La de sorpresas que nos hemos llevado

Es curioso de lo que uno se va dando cuenta cuando recopila los juegos que han pasado por sus manos durante este último año. Habréis podido ver en la web esa clasificación que hemos hecho en Mundogamers de los juegos de 2013. Pues ocurre un poco que nos ponemos a pensar en juegos que nos han encantado y otros de los que esperábamos mucho y nos han dejado algo desinflados. De esta forma hemos tenido un año en el que nos hemos topado tanto con sorpresas gratas como decepciones.

 

Y no habría sido fácil predecir el éxito o fracaso de muchos de ellos. Recordemos cuando oímos hablar de Alien Colonial Marines. Todos queríamos recorrer sus pasillos y sentir la tensión por la que pasó Ripley en El octavo pasajero. Y ¡zas!, batacazo al canto. Otro que pintaba muy bien era el FPS ambientado en la serie The Walking Dead. Pero también se tornó decepción, dejándonos ante un juego de acción algo descafeinado. También hemos tenido esos juegos que trataban de continuar una saga ya finalizada, como God of War Ascension o Gears of War Judgement. Pero realmente, de estos últimos, no esperábamos gran cosa.

 

Aunque, por supuesto, no todo ha sido malo. Este año hemos tenido títulos que han cumplido nuestras expectativas y otros que las han sobrepasado. Como grandes, se nos dibujó una sonrisa cuando vivimos cada bofetada que nos daba The Last of Us o pisar sobre suelo firme con un nuevo GTA V al que poco o nada teníamos que reprochar.

 

 

Otros buenos juegos han pasado por nuestras consolas sin pena ni gloria. No es que tuvieran nada de malo, pero parece que no llegaron a impactar tanto como pudieran haber merecido. Tal es el caso de Guacamelee!, que de forma cómica nos sumergía en un Beat´em upbastante dinámico. Virtue´s Last Reward que, quizá por encontrarse en inglés íntegro o por su complejidad a la hora de venderlo, quedó un poco en las sombras.

 

Pero que nos permitan romper con lo obvio y pasar a hablar de las sorpresas que hemos descubierto. Un Stanley Parable que nos rompiera los esquemas y riéndose de como hemos pasado a ser autómatas de la vida y del juego. Kentucky Route Zero nos atrapa con cada episodio. Si los juntamos a Gone Home y otros más, nos damos cuenta de que en esta última etapa se ha recompensado a esos estudios más pequeños con grandes ideas y duro trabajo. Así que, en cierto modo, podemos ver como ya nada es tan predecible o está tan claro. Los AAA pueden ser grandes apuestas o grandes decepciones y un pequeño grupo de desarrolladores con buenas ideas y ganas, pueden darnos justo lo que necesitamos. ¿Cuáles han sido vuestras grandes sorpresas del año?¿Os habéis llevado algún traspiés de esos que duelen en el bolsillo?

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