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El mercadeo de Blizzard con Diablo III PC

Blizzard y la inercia de sus productos
Por Raúl Rosso

Metidos como estamos, en pleno fregao tras la salida de Diablo III, han aparecido unas interesantes declaraciones del director del juego, Jay Wilson, acerca de la casa de subastas con dinero real que Blizzard va a implementar en breve y en las que llama a cada cosa por su nombre.

 

En la entrevista, que se puede leer en Gamasutra, Wilson viene a decir básicamente dos cosas. Por un lado, que la idea nunca vino impuesta desde un prisma empresarial sino que fue una decisión del diseño del juego y la segunda es que, por qué no decirlo, ellos quieren ganar dinero pero quieren hacerlo con un servicio que tenga contentos a los seguidores de la saga.

 

La casa de subastas funcionará como si Blizzard fuera un comerciante más. Ellos ponen el espacio, ellos ponen en contacto a comprador y vendedor, ellos ponen las reglas del juego y, llegada la transacción, se quedan con una parte del pastel por la infraestructura que han montado. La idea se agradece por varios motivos, pero principalmente porque reduce las posibilidades de fraude y porque oficializa un mercado negro que hasta ahora todo el mundo conocía y que se podía convertir en un coñazo.

 

 

Muy posiblemente haya quien quiera negarse a pasar por el aro de Blizzard, desconozco todavía la comisión que se llevarán, pero la alternativa, eBay en la mayoría de los casos, tampoco viene libre de gastos. Más importante es que Blizzard sea capaz de ofrecer un buen servicio y poner la primera piedra de un mercado que está a punto de explotar, el de las transacciones in-game.

 

Por último, no es nada desdeñable la visión de Wilson y el arrojo que ha tenido para decir las cosas claras y asegurar que si montan un chiringuito de este estilo es para ganar dinero. Puede que Blizzard sea una versión actual de lo que Ultimate fue en su día, el estudio que va tremendamente a su bola y que no atiende a presiones externas para desarrollar su trabajo, pero queda claro que el videojuego es un negocio. Uno muy grande y que necesita de fuertes desembolsos para mantener ciertos tipos de desarrollos como los de Diablo III.


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