El sexo en League of Legends: la nueva Evelynn
Aunque mi personaje favorito de Dota 2 es la Templar Assassin, en la lista de los que más me gustan se encuentra Queen of Pain. Akasha, que así se llama, está basada en una Banshee alzada por el Rey Lich. La historia cambia en el juego de Valve, donde es, de alguna forma, una… herramienta sexual del Rey Eclesiasta de Elze. Su contexto lleva a la Queen of Pain a ser sexy y despiadada, porque debe ser así. Esto es lo que entendemos por el concepto de sexualización justificada, y no lo que ha llegado a hacer Kojima en según qué casos que ahora no voy a comentar.
El caso de este personaje puede trasladarse a otro MOBA: League of Legends tiene un personaje en concreto cuya premisa es el dolor como placer. En los primeros años de vida del juego, este campeón no destacaba tanto en ese sentido, ya que sólo era uno más dentro del TETAS tan gratuito que siempre tuvo el título de Riot. Por suerte, el rey de los eSports (aunque parece que le queda poco para ceder la corona) ha ido evolucionando y sus diseñadores y desarrolladores se han dado cuenta de que la sexualización del personaje femenino está fea en la mayoría de los casos: necesitas una buena razón para venderme a un personaje sexy.
Es entonces cuando llega el rework a este personaje que os comento y que ya sabéis quién es porque su nombre está en el título de este artículo: Evelynn. Sí, son muchos los personajes sensuales que lo son de manera gratuita, y hasta Ashe tiene una bromita sobre lo sexy que es (¿Te gustan las curvas? ¡Me refiero al arco!). Pero entonces llega la Hacedora de Viudas y sabemos que ella es la única que debe ser así por “obligación” y que encima su forma de ser ha encajado, por fin, a la perfección.
La nueva Evelynn tiene unas habilidades increíbles y todas ellas están basadas en el tipo de criatura que es. Este campeón se nos presenta ahora como un súcubo, una hermosa criatura tan despiada como atractiva que sabe sacar el máximo partido a ambos rasgos de su personalidad. Y además, realiza todo tipo de comentarios e indirectas que tanto deberían chocar en un juego “para niños” que por fin se ha dado cuenta de que puede tomarse este tipo de cosas de una forma mucho más adulta.
Cuando desde el feminismo luchamos por la no sexualización de los personajes femeninos, no buscamos que todos ellos sean criaturas gordas y con bigote, que es lo que algunos pensáis. Buscamos cuerpos y caras, figuras, en general, mucho más reales, mucho más normales y naturales. Edades, peso, altura, rasgos faciales, actitud… Pero hay algo más.
No se lucha por erradicar la sexualización. Se lucha para que se use adecuadamente. Es decir, se lucha para que existan personajes como Evelynn, como Queen of Pain o como Poison Ivy. Son personajes que son sexys porque su sensualidad les da “poder”, entendido de la forma más simplona posible. No son personajes sexys para que un niño rata pase unos minutos de alegría. Lo son porque ahí radica su propia fuerza, porque ser sexy es para ellas una herramienta, un método para conseguir lo que desean. De esta forma podríamos decir que el personaje femenino se acerca tímidamente a la llamada fantasía de poder masculina (sí, lo que algunos llaman sexualización masculina).
A menudo enlazamos la idea de sexualizar a un personaje femenino con la visión de que va justita de ropa. Sin embargo, va más allá. Sexualizar es prohibir a este personaje todo tipo de rasgos y características propias de algo “no sexy”. Y aquí, amigos, es dónde encontramos el otro punto a favor de nuestra nueva Evelynn.
La Hacedora de Viudas ha dejado de ser un título para ser el nombre de su habilidad definitiva. Evelynn desata ahora todo su poder de la forma más temible y, por supuesto, nos deja ver cómo luce en ese momento. Es entonces cuando deja de ser una criatura sensual y pasa a ser el auténtico demonio que es. Esto es lo que verdaderamente me gusta. La súcubo consigue mostrar dos caras igual de temibles: aquella por la que darías todo para estar a su lado y aquella por la que darías todo… para huir despavorido.
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