¿Videojuegos en las prime-time nacionales? Mejor que no

El otro día, Bruno nos hablaba del famoso vídeo de Conan O'Brien y el unicornio -bueno, más bien de Geralt, Yennefer y el unicornio, comentado por el señor O'Brien, que no es lo mismo-, y en medio de su discurso en el que igualaba el papel de Conan al del youtuber medio, apuntaba a que pagaría millones por ver algo así en manos de Wyoming, Buenfuente o Mariló Montero. Él pagaría millones por verlo...

 

...Yo mataría porque esto no pasara. 

Ojo, y no lo digo porque sea un veterano que no comprende el papel del youtuber -que sí que lo entiendo aunque no le vea la gracia a algunos videitos-, ni tampoco lo digo porque sea un froko de los juegos a los que cualquier rayo de luz sobre el medio asuste y haga rechinar los dientes. 

Ná. 

Digo esto -desde mi más profundo haterismo ilustrado- porque entiendo la idiosincracia de la televisión nacional, y hay cosas que, cuanto más lejos, mejor. Pongamos como ejemplo el caso del señor O'Brien en este vídeo de Clueless Gamer. La cosa funciona porque fluye, porque, hay variaciones de tono y esa figura -repetida hasta el infinito, lo sé- del dame más miga reconvertida a 'oye, pues lo que estoy viendo mola', más allá del tema del unicornio, que parece ser el único punto importante para muchos. 

 

 

Esto, trasladado a la televisión española, tendría sus peros. Las bufonadas de la Montero, que se congratula a sí misma viéndose crucificada en youtube por unos 'supuestos deslices' que están más calculados que las tonterías de Carmen Sevilla de hace veinte años, contra los intereses monetizadores de la Sexta o del canal que fuera a tocar el tema. Me veo a Wyoming dejando el tema en manos de alguna de sus chicas para hacer la gracia fácil: '¿Y la Iglesia que opina de esto?" y a Buenafuente metiendo el puyazo leído por la mañana en twitter contra los sempiternos enemigos, Rajoy y Aznar.

 

Me veo más de lo mismo, bombardeo mediático con los chistes de siempre copypasteados del formato extranjero en el que se basan y escudado en un dinero de publicidad que desaparece de otros medios que lo necesitan para subsistir y, qué queréis que os diga, los chicos de Meri me caen bien y no merecen eso.

 

En un mundo utópico...

En un mundo utópico el videojuego tendría el lugar que se merece, pero... ups, resulta que si miramos a nuestro alrededor ya vivimos en ese mundo utópico en el que el videojuego tiene el lugar que se merece. Y sin necesidad de Buenfuentes y Wyomings ni de ver a los chicos de la serie española de moda maltratando a un mando que no han tenido en las manos en su vida y haciendo como que gozan soltando burradas del estilo de: 'termino esta pantalla y ya' o 'espera que consiga 10.000 puntos y lo dejo'.

 

¿Pensáis que miento? Haced cálculos: Los videojuegos están en el cine. Y no,no me refiero a que haya pelis de juegos, que también, sino al hecho de que vayas a ver una película al cine y el tráiler que te casquen sea de Bloodborne, de The Order o de Call of Duty. Los videojuegos están en los telediarios, y no como intrigantes conspiracionistas que obligan a los niños a matar, sino por sus ventas, sus presupuestos y sus fechas de lanzamiento. La semana que viene los telediarios hablarán de Geralt de Rivia, de Sapkowsky y de Witcher 3, y a mí eso me suena a que están muy bien contemplados en la cultura actual.

 

 

Ese extraño complejillo del 'los videojuegos están mal vistos'

Lo siento, pero nunca he entendido ese complejo de que los videojuegos están mal vistos y la sociedad contempla al videojugador como a un niño rata o un adulto trasnochado con complejo de Peter Pan. No comprendo esa necesidad de ver al videojuego en todos los ámbitos y de igualarlo a productos que tienen diferente naturaleza y diferente canales de promoción. 

 

No hay más que ver el tipo de literatura que se comenta en los Late Nights para entender lo que quiero decir con esto. ¿De verdad pagaríais por ver a Buenafuente diciendo que Assassin's Cred Unity es la caña aunque lástima que no se haga en España en el congreso? ¿De verdad queréis ver a Wyoming y su política anti-sistema de llenarse los bolsillos con cuatro chorradas a la semana intentando meternos por cojones el Call of Duty con su pegatina de No a la Guerra? ¿De verdad queréis ver a Mariló Montero... eh... ¿¡De verdad véis a Mariló Montero!?

 

Buf, pues yo prefiero que no, la verdad. Para eso ya están los youtubers, algunos de la talla del colega Dayo, que al menos saben de lo que hablan y saben cómo se coge un mando. 

 

¡Nos leemos!

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