Port: Dícese de un juego original y exclusivo para una plataforma, que más tarde es trasladado a otra, con o sin mejoras, pero sin mejorar el apartado gráfico del título.
Dejando esto claro, empezamos diciendo que
Rygar: The Battle of Argus es un
port del título casi homónimo original de Playstation 2,
Rygar: The Legendary Adventure, allá por el año 2003, que a su vez resultó ser uno de los primeros infructuosos rescates de clásicos de los 8 bits, que, como le pasó este mismo año a Bionic Commando, sin resultar un mal título, le faltaba un poco de consistencia como videojuego.
A pesar de ello, recibió, en su día, una mejor acogida que Bionic Commando ahora porque, evidentemente, el género de los beat?em up tridimensionales no estaba tan extendido. ¿Qué pasa cuando se tiene mala puntería? Que las cosas tienden a fallar, mucho más aún cuando se hacen con desdén. Desde el año 2007 nos lleva provocando Namco con un port del Rygar original de PS2, que tenía su cierta gracia por pensar en las posibilidades del arma del protagonista y el Wiimote.
Nada. Cambiemos el skin del personaje para hacerlo atractivo a otro tipo de público, añadamos un insulso modo 100% de combate y dejemos el resto tal cual está, que total, los usuarios de Wii no se darán cuenta. No es ésta la forma de hacer las cosas, un port debería de tener algún tipo de justificación, y precisamente en Wii, donde ya hemos visto ejemplos de conversiones que realmente merecen la pena, como Resident Evil 4 Wii Edition, o toda la línea New Play Control.
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