Analisis Ninja Blade X360

Quizás algunos de vosotros conozca al estudio From Software por su trabajo en la saga ?Otogi?. Una serie que debutó en nuestro país en exclusiva para Xbox (la primera) hace ya algunos años. Pero además, también han llevado a cabo otros trabajos (aunque menos personales) para las sagas ?Tenchu?, ?Echo Night? o ?Armored Core?. Ahora, este grupo japonés se enfrenta a su mayor reto hasta la fecha: ?Ninja Blade?, una aventura que bebe directa y descaradamente de algunos de los mejores juegos de acción de los últimos años: ?God of War?, ?Devil May Cry? o, por supuesto, ?Ninja Gaiden?.

Desde que fue anunciado, quedó claro que ?Ninja Blade? iba a ser una propuesta ambiciosa. Según palabras de sus propios creadores: ?una aventura con carácter oriental pensaba para ser jugada en cualquier parte del mundo?. Pero, ¿es lógico que, viendo el resultado, desde From Software se muestren orgullosos con su lanzamiento? Lo cierto es que sí. No estamos ante ninguna revolución conceptual, más bien todo lo contrario, pero ?Ninja Blade? no intenta engañar a nadie, ni siquiera con su nombre. Es lo que es: un título que pretende unir en un solo disco las mejores ideas que se han visto últimamente en los éxitos anteriormente citados y explotarlas a tope. Y, aunque tiene altibajos, más o menos lo consigue. Dudamos que ningún fan de la acción más directa y trepidante se vaya a sentir decepcionado.

La historia, situada en un futuro cercano, no es ningún prodigio narrativo. Aunque pronto nos damos cuenta de que, en realidad, es algo más anecdótico que otra cosa. En el Tokio de 2015, una terrible plaga de parásitos amenaza a la humanidad. Estos insectos se introducen en el cuerpo de cualquier ser vivo y, mediante violentas mutaciones, terminan por controlarlo totalmente, tanto su físico como su mente. Ante tal situación extrema, las autoridades niponas recurren a un grupo de ninjas. Los únicos capaces de terminar con el peligro. Y al frente de ellos está Ken Ogawa, nuestro personaje. Gracias a sus características especiales, Ken se convierte pronto en la última esperanza. ¿Os suena? Seguro que sí. Un cóctel delirante y absurdo; ninjas, mutantes gigantes y una ciudad oriental del futuro. Irresistible.


Desde sus primeros compases, ?Ninja Blade? expone claramente sus máximas excelencias: nos encontramos con un juego rápido y tremendamente entretenido de jugar. Adictivo y dinámico. A veces incluso demasiado. Pero ¿mantiene este ritmo a lo largo de toda la aventura? La intensidad sí, pero no tanto la frescura.

Básicamente, estamos ante un beat´ em up que, por su manejo y mecánica, recuerda más a ?God of War? que otra cosa, pero sin llegar a la contundencia narrativa y conceptual de las aventuras de Kratos. Ken Ogawa cuenta con tres tipos de armas distintas: una katana bastante rápida, una contundente espada pesada y unos cuchillos mucho más débiles. El poder de las tres puede ser aumentado derrotando a los enemigos. Un sistema de mejoras al más puro estilo ?Devil May Cry?. En cualquier caso, los enemigos comunes son muy sencillos de derrotar y convierten a ?Ninja Blade? en un ?machacabotones? en toda regla. Por fortuna, los niveles están repletos de gigantescos enemigos finales que, además de ser espectaculares, obligan a andarse con un poco más de ojo y planificación. Estos suponen uno de los mayores atractivos de todo el juego.

Esta rutina, que ya podríamos llamar clásica si somos un poco aventurados, se ve completada por momentos plataformeros que nos hacen pensar inmediatamente (From Software no han perdido el tiempo en disimular) en el Príncipe de Persia de Ubisoft. Tampoco faltan otras experiencias, como disparar ametralladoras en algunos momentos de la aventura. Todo ello a favor de romper la posible sensación de monotonía que, cierto es, en ocasiones amenaza (aunque al final no lo cumple) con arruinar la diversión completa.

