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Las primeras impresiones de Xbox Series X ilusionan: Sekiro a 60 FPS, GTA IV HDR, cargas rápidas y más

Sin parche ni actualización
Por Rafa del Río

Ayer se levantaba el embargo de las pruebas de retrocompatibilidad y automejora de Xbox Series X. Un grupo de medios internacionales seleccionados, entre los que se encuentran Venture Beat y Digital Foundry, publicaban sus impresiones tras una semana con la nueva consola de Microsoft y varios títulos retrocompatibles en su catálogo. Clásicos como Grand Theft Auto IV, Sekiro: Shadow Die Twice y Final Fantasy XV ponían a prueba las promesas de una Microsoft que parece haber dado en el clavo en esta ocasión

 

df xsx

 

Siete años de diferencia

Los tiempos han cambiado. Hace siete años por estas fechas el público hacía cola para reservar su consola de nueva generación. Xbox One salía coja de salida con un solo patín y un pie descalzo con el calcetín de una Kinect 2.0 que se veía a la legua que no iba a funcionar. Lejos de pensar en su legado, Microsoft apuntaba por un futuro que se había demostrado inane en Xbox 360 con un Project Natal que ni el pobre Molyneux había sabido defender. Unos inicios accidentados obligaron a Xbox a reinventarse con el paso de los años.

 

Terry Mierson y Don Mattrick hicieron mutis por el foro y Satya Nadella y Phil Spencer tomaron el testigo apostando por lo nunca visto -o visto poco- en el terreno de las consolas de la actual generación, convirtiendo la retrocompatibilidad y su Game Pass en el salvavidas que haría reflotar a la compañía. Un armario de madera en el que también había lugar para el bueno de Jack. 

 

Siete años después, Xbox Series X ha aprendido de sus errores y viene con promesas que sí nos interesan. Por un lado todos los servicios que nos permiten jugar mucho y en muchas plataformas a nuestros juegos favoritos. Por otro, la invitación a volver a jugar a nuestros mejores juegos sin tener que pagar de nuevo y con la garantía de hacerlo de la mejor forma posible. Las promesas de ver esas mejoras de forma automática sin necesidad de parches eran sólo eso, promesas hasta el día de ayer, cuando empezaron a hacerse públicas todas las verdades que había tras la primera presentación de Xbox Series X.

 

 

Mejoras automáticas de nueva generación

Ya no hablamos de promesas, sino de realidades, y como futuro usuario no podría estar más ilusionado con lo que leo en los medios internacionales. Por un lado tenemos a Digital Foundry haciendo públicos los resultados de su semana de pruebas y emocionados con el rendimiento de la consola, que como podéis leer en este enlace 'va mucho más allá de las mejoras de Xbox One X'. En un catálogo con varios títulos por probar, Richard Leadbetter alaba el trabajo de automejora de Xbox Series X con Grand Theft Auto IV. Un GTA IV que no solo alcanza sin despeinarse los 60 FPS sino que además lo hace aprovechando el modo Auto-HDR con un resultado sorprendente que permitirá activar esta opción de color en juegos antiguos que no cuentan con ella. Cabe destacar, eso sí, que Microsoft está comprobando el resultado del algoritmo en todos sus juegos, activándolo o desactivándolo según valoren el resultado título a tútulo. 

 

Venture Beat coincide con DF al hablar de Sekiro: Shadows Die Twice. El último gran éxito del aclamado estudio From Software luce en Xbox Series X mejor que nunca en consolas alcanzando unos 60 FPS estables a máxima resolución y con unos tiempos de carga que se agilizan de forma sobresaliente si instalas el juego en el disco duro SSD de la consola. En total 802 GB de almacenamiento ultra rápido que se puede expandir 1Tb. gracias a las tarjetas de memoria SSD. Saldrán de lanzamiento a un precio que se prevé oscilará los 229 euros, aunque es de esperar que bajen de precio según avance la generación a la vez que salen opciones más baratas. Venture Beat es bastante radical en su mensaje: 'No volverás a Xbox One y PS4' cantando las maravillas de Xbox Series X que podéis ver en acción en el vídeo de arriba. 

 

En resumen parece que Microsoft lo ha hecho muy bien en esta ocasión en lo que corresponde a retrocompatibilidad mejorada de forma automática y sin parches ni actualizaciones. Cabe destacar que no todos los juegos irán a 60 FPS -corresponde a los estudios elegir si desbloquear la tasa de animación o no-, y que tampoco todos los juegos contarán con Auto HDR si Microsoft considera que el algoritmo no funciona correctamente en ese título en concreto. Sin embargo todo apunta a que habrá un gran cambio entre el Enhanced automático de Xbox One y el de Xbox Series X, que va más allá del suavizado de texturas. Y esto sin entrar en cosas como el quick resume y los tiempos de carga vitaminados. Seas usuario de la marca o no, es interesante ver la recepción que está teniendo Xbox en esta nueva generación. Una recepción que parece decidida al fin a ver los muchos aciertos presentes y no los errores pasados de hace 7 años.

Como debe ser. 

 

¡Nos leemos!


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