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PlayRoom, puerta abierta a las perversiones de cuatro locos en Twitch

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Por Víctor Junquera

No es culpa de Sony o de Twitch que en la red se nos escapen dos o tres locos que no tienen ningún complejo o vergüenza, pero si los medios quieren que Sony o Twitch se coman el muerto, os garantizo que lo lograrán, ya que algunos imbéciles lo están poniendo en bandeja. Como seguramente muchos sabréis, Twitch viene de serie en la consola japonesa, y permite a los usuarios hacer retransmisiones de juego en directo con imagen y sonido de los protagonistas. ¿Cuál es la merma? Básicamente que debe ser un juego, y que ahí no puede entrar cualquiera a hacer el imbécil, cámara y juego mediante. Entonces aparece PlayRoom.

 

PlayRoom es una aplicación de realidad aumentada que se ha añadido a PlayStation 4 que permite, entre otras cosas, el juguetear con el Dual Shock 4 mientras nos vemos en la pantalla. Más gráfico que con el vídeo de PewDiePie, imposible:

 

 

Técnicamente, es un juego que corre en una consola de videojuegos, por lo que muchos no han dudado en lanzarse en Twitch con PlayRoom para lanzar algunas retransmisiones de terrible mal gusto. Entre otras cosas, se ha visto a parejas tener sexo, armas de fuego, retransmisión de pantallas con vídeos pornográficos. La cuestión es que no estamos hablando de un ordenador en el que se accede sin el control de los padres, hablamos de una consola recién estrenada que puede verse en un problema gigante si algún padre despreocupado descubre a su retoño disfrutando de una pareja exhibicionista.

 

Nos metemos en un asunto truculento por culpa de cuatro degenerados que, como suele ocurrir en problemas como el presente, coartarán la libertad de usar un servicio en un sistema que parece óptimo para ello. No es justo esgrimir el 'no estamos preparados' cuando es algo obvio y común que en la red esos cuatro descerebrados acaben desvirtuando el trabajo de miles, ya que pasa en cualquier ámbito que conozcas, pasando por la música, el deporte o la cultura, lo malo siempre prevalece y vende más. De hecho, aquí estamos, hablando de ello, avisando de lo mal que se están comportando los cuatro colgaos de siempre, cuando podría estar hablando de lo bien que está yendo el sistema y lo mucho que están disfrutando los usuarios de consola con él.

 

Prueba de ese recorte de nuestras libertades está en que la propia Twitch ha terminado bloqueando el contenido de PlayRoom, estuviese o no ligado a juegos propiamente dichos. Es un deber que está en el de los propios usuarios de Twitch y PlayStation 4 el evitar que acontecimientos así nublen la industria. Somos nosotros los que con nuestros actos evitaremos que el presente capítulo vaya a mayores y convenza a algún padre asiduo a la prensa británica que la consola es un aparato de nueva generación para el cibersexo. Denunciar e imposibilitar, en la medida de nuestras posibilidades y lo que esté a nuestro alcance esas actitudes es una responsabilidad común.

 

Evitemos que cuatro degenerados manchen una comunidad tan maravillosa.


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