Nintendo no sabe aprovechar su hardware
Tengo una Wii U. Está criando polvo. También tengo una Wii. Está criando polvo. Bueno, miento, uso la Wii para jugar a títulos de la Gamecube, pero en el momento de comprarlas no imaginé que acabarían así, al menos tan pronto. Supongo que todo se debe al catálogo, ya que las otras plataformas tienen títulos mucho más atractivos, pero creo que hay otro motivo. La razón por la que me compré esas consolas de lanzamiento. El por qué me siento tan frustrado con su resultado.
Sus mandos.
Admito que con Wii consiguieron hacer un par de títulos que realmente se aprovechaban de los sensores de movimiento, pero la gran mayoría eran traducciones de los controles de un mando tradicional que la mitad de las veces no aportaba tanto a la experiencia y la otra mitad hacía desear que tuvieras un mando normal (ay, Spiderman 3). Cuando anunciaron Wii U me fascinó su propósito: esa pantalla secundaria integrada en el mando que ofrecería nuevos horizontes a explorar y abriría las puertas a un mundo de partidas multijugador offline asimétricas. Era un momento para soñar.
Hoy miro el catálogo y me pregunto por qué.
No hay muchos juegos que realmente se aprovechen de las características del mando de Wii U. Nintendo Land y Wii Party U probablemente sean los que le sacan mejor partido, pero son títulos casuals sin mucho impacto entre los jugadores. No son killer apps; ni siquiera sabría si defenderlos como justificadores de compra. Los otros juegos que se me vienen a la cabeza son The Wonderful 101, New Super Mario Bros U, Rayman Legends y supongo que Pikmin 3. Y aunque New Super Mario Bros U y Rayman Legends ofrecen multijugador offline asimétrico, no deja de parecer algo extraño. No voy a negar que sea entretenido jugar poniendo bloques sobre la cabeza de Mario para hacer que caiga a un pozo sin fondo y muera, pero en el fondo me recuerdan al forzadísimo multijugador de Super Mario Galaxy en el que el segundo jugador sólo podía lanzar estrellas. Lo que vengo a decir es que quizá un multijugador tradicional habría venido mejor con esos títulos, y sí, es gracioso el invento, pero no es algo memorable.
Mantengo aún la idea de que Nintendo está evitando el riesgo. Con todo lo bueno que pudiera ser Super Mario 3D World, no parece estar al nivel de experimentación e innovación de Super Mario Galaxy o incluso Super Mario Sunshine. Donkey Kong Country: Tropical Freeze repite los esquemas que lleva mostrando el icónico simio desde Super Nintendo sin atreverse a jugar con su personaje como hacían Donkey Konga o Donkey Kong 64 (aunque sí, los resultados podían ser cuestionables). Una vez más, esos juegos han sido halagados por su solidez mecánica y parecen títulos de calidad jugable, pero antaño Nintendo significaba más que eso. Con Wii U, Nintendo ha puesto una base realmente sólida para reescribir todas sus sagas y darles un toque fresco, e incluso podría traer nuevos géneros para tomar terreno en el que las consolas no pueden competir. Quizá Pikmin 3 esté traduciendo controles, pero no deja de recordarnos que la estrategia encajaría perfectamente en esa consola. Aunque sea un nuevo Advance Wars ¡pero dadnos algo!
Y no olvidemos el juego asimétrico. Tenemos Evolve y The Flock. Ambos títulos juegan con el mismo concepto: un grupo de jugadores tiene que cazar a otro que va por libre. Imaginaos reunir a los amigos para echar unas partidas a Evolve en Wii U: los humanos compartirían pantalla en el televisor y así podrían verse los unos a los otros y coordinarse mejor, mientras que el monstruo estaría sentado lejos, mirando a su pantalla. Pero adivinad en qué consola no van a salir. Penny Arcade propuso una idea genial para hacer un juego de Dragones y Mazmorras con el concepto de juego asimétrico ¿dónde hay que pagar para que eso ocurra?
Muchos me preguntan por qué odio a Nintendo, pero en realidad no es odio. La Gran N es una compañía llena de talento y creatividad, tal y como ha demostrado una y otra vez, y se atreve a ofrecer algo distinto desde la propia base del hardware. Donde otros compiten por ver quién puede renderizar mejor las explosiones, Nintendo quiere ofrecer experiencias sólidas y para todos. Pero el problema es que los de Iwata o bien no saben ver las oportunidades o no las toman. Cuando estuvo todo el asunto del nintendoom no tardó en salir la cifra de que la compañía podría perder 250 millones de dólares al año y aguantar hasta 2052, así que seguramente no estén actuando por miedo. Lo que me da rabia de todo este asunto es que si la compañía supiera aprovechar realmente las posibilidades de su consola seguramente tendría el mejor hardware de sobremesa de la generación y una serie de títulos frescos y realmente interesantes.
Pero no quieren hacerlo. Por algún motivo todas esas promesas y sueños se vienen abajo, y Wii U es una consola técnicamente inferior, con ports inferiores, un catálogo limitado y un mando demasiado grande y caro. No sólo creo que la gente no comprase Wii U por falta de comunicación (aunque no negaré que eso debió de jugar una parte significativa); también pienso que muchos no dieron el paso porque temían que se la volvieran a meter como hicieron con Wii. Y, en efecto, ha ocurrido. Ha sido todo un truco. Fumum vendidi.
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