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Verano, la época para recuperar juegos

Porque no lanzan ninguno nuevo
Por Bruno Louviers

Como periodista de videojuegos, o lo que sea que soy, me encanta el verano. No, odio la playa y la montaña por igual. Como también soy trabajador autónomo, no tengo vacaciones pagadas salvo si decido adelantar mucho curro y tomarme un día o dos libres como máximo. Y no, tampoco tengo aire acondicionado en casa y trabajar es un suplicio debido al calor que arrojan mi monitor y mi sobremesa todo el tiempo.

 

Y sin embargo, lo adoro porque es la época en la que menos juegos se publican y más tiempo tengo para centrarme en recuperar todos esos juegos que he ido dejando atrás, bien porque no me tocaba a mi analizarlos y tenía que ponerme con otros juegos, bien porque no los he podido rematar tanto como me gustaria o bien porque simplemente ahora tengo tiempo para jugar porque no sale nada nuevo y no acumulo cosas.

 

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Madrid, hoy

 

Estoy seguro de que muchso de vosotros, que trabajaréis o estudiaréis un montón, también aprovecháis el verano para estos menesteres, y por eso sospecho que el verano es la mejor época para jugar a la consola o el ordenador. El ritmo de publicaciones durante el resto de meses del año es insano, y no es normal que en marzo o noviembre se acumulen tantos juegos, no solo porque no hay tiempo material para jugarlos sino también porque no hay dinero. 

 

El año que nos toca ahora mismo, 2015, es bastante sobrio en cuanto a lanzamientos veraniegos, y eso, insisto, es fenomental. Muchos podrán jugar a Batman Arkham Knight o Yoshi's Woolly World hasta que les sangren los dedos. Otros podrán terminarse de una vez The Witcher 3, que desde el 19 de mayo me sé de muchos que aún tienen que darle con ganas. Otros, como yo, recuperaremos juegos retro y de finales de 2014 por igual. 

 

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Juegos tan largos que te acabas pasados los meses y meses

 

Por eso, compañero que sufrís como yo la falta de tiempo, quiero que celebréis conmigolos días de libertad y de falta de videojuegos que, precisamente, nosotros solitos rellenamos con más y más juegos. ¿No os parece contradictorio que ocurra semejante fenómeno? ¿No va siendo, quizá, hora de que las compañías se calienten menos con la cantidad de títulos que lanzan en meses muy concretos y los dispersen también en otros momentos?

 

Yo que sé. De momento, yo estoy alegre porque voy a terminarme Dragon Age Inquisition (así ando todavía), voy a llegar al nivel máximo de Destiny con mi segundo personaje, voy a volver a pasarme Mega Man 3 (que es una costumbre anual que tengo) y voy a intentar rescatar los juegos más importantes de las consolas de Sega para documentarme un poquito más en sus plataformas, que siempre de niño fui un nintendero asqueroso.


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