Del homenaje al plagio sólo hay un píxel

Dicen que la línea que separa el homenaje del plagio es muy delgada. Tanto, que a veces no tenemos muy claro en qué bando nos encontramos, por muy buenas intenciones que tuviera el autor de la obra no original. Desde grandes artistas a gente sentada en su sofá que le da por hacer algo por la vida, todos han sido acusados de plagio alguna vez. Bueno, no todos, pero hay muchos casos. Hasta la gran Yuu Watase (Fushigi Yûgi) fue acusada de plagio (un plagio muy descarado por cierto) por uno de sus mangas, así que... ¿por qué no iba a pasar lo mismo en los videojuegos?

 

En Steam hay una increíble e inmensa cantidad de juegos. Recién salidos al mercado, de las más grandes empresas, indies, del año catapún... Y de vez en cuando (muy de vez en cuando) salen juegos que no conoce ni su madre pero que tienen muy buena pinta. A veces los descubrimos cuando acaban de salir, otras, explorando un poco en Greenlight. Ahora que está de moda el Early Access, también encuentras cosas muy jugosas por ahí. Y cosas muy meh, pero eso es como todo en esta vida.

 

¿Y por qué de hablar de plagio paso a hablar de Steam? Porque lo que me lleva al primer párrafo es, precisamente, el segundo párrafo. Bien, aclaremos este lío. Como si mi biblioteca de Steam no fuera ya lo bastante enfermiza, hace un par de días me dio por mirar los juegos Free To Play, que son muchos, pero como tampoco buscaba algo concreto simplemente me puse a pasar páginas hasta que algo llamara mi atención. Y así lo hizo Brawlhalla, si bien no me llamó en el sentido en el que debería.

 

Al leer los comentarios de este juego de lucha en 2D, me decía a mí misma: ¿La gente no se da cuenta de que es Smash Bros pero con vikingos raros? ¿Por qué nadie dice nada? Me puse a buscar avances y artículos en general sobre el juego por Internet, y leí cosas como “homenajeando a”, “parecido a”, “basado en”. ¿De verdad nos tomamos como homenaje algo que es una copia? Quiero decir, Super Smash Bros trajo sus novedades al género de lucha, además de ser un juego para Wii (y ahora WiiU y 3DS), que eso lo hacía tope exclusivo y mega guay; por otro lado no trajo nada del otro mundo, y a mí me sigue recordando a Power Stone. Pero está claro que cuando un juego copia al Smash Bros, se nota y mucho, por lo que no hay ninguna excusa.

 

¿Cuándo podemos tomar como homenaje un juego? Hombre, desde mi punto de vista, cuando hace un guiño a un juego anterior o algún tipo de referencia que nos recuerde, pero desde luego yo no puedo considerar homenaje algo que es exactamente igual al original con algunas pinceladas. No estoy diciendo que Brawlhalla no tenga buena pinta, que la tiene, y probablemente sea un juego muy entretenido, pero a mí me gusta llamar las cosas por su nombre. Lo siento, chicos, esto no es un homenaje, es una copia como otra cualquiera. Que no pasa nada mientras se haga por amor al arte, pero la cosa cambia si se quiere sacar dinero de ello.

 

Sinceramente, no he probado el juego porque lo que me parece divertido de Super Smash Bros es jugar con los mandos de Wii, así que quizás (por muy pc gamer que sea yo) Brawlhalla no me conquiste por sus controles. Aunque la idea de vikingos sí me llama un poco. Yo os invito a probarlo y ya luego me contáis. Pero que no lo llamen homenaje.

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