PlayStation 4 se protege de los piratas
Más allá del actual mercado de las videoconsolas, las desarrolladoras de software tenían entre sus filas su propio departamento de programación destinado única y exclusivamente a proteger sus videojuegos contra la piratería. De hecho, esto es algo todavía vigente en el entorno PC, donde hasta el más pequeño de los estudios intenta salvar su obra de la siempre presente lacra de las copias. Sin embargo, en lo que a videoconsolas se refiere, al encontrarnos ante un sistema cerrado difícilmente un desarrollador podría meterle mano a este asunto, cayendo todo en manos de la empresa responsable del hardware en cuestión.
Muchos han sido los esfuerzos que ha hecho Sony en este sentido con PlayStation 3, luchando a brazo partido contra aquellos que se empeñaban en entrar en sus tripas y violar la seguridad de la máquina. Prueba de ello son las constantes actualizaciones que tantos santos pacientes ha quebrado, con usuarios deseosos de jugar a tal o cual juego y encontrarse de sopetón con una descarga obligatoria de un buen puñado de megas muy, pero que muy lentos de descargar. Pero ni aún así han conseguido librarse de los mañosos hackers, si bien el ratio de consolas pirateadas en muchísimo menor en comparación con la violadísima Xbox 360. No obstante, parece que de cara a la siguiente generación Sony se va a poner las pilas.
El caso es que la empresa ha patentado un sistema con la intención de poder detectar irregularidades en los tiempos de carga, con el fin de bloquear el software en el caso de que la validación no pasara el análisis. Por supuesto, el mismo proceso se encargará de realizar ciclos adicionales, en pos de asegurar que no se trata de un error de hardware en términos de lectura. Curiosamente, y según los datos que se pueden ver en la página de registro, este sistema se firmó en agosto del 2011, pero se ha hecho público justamente un día después de la presentación en sociedad de PlayStation 4.
Está por ver la eficacia de este sistema, puesto que a bote pronto presenta una serie de vacíos que se prestan a ser como poco comentados. En primer lugar, hay asumir que cada juego presentará unos distintos valores de carga, que serán validados... y esto puede conllevar la exigencia de una conexión perenne a internet o, en su defecto, de la constante actualización del sistema en términos de tener al día una librería con estos datos almacenados. Porque creo que será poco menos que imposible estandarizar ciertos parámetros de grabación/lectura de cara a todos los lanzamientos.
En segundo lugar, es complicado no tener en mente los avances que suele tener todo lo relacionado con la picaresca informática. En este sentido, es fácil que se logre alcanzar una perfección milimétrica a la hora de copiar un disco... y valorar las pequeñas diferencias que pueda tener con respecto a un juego original no es baladí. De hecho, a día de hoy no he visto dos consolas que, cronómetro en mano, tarden exactamente lo mismo al cargar un blu-ray. Las diferencias de fábrica de cada lector, el desgaste y los problemas del hardware en sí se convierten en parámetros que complican sobremanera la exactitud que pueda tener este nuevo sistema antipiratería.
Con todo, estoy deseando contemplar lo que hará Sony al respecto. Todavía resuenan en mis oídos aquellas palabras de los que decían que Sony vendía muchas PlayStation, PlayStation 2 y PSP gracias a la piratería, y que ellos mismos propiciaban que fuera fácil toquetear en este sentido sus consolas. Aparte de que es una afirmación que se escapa a toda lógica, la compañía ha demostrado con PlayStation 3 y PS Vita un indiscutible empeño en lo que a proteger la vulnerabilidad de sus máquinas se refiere. Y parece claro que PlayStation 4 no se va a quedar atrás en este sentido. Veremos...
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