David Cage dispara con bala
No deja títere con cabeza: prensa, público, industria

Jugosas declaraciones de David Cage en la convención D.I.C.E. A su habitual discurso contra la secuelitis no ha dudado en culpar a todos los sectores del videojuego (prensa, público, estudios) de las males que lo aquejan.
Todos sabemos que el Cage es amigo de granjearse odios viscerales con sus declaraciones. Es una especie de Molyneux más destroyer y cuyos juegos sufren en sus valoraciones más por la opinión que la prensa tiene de él que por sus trabajos en sí. El responsable de Quantic Dream, en el punto de mira en los últimos meses desde que se desvelara que trabaja en Beyond, ha hablado sobre los retos a los que se enfrenta la industria en el futuro y ha apuntado varias ideas interesantes.
Quizás la más jugosa y la que, a juicio personal, es más laboriosa, es la de romper el vacío generacional entre la generación que ya ha crecido con un mando en sus manos y la que todavía lo ve como un elemento ajeno. Cage dice que hay potencial para llevar el videojuego a nuestros padres y a nuestros abuelos más allá del Brain Training de turno, que se pueden contar historias que les interesen pero, sinceramente, creo que esa es una batalla perdida y que el videojuego se asentará como medio dominante cuando, dentro de veinte años, la generación que vio nacerlo sea la que esté a un paso de jubilarse.
Sí que creo que hay una batalla que pelear en la relación entre la prensa y el medio. Cage dispara con bala cuando asegura que debería dejarse de una vez la puntuación de aspectos técnicos para centrarse en análisis que aborden el juego desde el rigor y la intención de transmitir una visión de conjunto al usuario. Si bien creo que en este último punto se ha avanzado mucho en los últimos años, todavía nos queda un trecho para superar la absurda política de las notas, esa que asegura que un siete es un suspenso.
Y aunque Cage también culpa a los usuarios del actual panorama de juegos de tiros y secuelas a mansalva, no creo que el gran público tenga la culpa de ello. «Comprar un juego es como depositar un voto en unas elecciones», razona. El problema, a nuestro entender, no es que exista una oferta de grandes superproducciones. Si nos vamos al cine, ese medio con el que siempre busca lazos de unión, la cantidad de blockbusters al año es considerable, pero la industria del cine también se mueve gracias al cine de autor y al cine de género, dos ámbitos que en el videojuego actual son extremadamente minoritarios.
En su ferviente aspiración por estrechar lazos con Hollywood, creo que Cage se equivoca. No porque, como él dice, «hay que explorar otros temas más allá de la violencia como la política o las relaciones interpersonales», sino porque el videojuego tiene un lenguaje propio que no necesita del cine para desarrollarse en todo su esplendor. Pero en ese argumento que asegura que está cansado de que sólo se explote la vía de la violencia, no puedo hacer otra cosa que darle la razón.
Claro que existe más oferta, pero si echamos un vistazo a los AAA de los últimos años para las grandes consolas nos encontramos con un puñado de títulos cuya mecánica es siempre la misma: pon un arma en tus manos y acaba con todo bicho viviente. Quizá por ahí podamos construir el cambio...



Yo soy de los que piensa que la narrativa tienen un largo camino que recorrer en los videojuegos, y que igual que no hay sólo películas de violencia, tampoco debe haber sólo videojuegos violentos. Es más, no sólo hay videojuegos violentos. Hay videojuegos de muchos otros tipos, y ahora mismo os aseguro que aunque sea el típico género puzle, mi madre le dedica bastante más tiempo a los videojuegos del que le dedico yo. Ahí tienes otras audiencias, otros géneros. Quieres contar una historia madura y sin violencia para gente mayor? Hazlo. Seguro que hay máquinas en las que puedes hacerlo, y en las que no te centrar en los gráficos, como dispositivos móviles.
Hay una cosa que puedo contemplar como cierta. Nosotros, el público al que va dirigido el mensaje, y las personas que nos lo hacen conocer, la prensa, muchas veces rechazamos cuando algo se sale de la norma, o es distinto. Pero muchas veces ellos, los creadores, para asegurarse unas ventas no hacen otra cosa que ofrecer lo mismo, una y otra vez. Incluso cuando crean algo nuevo y bueno, intentan "redondear" las ventas en las secuelas haciendo que se parezca al superventas de turno. Y de eso, de su creación artística, de la decisión de hacia donde va lo que cuenta, yo no tengo la culpa. Igual es él, igual es su jefe, pero no soy yo, seguro.
Beyond para mí será fiel a las palabras de su creador si cuando salga nadie dice "Ahm, otro (Insertar aquí 'CoD-GoW-Uncharted-Alan Wake-GTA, el que corresponda)". Si alguien lo hace, sabremos que Cage sólo busca crear polémica y que como creador, es la imagen rediviva de la pregunta que más se debería formular en esta industria: Fue antes el huevo o la gallina?