Satoru Iwata, presidente de Nintendo, comentaba en su reunión de inversores de la pasada semana que va siendo hora de que la compañía se una a ese mercado creciente que es el de los DLC de pago, que a unos gusta y a otros asusta.
Los ejemplos que Iwata proponía eran casos como Super Mario 3D Land, Mario Kart 7 o Wii Fit Plus, juegos que, teniendo contenidos adicionales ofrecidos vía Nintendo Network, seguirían estando en boca de todos durante más tiempo y gente nueva se animaría a comprarlos al no pensar que son juegos antiguos.
Según afirma, estos contenidos adicionales ayudarían a alargar la vida útil del juego, como por ejemplo, con nuevos niveles en Super Mario 3D Land, que atraerían a aquellos jugadores que ya están cansados de los niveles incluídos en el cartucho.
También hablaba de que juegos como Wii Fit Plus podrían haber llegado en forma de expansión digital y no como disco: Podemos recomendar a esos usuarios de Wii Fit que prueben nuevos entrenamientos y minijuegos, y seguirán usando este software con la mente fresca, lo que le dará una vida más larga al software y a nosotros nos traerá un ligero beneficio.
Esta tesis del DLC que explica Iwata choca contra declaraciones anteriores, por ejemplo, de Reggie Fils-Aime, que afirmaba que Nintendo nunca cobraría por un contenido posterior al lanzamiento de un juego. Los beneficios de los que habla Iwata se traducen del aumento de ventas de los juegos, pero sinceramente, todo apunta a contenidos de pago.