Cómo funciona el sistema de progresión en Sekiro: artes, vitalidad, herramientas y ataque

Parece mentira que a estas alturas del cuento, después de tropecientos artículos sobre Shekiro: Shadows Die Twice, aún no haya hablado de cómo funciona su sistema de progresión. Claro, con tanto obsesión con la katana, los choques de armas, la dificultad y la metafísica del combate, hemos dejado sin responder todas esas preguntas que quieren saber qué pasa cuando mueres, cómo evoluciona el personaje y demás vaionas, o si lo preferís, cuentas de rosario. 

 

 

No es un RPG

Lo primero que se ha dicho, por activa y por pasiva, antes incluso de que saliera al mercado, es que Sekiro no es un RPG ni un Souls. Lejos del sistema de ropajes, armas, armaduras y almas de los Souls, lo que ofrece la incursión en el mundo Shinobi por parte de Miyazaki y From Software es un juego de acción y aventuras en el que la progresión, como si de un Zelda se tratara, está más sujeta a la derrota de determinados jefes y la obtención de determinados objetos que a la experiencia propiamente dicha, si bien no falta su barrita de almas que, aquí sí, roza un poco el sistema clásico de la firma. 

 

Dicho esto, la progresión en Sekiro funciona mediante el planteamiento de varios elementos mejorables, cada uno con su propia forma de progresar. Empezamos con el propio Lobo de un Solo Brazo, que puede aprender diversos estilos de lucha que incluyen distintos golpes y beneficios pasivos así como nuevas técnicas y ventajas. Luego tenemos el brazo protésico, mejorable y ampliable, la postura y vitalidad, y el ataque. 

 

 

Fromas de progresión

En lo que respecta a las capacidades de Lobo, lo primero es conseguir algún manuscrito de artes de lucha. Un árbol de habilidades que iremos comprando con almas, y que nos permitirá incluir un nuevo golpe al catálogo entre varios a elegir, nuevas posibilidades como usar herramientas en salto o encadenar ataques dobles, más talismanes para usar las herramientas shinobi, y otras ventajas. Para desbloquear estas habilidades, como decía, tendremos que gastar los puntos de almas que conseguimos al derrotar enemigos, por lo que no queda descartado el grindeo en Sekiro, a pesar de las primeras informaciones al respecto. 

 

Junto a esto tenemos dos valores separados: Vitalidad/Postura y Ataque. Estos son mucho más difíciles de incrementar, ya que no dependen del grindeo, sino de nuestro avance en la aventura y de la derrota de distintos enemigos especiales. Por un lado, la Vitalidad la incrementaremos reuniendo cuatro cuentas para completar un rosario, teniendo que enfrentarnos a distintos mini-bosses y enemigos especiales. Más difícil aún es el ataque, que sólo se incrementa tras derrotar a jefes legendarios al recordar el combate en nuestra memoria. 

 

 

Luego tenemos el brazo protésico, que podremos mejorar encontrando y comprandop distintas herramientas shinobi por el escenario. Una vez derrotado un determinado jefe, podremos también mejorar estas herramientas y potenciar su utilidad mediante el gasto de materiales como pólvora y hierro. Finalmente tenemos la calabaza de salud, que aumentará su capacidad según vayamos encontrando semillas de calabaza en los cuerpos de los enemigos fuertes y algún que otro cofre. 

 

Como veréis, progresión hay, pero no es tan sencilla como limitarse a grindear niveles, ya que nos obligará a enfrentarnos a poderosos enemigos y seguir adelante si de verdad queremos mejorar. Respecto a la muerte, otra pregunta recurrente, sí, al morir definitivamente perdemos gran parte de las almas y dinero que llevemos, si bien recibiremos ayuda en este sentido y siempre tendremos la posibilidad de comprar monederos para guardar nuestro dinero sin que desaparezca. Sin más, recomendandoos encarecidamente que leáis el análisis de Mou, me vuelvo a Ashina.

 

¡Nos leemos!

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