Abarca Wii U demasiado?
Hace unos meses fue Polygon la que se quejó de que Wii U ofrecía demasiadas posibilidades y no se centraba en un solo aspecto como hizo Wii en su día, teoría que ha refrendado hace poco el amigo Molyneux. ¿Hasta que punto se diluye la experiencia Wii U?
El argumento en ambos casos viene a ser el mismo. Las últimas consolas de Nintendo se han centrado en un solo argumento de venta que han potenciado hasta la saciedad y que les hapermitido salir victoriosos. Si DS le ganó la pantalla a PSP gracias a su doble pantalla y, sobre todo, a la pantalla táctil; Wii hizo lo mismo introduciendo el sistema de control por movimientos, que alumbró la mayor revolución de la pasada generación.
Argumentan los críticos de la consola que Wii U pretende abarcar demasiadas características y que su oferta al final se queda a medio camino. Sí, la tableta introduce el concepto de jugabilidad asimétrica que está muy bien pero nadie acaba de ver claro del todo que su llegada suponga un impacto como el que supuso Wii. Además, Wii U sigue haciendo uso del control de movimiento de Wii, y además introduce un mando al estilo del de Xbox para dar cabida al juego hardcore.
En otras palabras, aseguran que Nintendo quiere abarcar demasiado sin centrarse en un público objetivo y que ahí puede estar su error. Pero las estimaciones iniciales de reservas le están llevando la contraria a los agoreros (ya hay más reservas de Wii U a tres días de su lanzamiento en Estados Unidos que las que se hicieron con su antecesora) y la idea del mando tableta está calando, poco a poco, entre los jugones.
No hay que olvidar que el éxito de Wii se debió, en gran parte, al boca-oreja. Esas manadas de casuals que se hicieron con la consola no se la compraron porque lo fliparan viendo el E3 de turno, no. Si la consola llegó a un público tan amplio fue a través de una buena campaña de marketing y a una base de usuarios, hardcore, que dio a conocer la máquina a sus conocidos y extendió la palabra.
Dicho esto, me parece que la tableta de Wii U introduce un componente lo suficientemente interesante como para que sea un argumento de venta por sí mismo. Sí es cierto que el gran miedo que acecha a Nintendo y a sus consumidores es que las third parties vuelvan a dar la espalda a Wii U de la misma manera que hicieron con Wii.
Es más, si echamos la vista atrás, podemos ver que Nintendo ha marcado la pauta en cuanto a innovación en los últimos tiempos. Y, ojo, esto lo dice alguien que se pasa la vida pegado a su PS3 y su Xbox 360, modelos tradicionales de negocio, pero que palidecen frente a la innovación propuesta por Nintendo. Llámese utilizar una pantalla táctil para jugar o utilizar un sensor de movimiento que nos obligue a estar de pie frente a la pantalla. No ha salido a la calle, y Wii U ya tiene un competidor en Smart Glass, señal de que en Microsoft preocupa que esa doble pantalla pueda ser otra revolución. Una revolución, eso sí, que llegará de la mano de los usuarios, los únicos que pueden dar el visto bueno a la propuesta de Nintendo.
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