Con Pikmin 3 vuelve la Nintendo más exigente

Muchos pueden pensar que como Nintendo es la compañía que hace los juegos más user-friendly, con sus Wii Fits, sus Brain Trainings, sus New Marios y todo ese tipo de juegos a los que hoy en día se les etiqueta como accesibles, ya no son capaces de proporcionar retos a sus usuarios, que no hacen juegos difíciles, vaya. Y están muy equivocados.

Aunque la Nintendo de GameCube y la Nintendo actual son muy diferentes, en realidad no han cambiado tanto para sus franquicias principales. Podemos pensar que por aquel entonces los juegos eran más difíciles, pero con el ejemplo de Mario, vemos cómo Super Mario Sunshine, a pesar de la originalidad y la variedad que daba la A.C.U.A.C., no era capaz de enrevesarse ni de lejos al nivel en que lo consigue Super Mario Galaxy. La dificultad no está perdida, aunque casos como Kirby o los New Mario corran en dirección al público masivo.

Con el caso de Pikmin 3, uno de los juegos más esperados de lo que tiene Wii U en el horizonte, Shigeru Miyamoto ha declarado que no quiere rendirse ante ese público que sólo busca cosas fáciles. La mayoría de las críticas de Pikmin iban contra el factor estresante de su tiempo límite que desapareció en el segundo, y ahora, quieren que Pikmin 3 vuelva a ofrecer un reto de estrategia.

Evidentemente, aún hay quien piensa que Pikmin sólo es un juego de recolección de objetos con algún enfrentamiento ocasional, y no podrían estar más equivocados. Es cierto que el primero pudo echar a muchos para atrás por el límite de tiempo, más de días que de las horas de cada uno de los días. El límite de 30 días para conseguir todas, o casi todas las 30 piezas de la nave era angustioso al ver que podías tardar tres días en acostumbrarte a todas las mecánicas, o que un paso desafortunado podía llevar a que un pájaro gigante se comiese a más de la mitad de tu ejército y fuese un día perdido.

Pero quitar el límite de tiempo a Pikmin 2 no hizo que el juego fuese más fácil. Puede llevarse de una forma más distendida y hay mucho más factor recolección con unos bichos monos cargando con objetos reales que parecen gigantes, y eso se hace atractivo para casi cualquier tipo de jugador, pero el desafío sigue en pie a pesar de la falta del límite de tiempo.

Parece que en este caso Miyamoto se ha dejado llevar por las opiniones generalizadas de quien no ha profundizado mucho en ninguno de los dos juegos. Ni el primero es tan desesperante por el límite de tiempo ni el segundo es precisamente fácil. Pikmin es una saga que se caracteriza por engañar al jugador haciendo que se confíe con su aspecto para luego mostrar una dificultad impía, y es ni más ni menos lo que esperamos de Pikmin 3, con o sin límite de tiempo.