Por otra parte, Ken dispone de una habilidad única llamada Visión Ninja, muy útil en muchos momentos. Con ella podemos ver zonas ocultas de los escenarios, los puntos débiles de los enemigos e incluso esquivar sus ataques con más facilidad. Pero esta ayuda no es constante, se gasta y tenemos que esperar a que una barra se complete de nuevo para volver a disponer de ella. Por eso es importante utilizarla en momentos específicos y no a lo loco.

Mención aparte merecen los QuickTime Events que continuamente salpican el desarrollo. Son bastante sencillos de resolver pero demasiado frecuentes. From Software ha abusado de este modo de juego hasta la saciedad, posiblemente para intentar transmitir un ritmo acelerado e incesante. Pero lo cierto es que al final han conseguido crear una sensación contraria: de cierto exceso innecesario. Aunque, claro está, esto ya depende de los gustos de cada uno.

La duración es más o menos la habitual dentro del género: diez horas aproximadamente. Eso sí, hay que tener en cuenta que no cuenta con opciones multijugador ni características que ofrezcan mucho interés por volver a jugarlo una vez terminado por primera vez. La dificultad está bastante bien ajustada. No es tan complicado como ?Ninja Gaiden? pero tampoco supone un paseo por el parque. Sobre todo porque sólo es posible guardar al terminar cada nivel. A la vieja usanza.


A nivel gráfico se trata de un lanzamiento espectacular, aunque con algunas irregularidades de peso. En el plano positivo tenemos el excelente diseño de los niveles, la sabia y resultona recreación de la ciudad, el aspecto de los enemigos finales y todos los efectos visuales: humo, fuego, luces, etc. Todo muy cinematográfico y vistoso. Pero los aspectos negativos también son evidentes: la inteligencia artificial de los enemigos cumple justita, hay algunos bugs técnicos con nuestro personaje y algunas texturas son bastante pobres. Aunque, en cualquier caso, queda claro que no consiguen empañar la imagen general, que es buena.

Y en cuanto a sonido, cumple sin grandes destellos. La banda sonora es tan animada y machacona como cabía esperar, pero sin composiciones para la posteridad. Los efectos están bien y son variados y, en ocasiones, sorprendentes. Las voces llegan en inglés, aunque el título está subtitulado en nuestro idioma.


?Ninja Blade? no decepciona. Es una aventura que mantiene el elevado nivel general de calidad que hoy en día se le pide a cualquier lanzamiento más o menos pretencioso (como es su caso). La jugabilidad engancha, divierte y recuerda enormemente a juegazos como ?Devil May Cry? o ?God of War?. Aunque, siendo sinceros, no alcanza la personalidad de estos dos y otros grandes del género. Por otro lado, algunos aspectos como la Visión Ninja o la realización de los enemigos finales resultan muy destacables.

En lo concerniente a lo visual, cumple, si bien lo esperábamos algo más revolucionario. ?Ninja Blade? ofrece aspectos notables, pero otros demasiado flojos para una producción de su magnitud. Eso sí, todo está diseñado para transmitir una sensación muy peliculera. De principio a fin.

Si te gusta la acción, lo nuevo de From Software te mantendrá pegado al pad de tu Xbox 360 mientras dura. No encontrarás en él nada nuevo, pero eso no desvirtúa (al menos no demasiado) la experiencia. Simplemente hay algunos puntos que, quien sabe, a lo mejor se pulirán en una probable secuela.

NOTA FINAL: 7.5

A favor:

- Directo y divertido.
- Toma lo mejor de muchos ?grandes?.
- Los enemigos finales.

En contra:

- Carece de personalidad propia.
- Algunos bugs técnicos.
- Demasiados Quicktime Events.


GENERO: Acción
DURACIÓN: Media
MODOS DE DIFICULTAD: 1
MODO MULTIJUGADOR: No
MODO ONLINE: No
MODO HDTV: Sí, hasta 720p
EXTRAS: No


DESARROLLADORA: From Software
DISTRIBUIDORA: Microsoft
LANZAMIENTO: 03-04-09
CALIFICACIÓN EDAD: +16
Precio (?): 59,10?

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