Uncharted 4 y su estupendo lenguaje corporal
Llevo una semana jugando a Uncharted 4: El Desenlace del Ladrón, y decir que el maldito juego me está encantando es quedarse corto. Es quedarse muy corto respecto a todo lo que veo que ha crecido el estudio que un día estuviera dirigido por los padres de Jak y que ahora, en manos de los padres de Nathan, Joel y Ellie, ha sabido evolucionar en otra dirección de una forma tan intensa como la que hace una década sufriera en su paso de Jak and Daxter a Jak III.
Naughty Dog ha sido dos estudios, y eso es algo que no siempre sabermos ver. Fue un estudio en los tiempos de Andy Gavin y Jason Rubin, con una trayectoria en la que no faltó Crash Bandicoot y ese dúo dinámico de Jak and Daxter que le valió el ver su nombre como el de un estudio a tener en cuenta al inventar el sandbox plataformas. Ahora es otro estudio, un estudio 'serio' en el que ya no hay sitio para Amy Hennig, y en el que las mentes privilegiadas de Neil Druckmann y Bruce Straley han sabido crear una forma distinta de hacer las cosas y un tipo de juego que, en el caso de Nathan, bebe no sólo de la evolución de la vieja Lara, sino también de esos viejos juegos de James Bond en los que el ritmo frenético nos llevaba de una jugabilidad a otra a golpe de misiones diferentes a pie, en vehículos, en coche, con armas, descolgándonos por un edificio... Unas fuentes que, en manos de la nueva Naughty Dog, han culminado en algo muy grande.
El sello del Perro Malo
Naughty Dog es un estudio con personalidad propia que no duda en otorgar a sus juegos de ese toque diferente que junta varios elementos para hacer de ellos algo fácilmente reconocible respecto de la competencia. Uno de esos elementos es, desde los inicios de Nathan, la naturalidad de los movimientos de nuestro explorador favorito, que lejos de moverse en rutinas de movimiento rígidas incluyen pequeños movimientos del cuerpo, de las manos, de la cabeza... que hacen que moverse sea todo un espectáculo por la naturalidad y la personalidad de cada individuo.
Algo tan sencillo como caminar fue, desde el principio, uno de los sellos de personalidad de Naughty Dog, y ya desde el primer Uncharted Nathan apoyaba la mano en la pared, o inclinaba el hombro, o se giraba levemente para mirar a sus espaldas, se recolocaba el cinturón... un gran puñado de animaciones que se unían a la animación central para que sintiéramos a unos personajes más vivos que nunca y que se extendían al resto del reparto gracias a una por entonces novedosa tecnología de captura de movimiento.
El impecable lenguaje corporal de Uncharted 4
La saga ha evolucionado y ha dado el salto de Playstation 3 a Playstation 4, y esto se hace obvio no sólo en todo el tema del aspecto gráfico, el fotorrealismo, los efectos del clima, el viento, las luces naturales, las partículas y bla bla bla discurso de la nueva generación de consolas, sino también en ese lenguaje corporal made in Naughty Dog que, para esta ocasión, ha evolucionado tanto que sigue a años luz de todo lo visto en compañías rivales.
Los personajes de Uncharted 4 son el otro lado de la moneda de los rígidos monigotes de mi, por otro lado amado, Fallout 4. La vocación cinematográfica del dúo Straley-Druckmann es innegable en sus juegos, pero lejos de convertir sus obras en películas interactivas convierten sus títulos en videojuegos interpretados de forma impecable con unos movimientos que no sólo demuestran la personalidad de cada uno de sus 'actores', sino que además se adaptan al momento y la situación para narrar a través de expresiones faciales, expresiones corporales y la simple forma de movernos de una manera mucho más completa que la de la vieja voz en off.
Uncharted 4 es una auténtica historia de las buenas, y todo en ella nos sirve para recibir información, mucho más allá de los saltos y los tiroteos, con una factura impecable que demuestra que un simple paso, que esa forma de caminar de un Nathan amargo, asustado o feliz, son suficientes para demostrar cuándo se hacen bien las cosas. Han hecho falta unos añitos para empezar a comprender lo que de verdad significa nueva generación, y han tenido que ser, como no, los chicos de Naughty Dog, los responsables de esta clase magistral en forma de lenguaje corporal.
¡Nos leemos!
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