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Consejos para recién llegados a PlayStation VR

Lo que conviene saber
Por Julián Plaza

¿Habéis sobrevivido sin gastos al Black Friday y el Cyber Monday? Si no es así y aprovechasteis la ocasión para caer en la realidad virtual de PS4, sois bienvenidas y bienvenidos. Servidor es de los que cayó con el pack con gafas, cámara y PlayStation Worlds por menos de doscientos euros y, tras varios días haciendo y deshaciendo con el nuevo juguetito, tengo algunas recomendaciones para los que acabéis de volver de la tienda. Porque sí, como siempre, no todo viene en el manual.

 

PlayStation VR es capaz de ofrecer problemas en varios terrenos, desde la instalación hasta el instante en el que nos ponemos a jugar, un camino en el que también daremos con varios puntos intermedios que pueden ocasionar algún que otro quebradero de cabeza. Por eso, a base de varios cabreos y tardes de búsqueda, hoy puedo elaborar este rápido solucionador de problemas que no solo os permitirá disfrutar de vuestra nueva adquisición, sino que también le sacaréis más partido.

 

 

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Empezando por la instalación, lo primero que recomiendo es conservar la caja blanca con la que viene el set. PSVR es un lío de cables y no conviene que esté todo conectado si no vais a jugar. En mi caso, guardo las gafas en esa bonita caja de cartón con el símbolo de PlayStation y solo mantengo en uso la unidad de procesamiento y la cámara, que por cierto os recomiendo conectar a la entrada USB trasera de vuestra PS4 para evitar cables feos en el frontal. De esta manera conseguiréis hacer que vuestro espacio de juego se mantenga, casi, a como estaba antes de la nueva compra.

 

Si tras montar el setup seguís con una imagen poco definida, si veis borroso, es momento de entrar en la sección de ajustes de personalización. Lo que debéis conseguir es que lo que veáis en dirección horizontal a vuestra línea de visión esté tan definido como sea posible. Para lograrlo, la unidad de realidad virtual tiene una configuración predeterminada que puede cambiarse desde la sección de dispositivos, en el menú de ajustes. En esa sección os recomiendo, sobre todo, bajar la iluminación y configurar manualmente la distancia entre ojo y ojo.

 

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Son los dos aspectos que más ayudan a ver mejor, y si no recordad que a unas malas podéis jugar con gafas o lentillas vigilando no ajustar demasiado el frontal de las gafas con vuestra montura. Para lograr una experiencia más inmersiva si no podéis acercar del todo las lentes a vuestros ojos, apagad lámparas y bajad ventanas para que no os distraigan las pequeñas fugas de luz que puedan llegar a existir. Como detalle final, en esa misma sección de ajustes también os recomiendo poner el tamaño de la pantalla en ‘medio’, porque es habitual que las partes más periféricas de vuestro campo de visión se difuminen con la VR, y así no tendréis esos problemas con el menú.

 

Yendo a los juegos, es capital que os descarguéis los dos paquetes de demos gratuitas de la eShop para ver qué os gusta más y, más importante si cabe, con qué juegos podéis llegar a tener problemas. La VR es una de las tecnologías más proclives a causar cinetosis y, como padecedor de este problemilla, os digo que las cosas no pintan tan negras como parece. Aparte de hacer pausas cada media hora, es posible que vayáis desarrollando una mejor tolerancia a determinadas experiencias que os podían marear en un principio. Intentad que la cosa sea gradual, empezando por un título en el que estéis estáticos, e id saltando a algo más movidito cada vez que lo último esté dominado. Puede que no lleguéis a jugar nunca a Eve Valkyrie o a Bravo Team, pero yo por ejemplo ya estoy cómodo con algunos shooters que antes ni me planteaba tocar.

 


Volviendo al catálogo, afortunadamente hay demos para casi todos los juegos, y son la mejor manera de saber si algo merece la pena. Si os planteáis comprar PlayStation Move, haced antes una lista de los títulos que os interesen y que usen los controladores; los hay, pero ya os adelanto que no son mayoría y conviene saberlo teniendo en cuenta lo que cuestan. Tras un par de años, la oferta de la Store centrada en la realidad virtual ya es bastante maja y sigue en crecimiento, por lo que es un buen momento para empezar a escoger, con más gusto que prisas, qué titulo es el escogido para gastar vuestro dinero.

 

Como veis, hablamos de un gadget que necesita muchos más preparativos de lo normal, y de una tecnología que parece que va encontrando su espacio siendo algo más complementario que sustitutivo al juego tradicional. Es un buen momento para dar el salto y, si lo hacéis, que sea sin tener problemas. Espero haber ayudado a ello.


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