PSVR sigue adelante. ¿Qué esperar de su nueva versión para PS5?
Desde el momento en el que se confirmó que el kit de PSVR actual será compatible con PlayStation 5, a Sony le queda una jugada por hacer: anunciar la nueva generación de su realidad virtual. Seguimos sin anuncios oficiales, sí, pero parece que nos llegan las primeras pistas de lo que podemos esperar a través del Collision 2019, un congreso de Toronto en el que Shawn Layden y otros empleados de la compañía se han subido al escenario para hablar un poco.
Según parece, PlayStation VR tiene previsto actualizarse a una nueva versión sin cables, con el doble de píxeles, con un campo de visión de 120 grados y con cosas tan curiosas como el seguimiento ocular. La cosa iría acompañada de un nuevo PS Move, que también añadiría algunas mejoras como el control háptico. Son rumores todavía, pero en definitiva la cosa apunta a que Sony no se baja del carro de la VR sino que estará más arriba que nunca.
Imagino que la intención es competir contra las grandes marcas -que son principalmente Oculus, HTC y Steam- pero mediante unos precios más ajustados, como hasta ahora. No tendremos un dispositivo premium pero estaremos más cerca de ellos que de las gafas de alta gama para móviles, y compensaremos esa menor calidad en la resolución y la precisión (que tampoco creo que sea tanta) con un catálogo de exclusivos que seguirán la estela marcada por Blood & Truth, Deraciné o Farpoint.
La jugada es inteligente. De los 4 millones de usuarios con PlayStation VR no serán pocos los que aprovechen el headset con PS5 y, además, con el estreno de la versión actualizada de las gafas de Sony se reducirá el precio de las primeras, y la puerta de entrada a esta tecnología será cada vez más asequible. Poco a poco, los nipones van estableciéndose como el lugar idóneo en el que los estudios quieren estrenar sus juegos o, como mínimo, portearlos tras salir en PC; como pasa con Beat Saber.
El gran titular es que la VR tiene un futuro prometedor con el apoyo de Sony, que está lejos de querer ser anecdótico. Cada vez hacen falta menos cables en esta tecnología -ahí tenéis Oculus Quest- y al mismo tiempo cada vez hay más juegos interesantes en su biblioteca. Los tests están hechos, la maquinaria en marcha y el precio cada vez está más cerca de llegar al público medio. Esto se pone interesante.
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