¡Las demos están vivas!

Forza Horizon 2 tendrá una demo jugable que estará disponible en Xbox One a partir del próximo 16 de septiembre, un par de semanas antes de su lanzamiento, y es curioso que haya que celebrarlo, porque ya no es algo muy común, y una demo siempre es un beneficio para el jugador.

 

340 demos de juego marca ahora mismo el Bazar de Xbox Live de Xbox 360, y de la cantidad ingente de demos que salían durante sus primeros años a lo que ha habido en los dos últimos hay un abismo. Es un panorama desolador, no salieron precisamente pocos juegos, pero el jugador pocas veces tuvo la oportunidad de probarlos con antelación. Ahí se empezó a convertir en una cuestión de comprar 'a ciegas' o no comprar, mientras que una buena demo podía hacer mucho por un juego.

 

Sin ir más lejos, la demo del primer Forza Horizon me vendió el juego. Me mostraba lo suficiente como para saber a qué me atenía, algo que no hizo, por ejemplo, la demo de Test Drive Unlimited, que ofrecía una hora de juego libre (limitado), pero que en esa hora daba la impresión de que podíamos ver todo lo que ofrecía el juego.

 

O Crackdown, maravilloso Crackdown, con una demo completamente sincera que en 60 minutos te permitía moverte lo que quisieras, con una progresión de habilidades acelerada para que quisieses imaginar todo lo que podrías llegar a disfrutar sin límite de tiempo. Otra demo claramente vendejuegos.

 

 

Eso sí, los juegos deportivos no faltan a su cita anual con sus correspondientes demos jugables, y les funciona tanto a modo de promoción como de testeo.

 

Pero claro, con la llegada de las nuevas tendencias, la polarización del mercado entre juegos que sólo necesitan un nombre para vender y las nuevas tónicas que ofrecen algo parecido a demos de pago como los Early Access, el valor de una demo ha caído, y parece que ya no hace falta esa inversión de crear una porción atractiva del juego, porque estamos tan sobreinformados que muchos ya saben qué comprar y qué no con un breve vistazo a vídeos.

 

Pero sin embargo, Forza Horizon 2, un juego de una saga popular y con unas virtudes ya conocidas, elige apostar por una demo, porque sabe que tiene mucho que mostrar. Tal vez suene muy hater, pero de no haber tanta falsedad en la promoción de los juegos, podría haber más demos. Si muchos juegos tuviesen una demo jugable con la que demostrar novedades o mecánicas, muchos jugadores no caerían en comprarlos a ciegas para luego llevarse una decepción porque el juego no luce igual que en los tráilers.

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