Trucos para sobrevivir en The Long Dark, guía de supervivencia básica
Cansados de caminar por la fría nieve, con las mejillas ardiendo por las diminutas cuchillas de hielo que arrastra el viento y con los pies entumecidos por la hipotermia, nos tomamos un descanso en el refugio de Madre Gris para sentarnos al fuego y traeros algunos trucos que os ayudarán a sobrevivir a la demo y a los primeros compases de The Long Dark. Una serie de normas que no asegurarán vuestra supervivencia al 100%, pero servirán para manteneros vivos unas horas mientras descubrís las maravillas que esconde el juego de Hinterland.
Tanto si váis a internaros en Wintermute como si vais a jugar al modo desafío o a probar la demo de The Long Dark en Xbox One o PC, estos trucos y consejos os servirán como pequeña guía de bolsillo antes de entrar a cosas mayores como la caza, la pesca en el hielo o la fabricación de elementos avanzados, contenidos que os invitamos a descubrir por vosotros mismos.
1.- El Fuego es Vida
En The Long Dark, es fuego es vida, por lo que hay que aprender a manejarlo bien y a interactuar con las fogatas para sacarle todo su partido. Os parecerá estúpido, pero mis primeras partidas al modo supervivencia moría deshidratado o de hipotermia porque no me había dado cuenta de que se puede interactuar con las fogatas. Para encender una hoguera necesitamos una fuente -cerillas, antorcha, mechero etc.-, yesca -papel, cartón, astillas, etc.- y combustible -madera, ramas, palos, libros etc.-.
Para encenderla no tenemos más que irnos a la rueda de acción y elegir la fogata, o bien pulsar izquierda en la cruceta direccional y elegir dónde ponerla. Ojo, debe ser cerca del personaje, en un lugar protegido de las inclemencias del tiempo o en campo abierto cuando el clima lo permite. Una vez encendida, podemos interactuar con ella y añadir combustible para aumentar su duración y temperatura, cocinar y calentar comida y bebida, derretir nieve y hervir agua, así como secar la ropa -dejándola a su lado se seca antes que llevándola en inventario- y curar tripas y pieles de animales. Como beneficio extra, el fuego nos permitirá estar tranquilos sin que los lobos nos ataquen.
2.- Comida, agua, cansancio y temperatura
Nuestro personaje tiene una barra de estado o salud que se ve afectada por cuatro factores naturales: hambre, sed, cansancio y temperatura. Cada uno de estos factores tienen un medidor que, una vez se vacía, pasa a estar en rojo y comienza a afectar al estado del personaje, por lo que deberemos intentar llenarlo de nuevo cuanto antes ya sea bebiendo agua, café, te o refrescos; comiendo, descansando junto al fuego o durmiendo, según sea el caso.
Junto a estos factores naturales tenemos otros estados añadidos que pueden ser beneficiosos o perjudiciales. Como beneficiosos tenemos algunos como consumir bebida y comida caliente, que nos da una leve inmunidad temporal al frío, o beber café y tomar determinados fármacos que nos hacen más resistentes al cansancio. Como estados negativos tenemos las heridas, los esguinces y torceduras, las diversas enfermedades, las infecciones y las quemaduras, por poner algunos ejemplos. Cabe destacar que los factores naturales también afectan a nuestro personaje: el cansancio nos permite cargar menos peso, el hambre y la temperatura hacen que disminuya la barra de energía, y la sed y el hambre aumentan el riesgo de hipotermia.
3.- Heridas y enfermedades
Es importante el triaje en caso de malestar o ataque: detectar rápidamente el problema y darle solución en la medida que permitan nuestros recursos. Desde un ataque de lobo hasta una caída, acercarnos demasiado a la fogata o comer algo en mal estado, The Long Dark está lleno de accidentes que pueden causarnos la muerte por un despiste, y hay que estar atentos para detectarlos a tiempo y curarnos antes de continuar nuestra aventura. Os incluímos a continuación algunas dolencias y sus curas:
-Heridas: incluyen riesgo de infección y pueden causar la muerte por pérdida de sangre en pocos minutos. Hay que curarlas inmediatamente vendando la zona agredida con vendajes -podéis crearlos con retales, que sacáis de las prendas de ropa, toallas y cortinas-. Es interesante llevar encima siempre dos vendajes preparados por si los lobos.
