Amazon Luna, Game Pass y los videojuegos como ancla desesperada del ansia humana de inmortalidad
Ayer Amazon confirmaba los rumores y daba un paso adelante en su proyecto Amazon gaming con Luna. Una nueva suscripción mensual que permite al usuario acceder a más de 100 títulos en streaming a través de su PC. iPhone o su Mac. Amazon Luna sigue los pasos de otras suscripciones con un movimiento que llegará a los dispositivos Android en el futuro.
Amazon Luna, Game Pass Ultimate y las suscripciones
En los últimos años parece que son muchas las compañías que desean ser 'el Netflix del videojuego'. Sony ha puesto su granito de arena con PS Now y su catálogo retro con algunos títulos interesantes de la presente generación. EA, pionera en estas lides, cambiaba su Origins y EA Access a EA Play con la promesa de incluir sus serviocios en diciem,bre en Game Pass. Google planteaba un Stadia cuya obligación de comprar los juegos aparte no acaba de tener mucho sentido, y hasta Ubisoft se subía al carro, eso sí, por ahora sólo en PC. De entre todas sigue destacando Microsoft con su Game Pass Ultimate con un inmenso catálogo que puedes jugar en Xbox, PC y hasta móviles gracias al xCloud Gaming. Un catálogo al que se unen de lanzamiento todos los exclusivos de la compañía y los títulos de los 23 estudios que tienen bajo su ala.
Ahora llega Amazon Luna, y lo hace con algunas promesas interesantes que, sin poder mirare de tú a tú a Microsoft, sí parece suficiente para atraer a los usuarios de Amazon Prime en un primer paso, y más adelante, a todo el público cuando llegue a Android. Mando propio, Luna Controller, con Alexa incorporada por 49,99 dólares no obligatorio -puedes jugar con otros periféricos-. Precio de 5,99$ al mes sin límites y juegos a 1080p -4K en el furturo- 60 FPS con títulos como Resident Evil 7, Control, GRID o A Plague Tale Innocence en un catálogo de más de 100 juegos. A esto se une un canal Ubisoft que llegará 'proximamente' y que incluirá todos varios títulos de la compañía de lanzamiento con el mismo soporte, resolución y frame rate, con la promesa de alcanzar 4K en el futuro. Una opción interesante que si saben integrar en su servicio Premium podría dar muchas alegrías a los usuarios, aunque queda por ver cómo funciona en Estados Unidos antes de llegar a nuestras costas.
Nada dura eternamente
Microsoft lo decía en febrero y parece que no iba desencaminada: su nueva competencia son Google y Stadia. Y es que como ya comentábamos en el podcast de esta semana, el gigante de Redmond parece decidido a reconvertirse en un servicio de videojuegos, con hardware añadido pero enfocado a surtir de títulos a sus usuarios a cambio de una suscripción. Una idea que a los más románticos puede resultar molesta, incluso sacrílega, pero que no es más que un reflejo de la evolución que vivimos como sociedad.
Decía Machado que todo pasa y todo queda, y El Cuervo que nunca llueve eternamente. Dos enfoques del tempus fugit que tratan de evitar esa obsesión del alma humana de alcanzar la inmortalidad a través de la permanencia de los hitos cotidianos de su día a día. Nos aferramos a lo material como una forma de saber que seguimos aquí, que seguimos siendo nosotros, pero lo cierto es que nunca nos bañamos dos veces en el mismo río y al final nada dura para siempre. Ni lo digital ni lo físico. Ni siquiera en la caja fuerte de nuestra memoria permanecen inalterados los recuerdos de esa infancia que tratamos de revivir al jugar un remaster, un remake o una simple rom rescatada del pasado.
Las suscripciones y lo digital parecen ser el futuro, aunque sigue quedando hueco para lo físico y la compra directa del producto. Toca abrirse en abanico como público y empezar a ver qué nos resulta más conveniente a cada uno como usuarios. Como os decía antes no os engañéis: pagamos por una licencia, nunca por la obra en sí, y hasta el soporte más duro y resistente tiene los días contados. Al final se trata de disfrutar de la mejor forma posible, evolucionar, guardar bellos recuerdos y seguir adelante sin caer en esa mentira que es la necesidad de mantener todo intacto, eterno, incólume, a nuestro alrededor.
¡Nos leemos!
<< Anterior Siguiente >>