Analisis Dragon Ball Z: Infinite World PS2

Después de su irregular debut en PS3 y Xbox 360, que presentaba un gran acabado gráfico pero pocas posibilidades jugables, Goku y sus amigos vuelven a la veterana PlayStation 2. Y lo hacen con un pretencioso juego con aspiraciones a convertirse en la obra definitiva que ponga dignamente punto y final a la serie en la máquina de Sony. Pero, después de ocho juegos previos, parece que la gallina de los huevos de oro ha acabado por fatigarse.

Los responsables de este ?Infinite World? han sido los habituales miembros del estudio Dimps, encargados de llevar a cabo todos los últimos lanzamientos de la saga y otros juegos de lucha, como por ejemplo las dos entregas de ?Saint Seiya? que aparecieron en la anterior generación para PlayStation 2. No conviene olvidar que estos chicos comenzaron trabajando para SNK, por lo que conocen de sobra de qué va este género.

El argumento, pues que os vamos a contar, es el mismo de siempre, y esta vez abarca desde la llegada de Raditz a la tierra (again), hasta el final de la serie (incluidas las películas y ?Dragon Ball GT?). Todo ello a través de una trama que mezcla mini-juegos y, como no, combates. En ?Infinite World? no se ha escatimado en personajes (como sucedía en ?Burst Limit?) y encontramos más de 40 de ellos en total.


El principal atractivo del juego es el modo historia de turno, aquí llamado Misión Dragón. Una vez lo seleccionamos, nos encontramos con mapas esquemáticos por los que podemos mover a Goku. Para avanzar en la trama tenemos que elegir una misión que, una vez superamos, va abriendo otras diferentes. Decir, también, que el desarrollo del juego es muy estricto con el orden cronológico real del manga.

Por desgracia, la gran novedad de ?Infinite World?, los mini-juegos, son por lo general bastante sosillos y carentes de interés. De hecho, la gran mayoría se limitan a avanzar por los sencillos escenarios, típicos de la serie, recogiendo ítems y cosas por el estilo dentro de un tiempo limitado. Todo ello en niveles de desarrollo tridimensional, por supuesto. Es posible que los más fanáticos disfruten visitando lugares emblemáticos como al planeta de Kaito, pero esto no es aliciente suficiente como para justificar la simpleza de contenidos.

Tampoco faltan los combates, claro, que recuerdan a los de la saga ?Budokai?, aunque también presentan algunos aspectos del más reciente ?Burst Limit?. Con todo, siguen siendo rápidos, accesibles y muy dinámicos. Como siempre, es posible lanzar magias y llevar a cabo todo tipo de golpes y patadas con tan sólo pulsar un botón (o realizar sencillos combos).

Además del modo historia, el juego cuenta con la posibilidad de realizar combates simples (Duelo Dragón) y con una interesante modalidad llamada Sala Guerrero. Gracias a ella, podemos comprar todo tipo de habilidades para los luchadores y después editarlas (eligiendo que guerrero queremos que disponga de cada una de ellas). Y lo cierto es que esto resulta imprescindible, porque ?Infinite World? es bastante más complicado que los anteriores ?Dragon Ball? y requiere de mejoras y bastante pericia durante algunos combates (incluso en la opción de dificultad más baja de las varias que hay).

Algo que nos ha sorprendido, es la falta de libertad a la hora de elegir el personaje con el que queremos llevar a cabo el modo Misión Dragón. Para ser exactos, tenemos que acabar primero todas las misiones de Goku, para después poder elegir entre los demás personajes típicos de la serie: Tenshihan, Yamcha, Krilin, etc. Por fortuna, dependiendo de cual de ellos seleccionemos, las misiones y escenarios varían durante la aventura.

Y en cuanto a la duración, estamos seguros de que se trata de uno de los títulos de ?Dragon Ball? más longevo que nunca se han hecho, entre otras cosas por su alta dificultad, tal y como hemos dicho anteriormente.


A nivel gráfico el juego ronda el mismo nivel de calidad que las últimas entregas aparecidas en PlayStation 2. Los cuidados gráficos Cel-Shading recrean perfectamente a los personajes y sus animaciones, dándoles un aspecto muy similar al de la serie de dibujos que todos conocemos. Es cierto que después de haber visto ?Burst Limit? se nota la diferencia de calidad con éste último (lógica, por otra parte), pero aún así este aspecto sigue siendo de lo más destacable del juego.

Los escenarios, por el contrario, pecan de sencillos, algo que se nota sobre todo en los niveles de mini-juegos donde los recorremos libremente. Por lo menos, eso sí, resultan bastante fieles a los de la obra original de Toriyama.

Por su parte, la banda sonora mantiene el ritmillo pop-rockero típico que suele acompañar a los juegos de Goku y compañía. No cuenta con melodías sublimes, pero entretiene y da vidilla al asunto. Además, durante las escenas cinemáticas escuchamos las voces de los personajes (en inglés, eso sí).


?Infinite World? no es, ni mucho menos, el juego definitivo de ?Dragon Ball? que prometía en un principio. Las misiones en forma de mini-juegos, la principal novedad que presenta, no están muy bien diseñadas y se hacen bastante aburridas, y los combates no ofrecen nada especialmente nuevo. Entendemos que a estas alturas sea difícil volver a diseñar un juego de la saga, después de tantos otros, pero es cierto que en esta ocasión esperábamos un título de más calidad. Aún así, resulta entretenido, largo y difícil (mucho). Seguro que la gran cantidad de fans de las aventuras de Goku y compañía saben disfrutarlo.

NOTA FINAL: 6

A favor:

- La realización de los personajes.
- Los combates son muy dinámicos.
- Es largo y difícil.

En contra:

- Los mini-juegos no son gran cosa.
- Tener que pasarte todo con Goku antes de poder elegir personaje.


GENERO: Lucha
DURACIÓN: Larga
MODOS DE DIFICULTAD: 4
MODO MULTIJUGADOR: Sí
MODO ONLINE: No
EXTRAS: No


DESARROLLADORA: Namco-Bandai
DISTRIBUIDORA: Atari
LANZAMIENTO: 04-12-08
CALIFICACIÓN EDAD: +12
Precio (?): 38,21?

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