1. Mundogamers
  2. Noticias
  3. PS4

Por qué sé que dejaré Destiny

Tarde o temprano, pero lo haré
Por Bruno Louviers

Llevo jugando como un loco a Destiny desde principios de verano, cuando me dio por recuperar el juego a raíz de la segunda expansión, que lo había arreglado bien y, desde que lo jugué para analizarlo, me había venido picando bastante. Desde junio, he jugado compulsivamente asaltos, raids, diarias, crisoles, ocasos y todas las pruebas que el juego tiene, y aunque se repite como el ajo, ese no ha sido nunca mi problema con él. Mi problema, y a raíz de El Rey de los Poseídos se ha hecho más grande, es que es un juego desagradecido.

 

Supongo que sabéis que Destiny te da recompensas por terminar determinadas misiones, pero que estas son siempre o casi siempre aleatorias: te puede caer ese arma que tanto te gusta u otra cualquiera, llevándote de este modo a un punto de hartazgo y desesperación que el juego, muy inteligentemente, palia dándote no lo que quieres, pero sí una pequeña recompensa que te parece suficiente y que te empuja a pensar que te dará lo que quieres en la siguiente ocasión. Y así, decenas o cientos de veces.

 

123010Destiny 20151013230759

Los micropagos, la verdad, no me han molestado lo más mínimo

 

En el fondo, Destiny es una máquina tragaperras compleja que, gracias a la última expansión, al menos te da algunos premios fijos por hacer misiones que son un auténtico coñazo pero que las haces porque la recompensa está ahí, muy cerca. Así, la misión para conseguir la espada exótica de tu personaje (solo consigues una por personaje, si quieres todas, oh, hazte otros dos personajes) te obliga a coger unos 200 objetos de un tipo para conseguir un paso de los cinco que componen la misión. Esto, señores, es un puto coñazo. Pero lo he hecho por la espada.

 

Poco a poco, el Bruno que se engañaba pensando que la recompensa de Destiny merecería la pena ha empezado a ver que no, que no lo merece: que estoy jugando muchos menos juegos de los que debería por las horas de raids que echo a la semana, que repito una y otra vez lo mismo como esos jugadores de MMO con los que tanto me metía y que el vicio me está saliendo caro. He resistido la tentación de pagar 10 euros por un baile, así que parece que me voy curando poco a poco. 

 

123011mark van haitsma mark van haitsma sleep stimulant in game

Sigo esperando a que habiliten de nuevo la misión del Símil del Sueño...

 

De momento, sigo jugando a Destiny, con un poquito más de perspectiva y de relax: no me voy a morir por no hacer una misión diaria o los contratos del día, igual que tampoco me pasa nada porque la Muerte Roja se me siga resistiendo. Y sin embargo, cada vez veo más próximo el día en el que me dire: bah, paso de Destiny, y me quite de esto durante mucho, mucho tiempo. Realmente, Bungie ha hecho un juego muy divertido y que engancha, pero también uno que es muy fácil odiar y que encabrona una burrada.

 

El 24 de noviembre se lanza la expansión de Bloodborne y sé que por From Software sí seré de dejar Destiny sin miedo, así que no sé si mi vicio con el juego de Bungie tiene fecha de caducidad o no. Solo sé que como un jefe de la raid de Oryx vuelva a darme solamente dos fragmentos putrefactos puedo hacer alguna locura. Si veis titulares tipo "Apuesto joven mata a 4.000 personas en el centro de Madrid", sabréis que he sido yo.


<< Anterior Siguiente >>