Destiny vuelve a meter la pata con su expansión

Convertirse en un Señor de Hierro es divertido en la nueva expansión de Destiny. Hay unas poquitas misiones que te cuentan una breve historia en torno a Saladino y esos guardianes míticos que se honran mes a mes en el Estandarte de Hierro y cuyas armas y armaduras llevamos con orgullo porque fueron la leche, aparentemente. Y hecho esto, Destiny vuelve a las andadas y a lo que nos ha dado una y otra vez durante estos tres años.

 

Efectivamente, hay que subir de nivel de luz a muy duras penas, consiguiendo engramas morados cada cierto tiempo, rezando porque sea, primero, la pieza de equipo que necesitas; segundo, aceptable en sus estadísticas y perks; y, tercero y más importante, que tenga algo más de nivel de luz que tu equipo actual. Es francamente estúpido que Bungie haya repetido este sistema al pie de la letra y como ya hizo en El Rey de los Poseídos, porque saben que esto es lo que agota y enfada a su comunidad.

 

 

Actualmente, o eres un miembro dedicado – esto es, tres horas al día – de Destiny o no vas a poder jugar a la raid en varias semanas. Si como servidor tienes un trabajo y una vida que te 'roba' las horas de grindear equipo en misiones diarias, semanales y asaltos, vas a tener un proceso muy lento dentro del juego. ¿Que esto es malo? No, pero es agotador no sentir que vas hacia delante y que esos 370 de luz que pide la incursión son algo inalcanzable en menos de un mes o más. 

 

Por supuesto, en la raid se avanza mucho más rápido, pero necesitas que tus compañeros tengan cierto nivel para poder sobrevivir y que te lleven de la manita mientras intentan vencer ellos a los enemigos que tú ni hueles porque estás muy por debajo del límite exigido. No es que la raid no deba ser exigente, ese no es el problema: lo que ocurre es que es la única forma divertida de crecer en el juego y, al final, la única de tener el equipo de máximo nivel, porque otra vez se ha cometido este error en Destiny.

 

 

Bungie tiene las cosas muy claras, no os vayáis a pensar que no es así. Saben que están dando una droga a los jugadores y que estos la consumen durante horas y horas a la semana, que no pueden parar porque cada hora que juegan consiguen un nivel más o un arma mejor o una exótica al nuevo nivel de luz o un perk en un arma que ya tienen pero que ahora pueden mejorar. Las cosas están mejor que con el Rey de los Poseídos, porque la infusión de armas al menos no hace la media de luz, sino que la iguala en el nuevo arma. Algo es algo.

 

Lo que ocurre es que servidor no va a dedicarse a grindear niveles repitiendo la raid cada semana, intentando encontrar a las personas adecuadas – porque esa es otra, no siempre hay seis personas dispuestas a hacer lo mismo entre tus contactos –y sufriendo porque las recompensas son aleatorias y cada vez es más y más difícil encontrar lo que se necesita. La máquina de tragaperras más compleja, a la par que efectiva, está de vuelta...

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