1. Mundogamers
  2. Noticias

The Witcher 3 y sus cien horas de perfección

Coherencia y saber hacer
Por Álex Pareja

Hay novelas y novelas. Sagas cuya calidad va decayendo hasta que al final la única excusa para llevarte el libro al baño es el agradable tacto de su papel -gracias por esto último, señor Martin- y obras que enamoran hasta el punto de que te las llevarías a la cama cada noche al caer el sol. Y no sólo a la cama, sino también a un baile o a pasar la noche al raso frente a la embajada americana. Páginas y páginas con una calidad tan envolvente que hacen que te sumerjas en ella como ese pequeño Bastian de una historia interminable cuya versión cinematográfica dio penita, pobre Mickael Ende.

 

¿Os parece exagerado eso de llevarte un libro de fiesta? Pues eso fue lo que me pasó hace ya más una década cuando descubrí a Geralt de Rivia, de Andrzej Sapkowsky. Desde las primeras palabras, sus novelas se convirtieron en amigas inseparables de las noches al raso, cuando salía de una presentación de videojuegos y tenía que esperar un par de horas a que saliera el tren de vuelta a mi ciudad

 

 

¿Pero esto no va de juegos?

Sí, va de juegos, pero es que el universo jugable de Geralt está tan perfectamente entrelazado con su matiz literario que es difícil hablar de lo uno sin lo otro. Así que, para todos aquellos que estén esperando con ansias este Witcher 3 y no tengan ni idea de por qué, dejadme que les haga un pequeño, diminuto esbozo: La saga de Geralt son unas novelas que narran las aventuras del "brujo" -witcher... sería algo así como brujero, pero es complicadillo de traducir- Geralt de Rivia, un cazarrecompensas que se encarga de que las criaturas uhm... especiales dejen de ser un problema para los "pobres" aldeanos

 

Dicho así parece simple, pero la gracia de la historia consiste en que dichas criaturas especiales son seres cuasimitológicos, salidos de leyendas, cuentos populares e historias, y por norma general revientan el concepto clásico de los mismos, dejando claro en todo momento que la peor criatura, la más destructiva y anómala, es siempre el propio ser humano. La Bella y la Bestia, La Bella durmiente, el lobo de Caperucita Roja... se dan la mano con dragones, furias, brujas, arpías y todo tipo de criaturas que son a veces cazadas, a veces protegidas por nuestro Geralt, que se considera a sí mismo el peor monstruo de todos.

 

 

Y ahora sí, el videojuego

Lejos de limitarse a cobrar por los derechos de unos juegos que le importa bien poco como hacen tradicionalmente algunos autores -hombre, Martin, ¿otra vez usted por aquí?-, Andrzej Sapkowsky quiso desde el principio que The Witcher destilara la misma calidad que desprenden sus libros y su serie de televisión. En las dos primeras entregas nos encontramos con unos action RPGs con muchísimos elementos nuevos y orginales, una calidad gráfica sorprendente, un guión fuera de lo normal y mucho, mucho sentido del humor en un universo más adulto de lo que nos tienen acostumbrados los videojuegos

 

La preocupación por unos estándares de calidad sobresaliente sigue ahí, y para este the Witcher 3 se mantienen todos los elementos que han hecho grande a la saga con dos promesas que a los amantes del género, el universo y los videojuegos, nos han puesto los dientes muy largos: Un extenso mundo abierto que tardaremos nada menos que cuarenta minutos en recorrer a caballo de lado a lado -me imagino buscando ingredientes para las pociones y me pongo tonto-, y un modo historia de más de cien horas. Y como ya hemos hablado del tema del tiempo de relleno y de la pupa que esto hace a los videojuegos, CDProjekt ya se ha encargado de asegurarnos que cincuenta de esas horas dependerán de las misiones secundarias, y las otras cincuenta serán necesarias para cumplir la trama principal, lo que convierte a Witcher 3 en un proyecto ambicioso a todos los niveles en el que podremos perdernos y dedicar aún más tiempo a, simplemente, explorar. 

 

 

Pero eso no es todo: La ambición de CDProjekt por la libertad del jugador les ha llevado a prometer más de 35 finales diferentes según interactuemos con los personajes y llevemos a cabo las decisiones, lo que multiplica la rejugabilidad de este título de posibilidades casi infinitas hasta un punto que me da hasta miedo calcular. Si eres de los míos y llevas cientos de horas en varias partidas a los títulos de Bethesda, ahora mismo tendrás el corazón a cien.

 

Un añito pasa "en ná"

Como decía al principio, hay novelas que te enamoran y te piden entre susurros que te las lleves a la cama, a un baile y a hacer la ronda. Igualmente hay juegos que te conquistan y que antes incluso de salir al mercado ya ocupan tus pensamientos. Títulos que hacen que estés deseando que pase el tiempo hasta ver su lanzamiento, casi un año en el caso de Witcher 3, porque, total, un año de vida no es mucho a cambio de un juego que promete tanto. 

 

¡Nos leemos!


<< Anterior Siguiente >>