PS4 y PSVita, condenadas a entenderse
El nuevo pack que se lista en Amazon Francia, hermana definitivamente a la PS4 con PSVita. La pequeña, en su evolución desde PSP, apunta a las consolas mayores, claro que sin alcanzarlas. Una prueba de esto es la versión de Borderlands para la portátil. Se aspira a convertir esos títulos a ella pero ¿para qué? El juego remoto ya permite jugar a Infamous Second Son, bien, en ella. Los ports a la pequeña pierden todo su sentido de esta manera si ya se posee una de sobremesa, lo que se supone un paso obvio. Otra cosa sería hacer un juego paralelo, un spin-off o un experimento ¿pero dos títulos que pretenden ser iguales?
Las portátiles tienden a convertirse en complementos de sus mayores si lo que buscan es parecerse a ellas. Es lo que sucede en el caso de PSVita, con una pregunta que merece la pena formularse ¿Está yendo en el camino correcto la máquina? Resulta curioso que cuanto más se acerca la portátil a una PS3 peores son los ports que se finiquitan para ella. Sin embargo, cuando las distancias técnicas son mayores, el ingenio y el darle una vuelta de tuerca al planteamiento funciona, sacando versiones tan distintas de videojuegos como, por ejemplo, Castle of Illusion y los Sonic si comparamos Master System con Megadrive, y muy buenos ambas.
En mi opinión, dejarse de historias y unir a la PS4 con PSVita es la respuesta sensata a esta situación; lo que a su vez significaría olvidarse de más ports ya que si quieres disfrutar de ello, lo suyo sería aprovechar la propia consola de sobremesa, y centrar los lanzamientos en títulos que realmente necesita la consola. No me hagas un Killzone porque ya lo hay en la plataforma mayor, pero sí ese segundo Gravity Rush, no me hagas un port de Borderlands, hazme una historia dentro de su universo, cambiando perspectiva y jugabilidad para experimentar con nuevas fórmulas. Y de paso, organiza un market adecuado y ágil para que los videojuegos indie puedan fluir, sin tener que esperar varios meses a que por fin puedan llegarnos.
Otro caso muy distinto es el de 3DS, que presenta batalla con una opción inédita en Wii U: el 3D. Con él como arma, resulta inverosímil plantear algo similar en la consola mayor; además, ellos se han adelantado a esta tendencia de Sony ofreciéndola en el mando de la Wii U, que aunque haya fracasado con eso del juego asíncrono, sí lo ha conseguido ofreciendo la posibilidad de jugar con la televisión apagada.
Pero la 3DS es un caso muy distinto al de la PSVita. Sabiamente, ha sabido no acercarse a la consola mayor, y al no hacerlo, se acabaron los ports, sí títulos similares pero distintos y propuestas que se dan la mano como la de Smash Bros. ¿Si una portátil adquiere el potencial de una PSVita ha de irse siempre en una campaña conjunta con su consola mayor?, pues puede que sí. Lo cierto es que este pack puede marcar un antes y un después en la manera de entender las portátiles. Tiempo al tiempo.
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