¡Esta carta me falta! Steam introduce las trading cards

Ahora que parece que los logros atados a un solo juego están pasados de moda, Steam propone un nuevo juego: las trading cards. La tienda online las ha hecho oficiales para todos sus usuarios. La pregunta que nos hacemos en Mundogamers se sencilla, ¿qué narices son estas cartas? ¿Sirven para algo más que para acumular polvo (virtual)?

La idea de Valve es crear un metajuego alrededor del propio juego. Las cartas son, de momento, un accesorio virtual. Cada juego tiene un número de cartas (Zack Zero tiene seis cartas, por ejemplo) de las que tres se desbloquean a medida que se va jugando al juego. Se desconoce si hay que jugar unas horas concretas o si el proceso es aleatorio. En los juegos free2play, en cambio, Valve obliga a pasar por caja para obtener las cartas. Eso sí, en cuanto se consiguen la mitad de las cartas, es imposible encontrar más por la vía del juego.

Es en ese momento cuando entra en marcha el mercadeo. Hay quien está pagando cerca de un euro por las mismas o quien las intercambia. El quid de la cuestión es que Valve quiere que sus usuarios interactúen para poder saciar sus ansias de completismo. Aparentemente, podemos incluir diferentes objetos en los cambios. En CVG explican que, cuando el sistema estaba en fase beta, cambiaron una carta de Counter Strike por un sombrero de Team Fortress 2. 

Conseguidas las cartas... ¿tiene algún sentido este coleccionismo? Aparentemente sí. Las cartas nos ayudarán a crear insignias, que nos diferenciarán del resto de usuarios. Al crear una insgnia las cartas se destruirán pero, ojo, si las reunimos de nuevo podemos crear otra igual que nos dará un nuevo nivel. Así, hasta llegar al quinto que, de momento, es el máximo. Pero más allá de la estética, Steam también quiere premiar a los usuarios que utilicen este sistema. Por ello, los jugones que más se trabajen sus insignas y sus barajas tendrán acceso a emoticonos, fondos de pantalla y, aquí llega lo más interesante, futuros descuentos para nuestras compras.

Valve asegura que, por el momento, las cartas son una herramienta de colección e intercambio y que no suponen un juego en sí mismas. Nos creemos al estudio, pero el mercado de las cartas nos parece demasiado apetecible como para que no haya alguien en las oficinas pensando en dar un salto al mundo real. La idea nos la señaló en su momento FX Interactive. ¿Recordáis las Pro-Cards que han incorporado a FX Fútbol? Unas cartas que potenciaban el nivel de los jugadores y que eran de uso estricto para el juego. Eso sí, cuando salió el tema durante una visita a sus oficinas, nos comentaron que existía la posibilidad de dar un salto y explotar ese mercado que puede llegar a ser muy apetecible.

Que se lo digan a Novarama. A su manera, Invizimals ha sabido dar ese salto de lo virtual a lo real. Y ha tirado de un público con escaso poder adquisitivo, el infantil, para hacerse con una posición de privilegio en el mundillo de los cromos. Si Valve apunta alto y señala a los coleccionistas de cartas... ¿cuál será el límite?