Frontier Expo 2017, expandiendo los horizontes del managing
Mientras el ruido generado por la Barcelona Games World eclipsaba todo lo demás, el fin de semana pasado también tuvo lugar la Frontier Expo 2017, la primera de su naturaleza, y servidor se desplazó hasta tierras británicas para darle cobertura. En ella se dieron a conocer las últimas novedades sobre Elite Dangerous, Planet Coaster y, especialmente, Jurassic World Evolution, la gran novedad de Frontier para 2018.
El evento, que acogió a poco más de mil personas (fans en mayor medida), tuvo bastante pisada en los directos de Twitch gracias a la ferviente comunidad que han ido edificando el explorador espacial y el constructor de parques de atracciones del mismo estudio, cuyo seguimiento es tal que cualquier expansión se celebra como un nuevo videojuego. Es algo que se palpó en el ambiente, donde actualizaciones de contenido de la misma naturaleza que los DLC de Los Sims 4 fueron recibidas entre gritos y ovaciones, como si el espíritu del E3 se adueñase del escenario por unos segundos. Que hay una audiencia consolidada es indudable, que la feria consiguiese expandirla me parece algo más debatible. En cualquier caso, esto es lo que se anunció.
Empezando por el plato supuestamente fuerte, los dinosaurios de Spielberg se dejaron caer con un breve gameplay de poco más de dos minutos que tenéis sobre estas líneas. La demostración, centrada en el músculo del motor de Jurassic World Evolution, evidenció que en lo que a animaciones y recreación visual se refiere el juego ofrecerá unos valores de producción bastante altos. Sabemos que contaremos con cinco islas en las que tendremos que construir un parque que sufrirá todo tipo de condiciones adversas, propicias para el desastre en mayor medida, y en el que las especies se añadirán solo si diseñamos su genoma, tal y como ocurre en los filmes. Tras hablar con Mike Brookes, su director, rascamos unos cuantos datos más: no se contemplan mods, hay un total de doce especies, no habrá un modo en primera persona y se contará con la banda sonora original de la franquicia. Viendo lo que promete el juego y lo que puede ofrecer a los fans, lo cierto es que lo anunciado supo más bien a poco.
Pasando a Planet Coaster, se presentó una actualización masiva y gratis con motivo del aniversario del juego, que vendrá con caramelos como el editor de escenarios, el manejo de la plantilla de trabajadores (a la que se añaden los relevos) y nuevas montañas rusas cuya personalización permitirá cambiar los trenes de cada una con un solo click. El mencionado parche 1.4 todavía no tiene fecha, pero fue palpable que las ganas del mismo son muy altas. Tras lo dicho se saltó al hijo pródigo de Frontier, el simulador espacial a gran escala conocido como Elite Dangerous.
Aquí se pasó de una a cuatro actualizaciones de contenido de todo tipo: más naves, misiones, escenarios y herramientas como una IA (Galnet Audio, se llama) que reproducirá en voz todos los mensajes del juego. Dado el factor de exploración de ED, Frontier se guardó muchos ases bajo la manga para no contar más de la cuenta, pero es evidente que 2018 será el gran año de los Targoides, la raza alienígena con la que ya se ha establecido contacto desde hace meses. Dentro de lo que sí se presentó, lo más destacable fueron unos ingenieros que ahora aprenden y mejoran a medida que les encargamos nuevas construcciones, y los escuadrones, una nueva herramienta para jugar en comunidad que ofrecerá la posibilidad de compartir una misma bandera, contar con una nave nodriza particular y recargar recursos en compañía mientras se viaja.
Dado el recorrido de Elite Dangerous y la más que segura coincidencia de Jurassic World Evolution con la próxima película de la nueva trilogía, imagino que tendremos una nueva Frontier Expo el próximo año. Como digo, fue un evento familiar enfocado claramente a los que ya cuentan con los juegos de los que se habló, exceptuando obviamente a los dinosaurios, y espero que en la segunda edición se revise mejor la pisada mediática que este acercamiento puede suponer. Eché de menos alguna demostración real del parque jurásico en plena partida, pero también volví a casa con más ganas de verla. Aun así soy optimista, hasta el verano de 2018 tiene pinta de que lo visto solo puede mejorar.
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