Fallout 4 pierde libertad en favor de la coherencia

En anteriores juegos de Bethesda, uno de los aspectos que a mí me encantaba destacar era la libertad real que proporcionaba al jugador para ser todo lo que quisiera ser. No hablo de libertad en el sentido de extensión de mapa, posibilidades en los diálogos o múltiples ramas argumentales, sino de la posibilidad de hacer exactamente lo que más nos gustara con las herramientas que nos proporcionaban, obteniendo la sensación de que estabas aprovechando el juego aunque avances a tu manera. 

En Skyrim, por ejemplo, descubrías bastante pronto en la historia que eras el Sangre de Dragón, que eras el Elegido y que estabas destinado a salvar el mundo. Pero, sin embargo, eso no era un imperativo real para que te pusieses a cumplir esas misiones y para que dejaras todo atrás para cumplir tu cometido. Por lo tanto, podías elegir esa senda o simplemente podías decidir convertirte en un comerciante que se dedicaba a vagar entre la multitud de localizaciones del mapa ganándose la vida poco a poco, por ejemplo. Podías evitar combatir contra los enemigos, podías decidir obviar las misiones más peligrosas y, aún así, podías seguir subiendo de nivel y especializarte en muchos otros campos. Esa es una verdadera libertad de ser lo que quieras: proporcionar al jugador unas herramientas que él utiliza como quiere, y no por ello siente que se está perdiendo una gran cantidad de juego por el camino. Esto también ayudaba enormemente a la rejugabilidad: podías hacer una partida siendo un sanguinario asesino de inocentes, en otra podías elegir seguir la senda del Sangre de Dragón, en otra podías centrarte en convertirte en cualquier otra cosa... 

Fallout 4 también cuenta con esa libertad made in Bethesda, pero su estilo de juego ha evolucionado y no es tan notable. No puedes ser todo lo que quieras, porque el juego exige ciertas actividades a través de su historia y de la propia concepción de su mundo. Y no es algo malo, ya que simplemente se trata de una evolución natural buscando lo que mejor sienta al mundo post apocalíptico que recorremos en el juego. Ya hemos comentado en la web que se hace patente la pérdida del componente RPG en favor del Survival, y también queda patente que en Bethesda han querido perder un poco de ese factor libertad que tanto les caracterizaba en favor de una mayor coherencia. 

Lo más importante dentro del mundo de Fallout 4 es sobrevivir, por eso debemos buscar recursos continuamente y por eso no podemos estar con la guardia baja en ningún momento. Además, nada más comenzar el juego, la propia historia marca un objetivo muy claro e importante para nuestro personaje. Es un objetivo tan importante que para él/ella es ineludible, y todas las acciones que realizamos y todas las misiones que completamos vienen motivadas por cumplir ese objetivo. Claro que tenemos libertad total y por supuesto que podemos hacer lo que queramos una vez que estemos dentro de su mundo, pero aún así no dejaremos de vivir conversaciones y situaciones en las que queda patente que la motivación real del avatar que estamos controlando puede que no tenga nada que ver con la nuestra. 

En este mundo tan peligroso, además, es imposible obviar el combate y los enfrentamientos, a pesar de que en otros juegos de Bethesda sí que podíamos hacerlo. Aquí debes luchar y combatir porque es la única manera de sobrevivir, y si quieres cumplir ese objetivo tan importante debes matar para no morir. La propia historia, unido a su ambientación, son los que provocan que Bethesda haya decidido dar un toque al juego mucho más maduro, inteligente y coherente, a pesar de que por el camino han tenido que restar el RPG en favor del Survival y perder un poco de esa sensación de libertad absoluta.

Con esto no quiero decir nada negativo de Fallout 4, de hecho a mí me gusta este cambio de rumbo. Siento motivación real por seguir avanzando y trato de discernir hacia dónde me debo dirigir a continuación para poder cumplir este objetivo tan importante. Claro que te puedes desviar y te puedes perder en muchas otras historias interesantes, pero siempre hay una motivación en mente que provoca que tengas que acudir a las armas. El mundo de Fallout 4 es peligroso, y en un mundo de estas características la supervivencia está por encima de esa libertad que debemos ganarnos.