Ve al cajón, al trastero, al desván o donde sea, coge 24 muñecos y juguetes de diferentes colecciones y únelos, si es que aún los conservas. Debería ser divertido, ¿No?
Marvel Ultimate Alliance 2 quiere jugar a este juego, incluso la perspectiva aérea ayuda a sentirte como un dios que maneja y manipula a todos estos superhéroes a su voluntad. Suma a todo esto el telón de fondo de la
Secret War y la
Civil War, donde el Acta de registro de Superhéroes divide a éstos en los que están a favor de develar sus identidades y los que no, con Iron-Man y el Capitán América como líderes de cada bando respectivamente, y deberías tener un conjunto a la altura de las circunstancias.
Añádele un plantel desorbitado de enemigos iguales y repetitivos, con escenarios poco inspirados (salvo quizá los niveles en exteriores, que, a duras penas, intentan devolver algo de luz al conjunto) y tendrás un juego donde prima el constante asedio al botón A o X de tu mando. Los diferentes poderes de los superhéroes conseguirán tu aprobación. Todos y cada uno de los movimientos reflejan exactamente lo visto en papel, pero cuando la sorpresa inicial supera la suspensión de la credulidad es cuando el jugador tiene que ver más allá del caramelo que le ponen en la boca.
Respecto al
Marvel Ultimate Alliance original,
Vicarious Visions se ha mantenido tradicionalista, mejorando el trabajo de
Raven en el uso que hace de los superhéroes. A sabiendas de que las cámaras aéreas son tan necesarias como mal vistas, ha intentado aterrizarlas siempre que esto no entorpeciera el ritmo de la acción, es decir, en muy pocas ocasiones, y ha intentado nivelar los personajes de modo que el jugador haga uso de su propio conocimiento para crear un equipo equilibrado de combatientes. Pero toda la estrategia se desmorona al crear un título demasiado sencillo incluso en el modo de dificultad elevado. Lleva a Lobezno como líder de tu equipo y lánzate con todo sobre tus enemigos, mientras que su factor de curación aborta cualquier plan B.
Quizá la mecánica más discutida de
MUA2 sea la habilidad de fusionar a dos personajes en un ataque potente y visualmente impactante. Sin embargo, de las más de 250 combinaciones que dan lugar de la mezcla de dos héroes sólo te impresionarán tres, ya que todas están almacenadas en subgrupos, en los que podremos despejar el escenario, atacar a un objetivo único o realizar varios ataques concentrados mientras nos movemos con dos personajes a la vez.
Más allá de todo esto, sólo resta ir superando misiones mientras cumplimos objetivos lejos de toda lógica. Las ganas de conseguir a todos los superhéroes deberían bastar para seguir avanzando mientras probamos sus nuevos ataques y trasteamos con el sistema de puntos para evolucionar al personaje. Al final de cada misión, podremos movernos por nuestra base, donde consultaremos datos, dosieres e incluso hablaremos con otros personajes en conversaciones poco locuaces que ejemplifican el resultado final de este
MUA2. Un sistema de conversaciones podría haber funcionado extremadamente bien en un juego basado en la
Civil War y la
Secret War, dando lugar a alejarse de la historia original y crear la tuya propia. Sin embargo, esta idea de tamaña envergadura debió ser demasiado ambiciosa para
Vicarious reduciéndola a algo menos que una simple curiosidad mal implementada.
A fin de cuentas, podríamos decir que, en el fondo, es un juego de Marvel. Lo importante es que tengamos un amplio abanico de personajes jugables con los que disfrutar y otro tanto nada desdeñable de enemigos finales que derrotar. Pero este mismo factor ?aficionado? no debería ser un requisito para bajar el listón y desaprovechar una gran licencia, sino un filón del que sacar todo el
adamantium posible. Los aficionados a Marvel y a cualquier otra licencia deberían ser los primeros en evaluar este potencial y decidir si se conforman con tener una baraja de calidad o utilizarla para lo que, en definitiva, sirve: echar una buena partida. Ases en la manga no le faltan.
NOTA FINAL: 6.5
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