Dos ports más a la lista de juegos de PlayStation 4

Esto del cambio de generación no siempre es tan emocionante como parece. Si hasta el anuncio de PlayStation 4 alabábamos las posibilidades de un buen PC que nos haría mucho bien durante la transición generacional de las consolas porque ahora es cuando de verdad se nota la diferencia con respecto a la generación actual, ahora, tras el anuncio de PS4, tenemos que mirarlo desde la otra orilla y ver cómo PS4 está siendo lastrada por esta misma generación.

Hoy acaban de ser anunciados de la nada dos nuevos títulos para PlayStation 4, dos propuestas que pueden llegar a ser interesantes si se aprovecha con sentido ese botón Share de cara a los Youtubers y a toda esa nueva comunidad que Sony pretende crear con su consola, porque por lo demás, siguen pareciendo lo que son, juegos de PC que podrían haber sido para esta generación perfectamente.

Blacklight: Retribution, un shooter free-to-play que llegó a Steam en abril de 2012, es uno de los juegos que pasa a engrosar la lista de ports anunciados para PlayStation 4, y el dato ya da un poco de miedo, pero ya hay más ports y juegos no exclusivos de la próxima generación que juegos only for next-gen mostrados. Ya pueden sacar la artillería pesada en el E3, ya.

El otro de los dos juegos anunciados es Primal Carnage: Genesis, que alardea de Unreal Engine 4 pero sigue mostrando, incluso en el tráiler hecho con el motor del juego, los fallos más clásicos del motor como esa incómoda carga de texturas. Puede no ser una mala idea, ya que el terror con dinosaurios no ha sido muy aprovechado en los videojuegos desde hace mucho tiempo, pero, anunciado como está para PlayStation 4 y PC, sigue pareciendo un juego que podría encajar perfectamente en la generación actual.

Y estos dos títulos se suman a esa ya larga lista de juegos intergeneracionales, esos juegos que serán lanzados, con o sin mejoras, tanto en PlayStation 3 y sus contemporáneas como en PlayStation 4 como exclusiva o en las consolas que estén por venir como multiplataformas, que es a lo que apuntan juegos como el Deep Down de Capcom.

Diablo III es uno de los títulos de esa lista, uno de los que se anunció para PlayStation 4 como si de una revelación se tratase y que no llegó a causar tanto revuelo, como tampoco lo hizo la presentación de Destiny, el nuevo juego de Bungie que será lanzado tanto en plataformas actuales como futuras.

Por muy prometedor que sea, ni Watch Dogs es exclusivo de la próxima generación ni será uno de esos juegos que justifique la inversión en una nueva máquina, como tampoco lo serán Assassin's Creed IV o Battlefield 4, a los que habría que sumar una muy segura lista de juegos deportivos que también serán multiplataforma y multigeneración. Tal vez la cabeza de las emociones de David Cage acabe por convertirse en un vendeconsolas, pero por el momento no deja de ser una cabeza.

Knack, Driveclub, Killzone: Shadow Fall, inFAMOUS: Second Son como exclusivas de Sony y otros juegos auténticamente next-gen como The Witcher 3 o el nuevo Thief podrían ser juegos como los que esperamos ver de la próxima generación, pero por el momento no están en una posición de mucha ventaja con respecto a lo que tenemos hoy en día.