Red Dead Redemption 2: nombre señuelo y marketing en los videojuegos
Red Dead Redemption 2 se mostraba la semana pasada en un potente tráiler que nuestro amigo Julián diseccionaba para todos nosotros hablando de la historia, los datos y la potente imagen del nuevo capítulo de la saga. Un vídeo con el que Rockstar repite las estrategias de marketing que su aclamado GTA V: a destiempo, avisado y con una puntualidad exacta, y que demuestra que la compañía sabe posicionarse cada vez que quiere llamar la atención sobre uno de sus lanzamientos.
Lo de Red Dead Redemption 2 es algo que no deja de llamarme la atención. A día de hoy hay muchos estudios que son capaces de mover a prensa y público con las noticias de sus lanzamientos, desarrolladoras que encandilan gracias a esfuerzo y promesas. Pero desengañémonos, jóvenes padawans: ninguna se acerca a rozar siquiera lo que la gente de Rockstar es capaz de hacer.
RDR2 ya lo peta
Red Dead Redemption 2 es, desde ya y a falta de medio año de su lanzamiento en primavera de 2018, un superventas. Las puntuaciones de usuarios en los diferentes medio ya le otorgan varios dieces a pesar de no haber mostrado apenas nada de lo que será el resultado final. Las reservas en las distintas tiendas digitales ya van para récord, a pesar de que algunas lo tienen fechado, ojo con este detallito, para el 31 de diciembre de 2018 -léase Amazon y El Corte Inglés-. Supongo que para no pillarse los dedos.
Visto lo visto, ¿Es necesaria tanta estrategia de marketing para vendernos su juego? ¿Era necesario crear una segunda parte que no es tal de la segunda entrega de la trilogía Red Dead? Rockstar es el Rey Midas del videojuego, una empresa que todo lo que toca se convierte en must play. Tal vez por eso, por el apoyo de los medios -que nos damos pellizcos entre nosotros por acceder a algo de información- y el interés del público, que devora cada nueva noticia o vídeo de la compañía como si fuera el último bocata del cumpleaños; no entiendo la necesidad de estas estrategias que para otras compañías son casi la única forma de sobrevivir.
Red Dead Requete
Una rosa con otro nombre olerá igual, pero se venderá peor. Algo así deben haber pensado los encargados de nombrar al nuevo juego, que como decía antes parece olvidar el primer capítulo de la saga, Red Dead Revolver, y poner todos los huevos en la cesta de las ventas de Red Dead Redemption. El título que les valió gran parte de la gloria actual de la saga y que ahora luce un 2 condenando al ostracismo al bueno del abuelito Red Harlow y sus hazañas en Revolver.
Entiendo Red Dead Redemption 2 como una declaración de intenciones, una forma de decir 'eh, va a ser como Red Dead Redemption pero más'. Sin embargo, creo que Rockstar podía haberse permitido una tercera entrega con nombre propio. Desde Red Dead Revolution a Red Dead Retribution, poniendo en medio todas las gracias con Rabito, Ryohazuki, Requete, Ramoncín o Ronaldinho. Rockstar cuenta con toda nuestra atención y el título habría funcionado igual sin necesidad de cambios nominales pero el marketing al final es el que paga las facturas, y aquí paz y después Red Dead Redemption 2.
Supongo que esto hace pensar en que algún momento veremos la segunda parte de ese esperadísimo GTA que recupere las reglas de GTA San Andreas como GTA San Andreas 2. O que el próximo capítulo del oeste, si es que hay vida tras Red Dead Redemption 2, se llamará Red Dead Redemption 3. Algún día, dentro de unas décadas, un joven redactor aspirante a historiador -casi arqueólogo- del videojuego, publicará un artículo que se llame 'todo empezó con Red Dead Revolver'. Obviando por el camino el papel de Gun Smoke y el desarrollo inicial de Angel Studios para Capcom antes de ser comprado por los chicos de GTA y pasar a llamarse Rockstar San Diego. Cosas del marketing, ya sabéis.
¡Nos leemos!
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