Assetto Corsa Competizione es el simulador más descarnado y exigente del mercado
Tras aparecer el pasado año en PC, Assetto Corsa Competizione acaba de hacerse un hueco en PS4 y Xbox One con un port que ofrece un peor rendimiento pero que sabe mantener el tipo. Aquellos que conozcan la franquicia sabrán a lo que se van a enfrentar: uno de los simuladores de conducción más realistas y exigentes del mercado. Uno que pone a prueba todas las capacidades del piloto y que castiga cada mínimo error al volante. Si quieres sentir esa dureza e imposición en cada frenada sabrás disfrutar cada minuto del juego.
Assetto Corsa Competizione es implacable. Incluso en la dificultad más baja y con la mayor parte de las ayudas a la conducción activadas (esta fue mi elección para comenzar a jugar durante las primeras horas) no da descanso. Pasarse de frenada un par de metros puede suponer la pérdida de la trazada correcta en una curva, perdiendo tiempo o la posición en carrera. Exigir más de lo que se debe al coche puede llevarnos fuera de la pista, echando al traste un fin de semana de gran premio al completo por un mínimo error. A pesar de ello, es un juego agradecido con el jugador insistente y con el aprendiz que desea estar a la altura, haciendo que la progresión natural (ir quitando ayudas y aumentando la dificultad paulatinamente) se sienta como un trofeo ganado con el mayor de los esfuerzos.
La obra dispone de licencia oficial para la competición Blancpain GT Series, con 24 vehículos oficiales y 11 circuitos reales, trasladados al juego con un sistema de tecnología punta. Lo mismo ocurre con el clima y el tiempo, con un sistema muy realista y crudo donde cualquier impacto climatológico variará el comportamiento del coche en la pista. Dominar cada uno de estos automóviles y aprender cada pequeño tramo de esas pistas nos llevará muchísimo tiempo, por su propia concepción y exigencia. No es un simulador accesible y requerirá que practiquemos muchas horas antes de que podamos llegar a disputar alguna buena posición en carrera. Nos machaca y nos aplasta, exigiendo siempre la máxima concentración.
Los modos de juego son los típicos, con un modo carrera que nos invita a vivir la experiencia de un piloto recién llegado a la competición, con campeonatos, carreras sueltas, fines de semana y contenido online. Assetto Corsa Competizione nos permite disfrutar del juego como queramos, modificando cada pequeño ajuste de las pruebas, aunque manteniendo el reto solo al alcance de los jugadores más experimentados o de aquellos que estén dispuestos a la práctica más enfermiza.
Ese nivel de exigencia y su capacidad de enfrentar al jugador a los retos más realistas, por desgracia, no camina a la par de las prestaciones que Assetto Corsa Competizione ofrece en esta versión para consolas. Al contrario que la versión de PC, PS4 y Xbox One ofrecen el juego a 30 FPS, lo que se deja notar en la conducción y en la comparación con otros muchos simuladores del mercado que sí logran alcanzar los 60 FPS. Tampoco cuenta con un nivel visual demasiado alto como para justificar este recorte, lo que resta mucho atractivo a estas versiones. Sin embargo, el juego no ofrece problemas de rendimiento y se puede disfrutar sin complicaciones, pero tened en cuenta esta limitación.
Assetto Corsa Competizione es, probablemente, el simulador de conducción más exigente del mercado. También es uno de los más atractivos para aquellos que busquen un reto de ese nivel, aunque se queda muy atrás en cuanto a opciones, competiciones, rendimiento y atractivo general si lo comparamos con los grandes exponentes del género. No es una obra recomendable para cualquier usuario, pero sí para quien busque la conducción más descarnada e intimidante dentro del mundo de los videojuegos.
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