PlayStation Plus y la venta de juegos digitales de consola

Sony ha presentado una oferta espectacular para dar el salto en 2013 a PlayStation Plus, el servicio de suscripción de los japoneses en el que se reciben numerosas bonificaciones para usuarios de PlayStation 3 y Vita. Comenzando ayer y terminando el próximo 9 de enero, ahorra un 25% del precio total de la suscripción anual y únete a él por 37,49 euros. ¿Ventajas? Más de 60 juegos con mayúsculas a los que jugar de forma gratuita durante todo el año y numerosas ofertas y ventajas que se traducen en accesos exclusivos a betas o demostraciones a los que no se pueden acceder si eres un usuario standard de la Network.

¿Responde con algo Microsoft al movimiento de Sony? Ofertas, ofertas y ofertas, algunas muy interesantes: descuentos de hasta el 75% en juegos, que se traducen con precios tan buenos como un Jet Set Radio a 400 Microsoft Points, Bully a 800, Sonic Adventure 2 a 400 o Mark of the Ninja a 600. Algunos juegos del Games on Demand de Rockstar también bajan de precio y se ponen a 20 euros algunas piezas imprescindibles como Max Payne 3 o Red Dead Redemption. ¿Es suficiente? Francamente, viendo lo que está haciendo Sony, no: tengo la sensación de que Xbox Live se está quedando obsoleto.

¿Qué podemos defender de nuestro Xbox Live Gold? ¿La tranquilidad de jugar, dicen, bien a nuestros juegos on-line? ¿Vale esa diferencia si lo comparamos con el servicio que ofrece Sony? Creo que en términos económicos, en los tiempos que corren, no. Xbox Live está ofreciendo características exclusivas a los usuarios de 360 que pueden estar bien, pero que están alejadas del espectro del videojuego y se acerca más al multimedia, ¿vale la pena? No tienes otra que pagar si quieres jugar en línea, por lo que estás casi obligado a abonar lo que pidan. Yo no creo que en Redmond estén con los brazos cruzados sin responder a lo que está aconteciendo en la competencia: estoy convencido de que se moverá ficha durante los próximos meses, y que como muy tarde se salvará el jaque de los japoneses en el próximo E3.

La que está en otra división es Nintendo: se la trae al pairo todo, tal que así. Ya pueden moverse unos y otros, no les importa lo más mínimo. Eso sí, en su pasividad han parido un Miiverse que debería inspirar a las orillas de la competencia, veremos cuánto tardan unos y otros en sacarse de la manga una red social exclusiva para sus máquinas en la nueva generación que está por venir. Apostaría todo el dinero del mundo a que ambas se animarán a montarse su propio tinglado social y que Miiverse todavía tiene alguna carta por enseñar. Puede sonar tópico, pero tener un lugar en el que reunir a la base de jugadores que tienen una y otra plataforma es un éxito seguro: si convencen a las third parties de ello y van a una creo que veremos algo interesante de ello.

Pero a pesar de los temas presentes, el utópico mundo de las ofertas y ventajas de las consolas vive en una anarquía constante con lo que se está viviendo en los compatibles de todo el mundo. ¿Os hablo de Humble Bundle de THQ? ¿Os lo imagináis en consola? Claro que no. GOG, por otra parte, ha comenzado una campaña de ofertas locas en las que ofrece obras como The Witcher 2 a 7,49 dólares, su primera parte a 2,49 o Farenheit por 3 miserables dólares. ¿Hablamos de Sierra? El Pasc se mearía encima si no fuese un enfermo de la empresa y probablemente ya tenga todo lo ofrecido: King's Quest del 1 al 8, la pentalogía de Quest for Glory, la quadrilogía de Police Quest, las seis entregas de Space Quest junto a Police Quest: SWAT 1 y 2 por 20 ridículos dólares. Repito: 20 dólares. Mejor le pegáis un vistazo y sacáis vuestras propias conclusiones: hay mandanga hasta aburrir.

Ahí no acaba el asunto: la red implosiona ante los rumores que hablan de que Steam comienza hoy mismo las ofertas de navidad, y todo el mundo sabe qué significa eso: bye bye paga extra, holita hola juegos a cascoporro comprados con pala y a peso. ¿Te imaginas hacer eso en consola? Claro que no te lo imaginas, es que resulta impensable viendo los precios de unas y otras. Si se adaptase el Cuento de Navidad de Dickens al mundo de las ventas on-line de videojuegos en consola no lo duden: el señor Scrooge sería japonés, oriundo de Kyoto concretamente, pero el de Redmond y Tokyo no están muy alejados de ese hipotético protagonismo. A ver si se les aparecen los fantasmas y se llevan un susto y recapacitan. Los tiempos están cambiando y ellos se mantienen en un sistema en el que únicamente hay una ganadora: las barreras que impiden un comercio más lógico en los contenidos descargables de las máquinas de Nintendo, Sony y Microsoft.