Ubisoft recibe un golpe bajo

El cambio de fecha de Watch Dogs ha hecho más que decepcionar a los fans. Tras el anuncio de la nueva fecha, las acciones de Ubisoft han sufrido una caída significativa, y en el momento de escritura de esta noticia, han descendido un 26’15%. Mirando el cambio de valor de las acciones hay un punto claro en el que los precios directamente caen de un momento a otro: el momento en que Watch Dogs fue retrasado a 2014.

Esto ha hecho que Ubisoft se replantee sus ingresos. Tras el anuncio, la compañía cambió las predicciones de ventas de The Crew, la otra obra que ha sido aplazada a 2014, y ahora se espera que la obra de conducción supere las 2’5 millones de unidades vendidas. Por su parte, Watch Dogs se ha mantenido firme en su objetivo de superar las 6’2 millones de copias en un año. Sobre todo esta segunda cifra es muy arriesgada, y uno podría preguntarse si el interés será el mismo cuando la obra salga el año que viene, especialmente si tenemos en cuenta que no tendrá las Navidades para recibir el empujón adicional de ventas.

Además de este cambio de estimaciones, Ubisoft ha declarado que Splinter Cell: Blacklist y Rayman Legends han fracasado a la hora de alcanzar sus expectativas. No se han revelado presupuestos ni cifras esperadas, pero Ubisoft Toronto, estudio autor de Blacklist, supone una inversión a largo plazo de más de 500 millones de dólares para construir un equipo de 800 personas en 10 años, de modo que necesita acertar a cada decisión que tome. Maxime Beland, director creativo de la obra, declaró a T3 que “en la industria hoy día no hay espacio para juegos mediocres. Si no tienes un 8’5 en Metacritic, no creo que estés en el mapa, y si necesitas vender 4 o 5 millones de unidades para amortizar gastos, un análisis de 8’2 no te va a ayudar”.

Splinter Cell: Blacklist tiene un 8’4 en Metacritic.

Respecto a Rayman Legends, nadie sabe a qué se puede deber su situación. Mi compañero Toni Piedrabuena ha considerado el hecho de que se convierta en multiplataforma como un factor en contra al convertirlo en una obra anodina. Sin embargo, esto también puede deberse a la repetición. Rayman Legends fue un éxito y una gran muestra de creatividad y buen diseño en 2011, y desde entonces Rayman Fiesta Run y Rayman Jungle Run nos han entretenido en smartphones e iOS con exactamente el mismo estilo visual, el mismo motor gráfico y casi el mismo esquema jugable. Rayman Origins es casi imposible de diferenciar de Rayman Legends a primera vista, y si los jugadores no podían diferenciar la Wii de la Wii U, entendería que no viesen la novedad entre Origins y Legends.

Pero más allá de mis consideraciones, es un hecho que los ingresos de Ubisoft van a caer de forma significativa. Sus expectativas de ingresos se han reducido un 30%, esto es, Ubisoft calcula que recibirá 400 millones de dólares menos de los que esperaba. Y precisamente ha sido debido a esta trinidad del horror, este aquelarre formado por Watch Dogs, Rayman Legends y Splinter Cell: Blacklist.

Pero, a pesar de este golpe, Ubisoft tiene varios ases guardados. Si bien es cierto que el resto de lanzamientos han sido obras poco destacables (Just Dance 2014, Call of Juarez: Gunslinger), ha tenido algún juego llamando la atención de crítica y público (Cloudberry Kingdom, Far Cry 3: Blood Dragon). El lanzamiento de Assassin’s Creed IV debería recuperar parte de las pérdidas, y aunque los fans pierdan el interés por Watch Dogs, la compañía sigue teniendo dos ases en la manga: The Crew y The Division. A menos que jueguen sus cartas realmente mal, deberían bastar para devolver a Ubisoft a la normalidad y los miles de millones ingresados. De momento, todo lo que tiene que hacer es resistir.