Avance [GC 11] Ninja Gaiden 3 PS1

Lo confesamos. Somos muy seguidores de la saga del ninja. Realmente, nunca nos ha parecido una gran historia, ni tampoco creemos que el juego tenga un diseño soberbio o unos personajes de quitar el hipo (bueno, menos lo obvio). De hecho, si simplemente tuviéramos a Hayabusa en un escenario vacío con paredes mal pintadas y un buen puñado de enemigos bien diferenciados, seguiríamos jugando igual a Ninja Gaiden, porque lo que hace grande al juego siempre ha sido su finura en los combates, casi como estuviéramos jugando a un título que lleve la palabra lucha en el género, donde prima la defensa por encima de todo y tu barra de vida baja más rápido que la de Demon's Souls (bueno, no tanto).

Eso era, para nosotros, Ninja Gaiden, casi desde los tiempos de NES. Pero este nuevo Ninja que vimos en el pasado GamesCom se nos ha antojado algo excéntrico. Por primera vez, le dan una importancia a la historia que nunca se ha hecho, con un Ryu haciendo las de Snake con pinganillo y todo, mientras habla y elimina a enemigos por doquier. También, en vez de jugar toda la aventura de la misma forma, se han añadido esos típicos momentos en los que la jugabilidad cambia y nuestro personaje pasa a dar un salto al vacío o escalar una pared mientras los enemigos intentan hacer que caigamos. Antes dábamos cuatro saltos y seguíamos adelante.



Por ese tipo de razones es por las que Ninja Gaiden 3 nos ha producido algo de desconfianza. El juego, a su vez, no parece lucir mucho mejor que su anterior entrega, con un escenario muy, pero que muy oscuro, que ejemplificaba muy poco la ocasión, y donde lo que más destacaba era la cantidad de sangre que salía de todos los miembros de los enemigos. Y nosotros que pensábamos que el obsesionado con la sangre era Itagaki.

Los combates siguen siendo muy veloces, donde el equipo quería destacar sobremanera el impacto que nuestros golpes produce en los enemigos, repitiendo una y otra vez un ¡No quiero morir! antes de ser ejecutados sin piedad por la katana del ninja. Sin embargo, en el tiempo que duró la demostración, no vimos en ningún momento un bloqueo, ni un contraataque, ni algo que nos pareciera mínimamente desafiante, a diferencia de las demostraciones en vivo que Itagaki hacía, con gafas de sol incluidas, jugando a sus Ninja Gaiden en la dificultad más extrema.

Así pues, aunque Ninja Gaiden 3 tiene cosas interesantes; quizá pueda mejorar esas escenas que sólo servían para que la chica de turno enseñara pechamen y haga que nos entretengamos también cuando no tenemos los pulgares sobre los sticks, creemos que el camino de este nuevo ninja empieza a tornarse demasiado sencillo. Más aún si cabe si pensamos que el juego ha sido adaptado también en su versión para PlayStation 3 para poder ser jugado con Move. Imaginaros: ¡Un Ninja Gaiden con Move! No obstante, el equipo ya se encargó de anunciar que la saga iba a volverse más accesible a jugadores novatos, lo cual les honra.

Como nota final, puede que una de las cosas que más llame la atención del verdadero fan de Ninja Gaiden, que le guste la historia y todo, es que por primera vez vamos a poder indagar en la personalidad y el pasado de este ninja tan frío como el hielo, incluso dicen las malas lenguas por ahí que incluso se podrá ver su rostro, aunque algunos ya lo viéramos como traje alternativo en DoA o en esa rareza en que se convirtió Dragon Sword, el Ninja Gaiden para Nintendo DS.

Es cierto que aún queda mucho camino que recorrer y aún hay tiempo para cambiar opiniones. Mientras que esta tercera entrega no convierta a Ryu Hayabusa en una máquina automática de matar, al menos podremos decir que seguimos teniendo un juego de ninjas como manda el canon. El año que viene veremos en qué termina todo esto.

Ficha técnica

Salida: 2012
Edad (PEGI): +18
Plataformas: PS3, X360 y Wii U
Desarrolladora: Team Ninja
Productora: Tecmo Koei
Género: Acción, Hack 'n Slash

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