Los mundos abiertos de Destiny 2 abrazan al sandbox tradicional
Todavía con mucho recorrido por delante para poder ofreceros algún tipo de conclusión con Destiny 2, ya he podido sumergirme en sus mundos durante unas pocas horas. De momento, el título no me está decepcionando, y se nota que Bungie ha querido hacer evolucionar muchas de las ideas planteadas en la primera entrega para que resulten algo más accesibles y atractivas para todos los jugadores. Esto también incluye el nuevo planteamiento de sus mundos abiertos.
Destiny 2 vuelve a contar con diferentes planetas que visitar con libertad. En cada uno de ellos hay diferentes actividades, tareas y misiones que realizar, de una manera diferente a lo visto en Destiny. En el primer juego, desde el menú, seleccionabas la actividad que querías y automáticamente comenzaba, dejando de lado la exploración libre de esos escenarios a la opción de patrulla, que apenas te permitía farmear algunos elementos básicos, matar enemigos y realizar pequeñas misiones. Destiny 2 abraza el concepto de mundo abierto visto en multitud de sandbox hasta la fecha, cambiando bastante la manera de jugar.
Ahora, en cada uno de los planetas, hay viajes rápidos en diferentes localizaciones. Pero no podemos iniciar directamente una misión, sino que tenemos que desplazarnos por el mapa para hacerlo. Incluso podemos ir marcando con señales visuales estas localizaciones, para poder dirigirnos a ellas de manera más fácil. Es exactamente el mismo concepto que hemos visto en multitud de juegos con mundos abiertos, pero aplicado al estilo y características propias de Destiny 2. Por el camino, podemos encontrarnos con otros enemigos o actividades, e incluso podemos desviarnos para adentrarnos en zonas secretas o para abrir todos los cofres secretos (sí, en los escenarios también se han incluido este tipo de coleccionables).
Es un cambio bastante drástico, aunque parezca mentira, y cambia bastante la manera de plantear el juego de Destiny 2 respecto a Destiny. Lo mejor es que el título da la sensación de ser mucho más MMO, explorando los mundos con libertad y realizando las tareas que queremos sin tener que andar todo el rato entre menús. Lo peor es que parece que se simplifica un poco el sistema, aunque todavía me queda mucho por ver para sacar algún tipo de conclusión en este y otros aspectos, como os he dicho al principio.
Este cambio en los mundos abiertos de Destiny 2 me parece acertado, aunque quizás toma elementos demasiado típicos de otros muchos juegos. También me indica, por lo poco que llevo jugado, que Bungie quiere que todos los jugadores se sientan cómodos y puedan disfrutar de la experiencia sin perderse demasiado y sin tener que recurrir a elementos externos al propio videojuego. Destiny era complicado de entender para todos, no nos vamos a engañar, y Destiny 2 trata de simplificar algunos elementos para resultar más atracitvo a la mayoría. Lo bueno es que si todos estos cambios, como el de los mundos abiertos, son aplicados para evolucionar su concepto, me parece bien.
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