende hacer Riot Games con sus jugadores más problemáticos del League of Legends.
Aplicar el condicionamiento clásico a los videojuegos, ¿es posible? ¿Es efectivo? ¿Es una demostración de que lo que separa a los monos salvajes de ciertos imbéciles que juegan al LoL es que los primeros se tiran caca literalmente y los segundos figurativamente?
El plan de Riot es ligeramente diferente: dar de comer bien a unos perros, dar la misma comida a otros y matar de hambre a unos últimos, lo que traducido a League of Legends sigfnifica que reforzará el comportamiento digno de los jugadores, no hará mucho caso a los que no lo hacen ni bien ni mal y pasará por completo de los que se portan mal, aplicando las medidas de siempre cuando se pasan de la raya: bans y todo eso. El refuerzo positivo, que aún está por clarificar, de momento parace que serán skins para los campeones. Nada del otro mundo.
Por eso yo me pregunto, ¿funcionará esto? A saber, seguramente no. Seguramente la gente no cambiará de hábitos por cuatro detalles gilipollas. Lo harían por, no sé, limitaciones severas, como impedirte usar tu campeón favorito si te banean mientras lo usas, por ejemplo. O si ofrecieran un campeón exclusivo si te portas como una ser humano jugando online. Pero todos sabemos que Riot no va a llegar tan lejos porque sabe muy bien que necesita a esos niños subnormales que plagan su juego y que son una base demasiado amplia como para destruir.
Es patético cómo cualquier servicio que tiene algo online, ya sea un videojuego o una web, necesita de su público más negativo porque, vaya, es el más reincidente, enganchado y el que más tráfico genera. ¿Por qué todos los foros tienen unos trolls que nunca parecen morir? Por la misma razón por la que hay tanto niño rata (odio este término, pero bueno) en League of Legends, DOTA 2 o Call of Duty: porque las compañías los necesitan y no pueden acabar con ellos, aunque quisieran.
Quizá por esta razón, en el fondo, me parezca bien este tipo de comportamiento que quiere potenciar Riot Games en League of Legends: ¿para qué castigar más todavía a los trolls si sabemos que no funciona y si, en el fondo, los necesitamos ahí? Es mejor intentar ganar unos pocos aliados, por pocos que sean, entre las filas del mal con estos regalos, o ganarse a la gente que está entre que sí y que no.
Como ocurre con el DRM y las medidas antipiratería, por mucho que se quiera, las restricciones y las políticas negativas terminan perjudicando al jugador que no ha hecho nada. Así que me alegro que por una vez se abrace el refuerzo positivo, incluso si eso nos conviere en perros de Pavlov. Mejor ser un perro que come que uno que se muere de hambre, yo qué sé.
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