Bioshock 2, caso excepcional. Secuela más o menos inmediata, de un clásico instantáneo en la industria del videojuego, por su espectacular ambientación, indiscutible carisma y ciertos conceptos argumentales o narrativos de gran potencia (como sus giros de guión, las peliagudas tesituras en las que nos ponían como jugadores o la humillación interna que sufrimos cuando destapamos 'el pastel') ha conseguido ganarse un hueco especial entre
Big Daddy vs. Big Daddy, buzos violentos
¿Splicer o estatua?
El art deco, muñecos timburtonianos y electro-rayos, qué más podemos pedir
Educación para la ciudadanía
10 años después, la Rapture deforme y peligrosa
Entornos hostiles vol. 94 gracias al Unreal Engine
Ni en una Rapture prolífera estas niñas podrían dejar de dar miedo
La perspectiva exclusivamente de la escafandra nos permite disfrutar de los escenarios submarinos
Los entornos naturales contrastan con la sofisticada arquitectura de Rapture
Las nuevas armas son propias de Big Daddy mucho más contundentes
Big Sister, rápidas y letales, tendrán un papel fundamental en Bioshock 2