Chloe es mejor protagonista que Max en Life is Strange
Todavía estoy pensando en el segundo capítulo de Life is Strange: Before the Storm, que tanto nos ha dado de sí. A mis impresiones en texto, en podcast y junto a las teorías de Adrián, quiero centrar en esta ocasión el objetivo de nuestra cámara en las protagonistas de los dos juegos de la franquicia. Max fue la chica que nos descubrió el mundo de Life is Strange, con sus dotes artísticas, su timidez y la posibilidad de ser mucho más moldeable; Chloe, por su parte, nos trae en Life is Strange: Before the Storm un huracán de emociones y una personalidad muy marcada, aunque con cierta fragilidad.
Para mí, Chloe es mucho más interesante que Max y se demuestra en esta segunda serie. Parece mentira, porque un título que se basa en la toma de decisiones y en hacer que la historia sea nuestra, parece admitir menos a una personalidad fuerte y con carácter que a otra más neutra e incluso insulsa. Lo pensaba antes de jugar a Life is Strange: Before the Storm, pero ahora las sensaciones son muy diferentes. Gracias al poder de decisión que tenemos en nuestras manos, las disyuntivas que encontramos en el juego son una muestra del sentir de Chloe. No es decidir como tal, sino bucear en su mente y en su corazón para conocer de primera mano qué es lo que ronda por allí. Con Chloe, no estamos moldeando su personalidad para que sea como nosotros queramos, sino que estamos actuando de guía. Somos ese consejero invisible que le susurra cuándo debe mostrar algunos sentimientos y cuándo no, pero en ningún momento este personaje abandona su personalidad y su manera de actuar.
La sensación con Max en Life is Strange es diferente. Es cierto que es un personaje más acertado a la hora de plantear la mecánica de los viajes en el tiempo (que se pierde en Before the Storm), porque su mente más analítica y centrada nos permite actuar con lógica, comprobar las posibles consecuencias de una decisión y volver atrás en el tiempo en caso de que piense que no es algo correcto. Chloe es un terremoto, y tiene más sentido que actúe por impulsos y que no haya opción a regresar atrás en el tiempo, convirtiendo sus decisiones en pequeñas baldosas que van formando su camino.
No quiero que me malinterpretéis al decir esto, ya que no pienso que Max o que Life is Strange ahora mismo sean peores que Chloe y que Life is Strange: Before the Storm, pero sí que creo que son conceptos muy diferentes y eso es bueno. Max era más insulsa, lo que favorece la toma de decisiones dispares apoyadas en las mecánicas de los viajes temporales, mientras que Chloe es todo lo contrario, lo que positiviza unas respuestas únicamente basadas en su personalidad con consecuencias irreparables. Son dos maneras de jugar, con dos títulos estupendos. Pero algo en mí se ha despertado para que, de forma totalmente personal, prefiera a Chloe como protagonista.
<< Anterior Siguiente >>