El caso de THQ y su UFC podría equipararse fácilmente al de EA Sports y FIFA. Ambos son referentes en sus respectivos géneros y, casi cada año, sólo tienen que ir mejorando la fórmula del éxito. Pero eso es algo que hacen con maestría. En el caso de este simulador de artes marciales mixtas, Yuke (el estudio responsable) lleva tiempo demostrado una gran coherencia a la hora de evolucionar la franquicia. Y en esta ocasión ha sucedido así de nuevo.
UFC Undisputed 3 es la entrega más completa de la serie hasta ahora, y un salto cualitativo con respecto a la versión anterior. Pero también parte en gran medida de ésta. Como en FIFA, todo se lleva a cabo poco a poco, con la vista puesta en el futuro pero sin olvidarse del presente (ni del pasado).
Las novedades de UFC Undisputed 3 están muy definidas y suponen alicientes suficientes como para justificar la compra del juego otra temporada más, y alejarlo de tímidos asaltantes al trono, como el irregular Supremacy MMA. En primer lugar, los programadores
han incluido una nueva licencia: PRIDE. Esto, para los menos puestos en este deporte, viene a ser algo así como la alternativa asiática a la UFC convencional. Y, como casi todo lo asiático, es aún más bestia. Los combates duran el doble (diez minutos en lugar de cinco) y se pueden llevar a cabo acciones como patear la cabeza de los púgiles incluso una vez en el suelo. Pero más allá de la licencia y de lo variopinto de algunos luchadores, este modo PRIME influye en la jugabilidad, ya que nos reta a ser más estratégicos y sobre todo prudentes durante los combates si queremos mantenernos en pie los diez minutos que dura cada asalto.
En cualquier caso,
volvemos a estar ante un simulador puro y duro. Un juego exigente, que nos obliga a actuar con cabeza durante los combates, sobre todo teniendo en cuenta la cuidada IA de los rivales, que responden a nuestra forma de pelear de manera bastante inteligente.
Durante los enfrentamientos, el realismo sigue siendo la tónica dominante, y podemos llevar a cabo acciones muy diferente: ataques con las extremidades (cada uno asociada a un botón), agarres, derribos, sumisiones? igual que defendernos, o contraatacar. Se trata de
un juego muy técnico y que se disfruta más a medida que se va dominando poco a poco. Aún así, THQ ha incluido este año otra de las novedades del juego:
un control más sencillo, enfocado a aquellos usuarios que se inicien en la serie o que no quieran complicarse demasiado. De hecho, nada más comenzar se nos pide elegir entre el modo Pro (el de toda la vida, vamos) o el Amateur. La principal diferencia radica, principalmente, en el uso del stick derecho durante los movimientos especiales en la lona. En el primer caso hay que ejecutarlos de forma precisa y manual, y en el segundo se llevan a cabo de manera más automática sólo con pulsar arriba o abajo.
El resto de novedades las encontramos en el modo Carrera del juego, su plato fuerte. En total
UFC Undisputed 3 cuenta con casi ciento cincuenta profesionales de la lucha libre, nuevas categorías de peso (hay siete: gallo, pluma, ligero, welter, medio, medio-pesado y pesado) y competiciones como la World Fight Alliance, que es el punto de partida de nuestra carrera. Además,
en esta entrega se ha potenciado uno de los aspectos clave de la lucha: los entrenamientos. Éstos se han dividido en tres tipos y compuesto mediante minijuegos, estadísticas y ensayos para los siguientes combates, que después pueden ayudar bastante sobre el ring. También se pueden simular, pero resulta más recomendable no hacerlo para potenciar todo lo posible los atributos de nuestro luchador.
Pero además de este modo principal, existen muchas más opciones en UFC, que hacen que el juego sea casi interminable. Los más destacables son los llamados Torneo, Eventos, Ultimate Fights y Defensa del Título, en los que se nos proponen distintos retos para los combates (¡más de doscientos!), desarrollos en plan arcade o incluso crear nuestra propia celebración de lucha.
Pero al igual que es al saltar al campo cuando FIFA demuestra todo su potencial, lo mismo sucede en UFC cuando subimos al ring. Es entonces cuando todas sus opciones, modos, técnicas y personalizaciones (con un potente editor incluido) cobran sentido.
UFC Undspited 3 vuelve a ser un juego variado, lleno de posibilidades, realista y con luchadores con carácter. Igual que en un partido de FIFA cualquier cosa puede suceder, lo mismo pasa con estos combates, por seguir con las similitudes.
Es más, de idéntica forma que nos resultaría difícil encontrar a un aficionado al fútbol al que no le convenciera FIFA, lo mismo podría decirse de UFC.
Si te gusta la lucha, la de verdad, la auténtica, es un juego incomparable a día de hoy. Verosímil, complejo, lleno de opciones y modos, muy personalizable y sin apenas competencia de la que preocuparse. Una temporada más, THQ ha dado una demostración de cómo no dormirse en los laureles.
NOTA FINAL: 9
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