1. Mundogamers
  2. Noticias

Los actores de doblaje de Madrid van a la huelga

Los videojuegos NO se verán afectados
Por Rafa del Río

El pasado 9 de marzo el sindicato de actores madrileños de doblaje convocó una huelga general que continuará hasta que se logre un acuerdo en las negociaciones. ADOMA, colectivo que recoge un total de 250 profesionales y quince empresas de la Rama Artística del Doblaje y la Sonorización de la Comunidad de Madrid, denuncia la situación de desprotección en la que se han quedado tras la reforma Laboral y la disolución de la patronal del sector (AMEDYP) con la que estaban negociando.

 

Juan Navarro Torelló, actor de doblaje que sin duda os sonará por ser la voz de Kratos, James en The Last of Us o, en el mundo cinematográfico Nick Frost, ya sabéis, el gordito de la trilogía Cornetto, declaró en el foro de eldoblaje.com: "(...) Se pretende tener un nuevo convenio, el que tenemos, con la maravillosa reforma laboral, ya ha caducado (era del 93). No pedimos nada más que un convenio nuevo. No pedimos ni dinero, ni que se nos equipare con los actores de doblaje de Europa que tienen sueldos mayores. Sólo queremos un convenio que nos regule a todos. Quedarnos tal y como hasta ahora, aunque hace 20 años se rebajaran los salarios un 25% y nunca se volvieran a subir. (...) Creo que no pedimos mucho. Pues aún así algunos estudios no quieren que tengamos convenio y esperan que nos desunamos y que vayamos cada uno por su lado, que esto sea la jungla y sacar el mayor provecho de esta situación". 

 

Ivan Muelas, voz de Nathan Fillion, Benedict Cumberbatch, y en el mundo jueguil Connor Kenway y Luke Skywalker, matizó: "No pedimos más dinero, tan solo que NO se nos baje el salario ya de por si irrisorio, esta es una labor muy difícil y una rama artística que, entre todos, debemos cuidar por el bien de todo el colectivo".

 

Estudios vacíos hasta que la cosa se aclare

 

Los videojuegos no se verán afectados

A priori la huelga no afectará a los videojuegos ni a contratos publicitarios al margen de éste tan necesitado convenio, ya que derivan de otras burocracias. Sin embargo esto no significa que no vaya a tener repercusión en gran parte del fandom, ya que casi 85 trabajos entre series y películas serán paralizados hasta que la situación no se normalice. Películas como Maléfica, de Disney, que tenía planeada su proyección el 30 de mayo, Mil Maneras de Morder el Polvo, dirigida por Seth MacFarlane y programada para verano, o la nueva entrega de X Men prevista para el 23 de Mayo, verán retrasados sus trabajos de doblaje. Lo mismo pasará con series como Phineas y Ferb, Once Upon a Time, LLama a la Comadrona, Arrow o Revenge.

 

Entonces... ¿Nos cabreamos?

Pues no, yo creo que no. Hay una puntualización en el discurso de Juan Navarro que me ha llegado al alma: "No pedimos ni dinero ni que se nos equipare con los actores de doblaje de Europa". Llamadme sentimental, pero me ha tocado la fibra, porque... ¿Tan mal vistos están los dobladores en nuestro país? Está claro que sí, aunque más que mal vistos, son invisibles. Salvo casos excepcionales como nuestro padre de todos, en paz descanse, Constantino Romero, la voz más bonita del doblaje femenino Michelle Jenner, y ese Bruce Willis más largo que un día sin pan llamado Ramón Langa, hay que ser muy aficionado al género o estar metido en el mundillo para reconocer nombres como Juan Navarro, Ivan Muelas, Licia Alonso o incluso María Blanco y Lorenzo Beteta, ganadores del concurso de dobladores de videojuegos 2013 y voces de Joel y Ellie en The Last of Us.

 

Heavy Rain, la actriz y dobladora Michelle Jenner junto al actor a.k.a. famosillo de turno

 

Hubo un tiempo en el que los videojuegos venían doblados por RDD2, las letras se limitaban a aparecer en pantalla mientras un pitido intermitente nos hacía pensar que alguien estaba hablando -sí, Nintendo se ahorró una pasta en doblaje durante muchos años-. Anteriormente Robocop, de Spectrum, y varios títulos de PC ya habían hecho sus pinitos en eso de digitalizar voces, pero no sería hasta la llegada de Playstation y Saturn, que los videojuegos empezaron a llegar con voces humanas integradas contabilizadas en horas de diálogo. Al principio todos los puñeteros muñequitos hablaban en inglés o japo, y te podías dar con un canto en los dientes si traían subtítulos, aunque fueran en el idioma de la reina madre. 

 

Poco después la cosa fue evolucionando. Algunos juegos venían con subtítulos en español -sí, de España, no nos liemos ahora con castellano, castellano latino, español del estrecho y jamaicoll de callejones, que esto no es política-, y pronto la cosa se animó y empezaron los doblajes. La cosa fue accidentada al principio. Todos recordaremos ese invento ruin y mezquino, digno de aparecer recogido como crimen contra la humanidad en los catálogos juristas internacionales llamado "castellano neutro", que ponía a todos de los nervios por igual. El magnífico doblaje de Max Payne, fue seguido por uno de los peores de la historia de los videojuegos con Max Payne 2, y así, junto a joyitas del doblaje seguían apareciendo patadas en la ingle en forma de narración impersonal y forzada que hacían que muchos jugaran en VO o doblaran el juego con loquendo.

 

In Memoriam de un grande entre los grandes

 

Pero la cosa está normalizada al fin. Cada vez llegan más títulos perfecta-y correcta-mente doblados, y aunque muchos se resisten aduciendo excusas como el pluralismo lingüistico de GTA, la cosa va para bien. Es mucho más cómodo escuchar en nuestro idioma lo que nos dice un compañero cuando estamos bajo intenso fuego enemigo que tener que leer los malditos subtítulos mientras esquivamos a la pasma en un deportivo a 200 km/h. Parece que las compañías se han dado cuenta de esto, y aunque a la hora de la verdad todo sea cuestión de apilar moneditas, también es cierto que habría que reconocer su labor junto a la de esos actores de doblaje que nos hacen pensar que somos tipos duros y a esas actrices cuyas voces nos hacen soñar con un éxito que, en verdad, no nos pertenece.

 

La voz es un intrumento importante: forma parte de la condición humana, y nos puede sumir en trance, llevar a la locura o relajar hasta límites insospechados. Es una pena que en ocasiones no seamos conscientes del gran trabajo de doblaje -y ya que estamos, traducción- que hay detrás de un gran título, y tal vez haya llegado la hora de arreglar esto. Así que ánimo, actores de doblaje, contáis con todo mi apoyo -y quiero pensar que con el de MG- en vuestras más que comprensibles exigencias. Ojalá la huelga termine pronto y podáis volver a otorgar vuestra magia a las series y películas que, junto a los videojuegos, alimentan nuestra imaginación. ¡Suerte!

 

¡Nos leemos!


<< Anterior Siguiente >>