-Riesgo de infección: viene causado por las heridas y se cura aplicándole agua oxigenada o antiséptico, ya sea farmacéutico o natural, sacado del liquen barba de viejo que encontraremos en algunos árboles.
-Infección: ¿No la curaste a tiempo? Toca tomar un par de antibióticos o una tacita de Te Reishi, sacado de las setas reishi que crecen en algunos tocones de árboles.
-Esguinces y torceduras: Nada de vendas compresivas, basta con un par de analgésicos o una tacita de te de escaramujos, unas bayas rojas que crecen en los arbustos.
-Quemaduras: Vendaje y analgésicos o te de escaramujos.
-Envenenamiento por comida (Gastroenteritis Bacteriana): Viene por comer comida sin cocinar y consumir productos por debajo del 50% de estado de conservación -la estrellita de los datos del producto: si está amarilla es peligrosa-. Se cura con Antibióticos y Te Reishi, y requiere una media de cuatro horas para curarse del todo.
-Envenenamiento por Agua (Disentería): Se adquiere al beber agua no hervida o purificada, y evita que nos recuperemos durmiendo aumentando la deshidratación. Se cura con antibióticos y Te Reishi.
-Parásitos Intestinales: Aflición que se adquiere por consumir carne de depredadores -osos y lobos- y que en caso de desembocar en enfermedad nos obligará a tomar antibióticos o Te Reishi durante 10 días.
-Fiebre de Cabaña: Transtorno psicológico que se adquiere por pasar demasiado tiempo en interiores. Si nos vemos aquejados de esta dolencia tendremos que pasar 24 horas al aire libre sin poder descansar en interiores en este periodo.
4.- Obtención de recursos:
Fuego: La madera es un bien común en The Long Dark, pero no toda arde igual ni tiene los mismos efectos. Los palitos los encontraréis por el suelo junto a las cortezas de árboles, aunque también podéis arrancarlos con las manos de las ramas. La madera reciclada podéis encontrarla en determinadas zonas habitadas, o bien rompiendo cajas de madera -manos- o partiendo muebles con la ayuda de un hacha. Una vez consigáis el hacha podréis obtener buena madera de las ramas más grandes y los tablones.
Comida: Podéis obtener comida de diversas formas, ya sea mediante la pesca en el hielo a través de las cabañas, cazando una vez obtengáis herramientas adecuadas o arrebatando las presas a los lobos y cazando conejos a pedradas. Junto a esto tenéis la comida prefabricada que iréis encontrando en asentamientos, cabañas, gasolineras, vehículos estacionados y mochilas perdidas. También los arbustos son ideales para encontrar espadañas que sirven de alimento y yesca.
Agua: Un bien fácil de conseguir. basta con hacer una fogata y derretir nieve. También podéis obtenerla de retretes, embotellada en neveras y en depósitos a lo largo del juego. Los refrescos azucarados y la comida de perros también sirven para combatir la deshidratación
Ropa: Un punto importante y difícil de conseguir. Generalmente se obtiene en cabañas, mochilas perdidas y asentamientos, si bien es posible obtenerla como premio a determinadas submisiones y, más adelante, mejorarla por nosotros mismos con los planos y las herramientas necesarias.
Medicamentos: Podremos construir vendajes con retales que sacamos de la ropa, las cortinas, las toallas y otros elementos a deconstruir. Los antibióticos vienen en forma de setas reishi que debemos preparar y hervir al igual que los escaramujos -analgésicos-. El liquen barba de viejo sirve como antiséptico para heridas y riesgo de infección. También encontraremos fármacos en asentamientos y cabañas.
5.- Montando la mochila
The Long Dark es un juego realista, y como tal es bastante amable en lo que respecta a la obtención de algunos recursos que se encuentran fácilmente en la naturaleza representada -leña, agua, yesca, piedras-, y muy parco en otros como la comida prefabricada o la caza. Por ello, hay que ser consciente de qué vamos a necesitar a corto o medio plazo y qué merece la pena que llevemos en nuestra mochila y qué no.
Por poner un ejemplo, nunca viene mal llevar combustible de sobra para montar una hoguera duradera en cualquier momento si tenemos que viajar para alcanzar una nueva zona. Para ello, nada mejor que unos pocos palitos, un libro que asegure el resultado de la fogata -da un mayor porcentaje de posibilidades de éxito- y unos buenos trozos de madera reciclada, corteza de cedro o madera de cedro, que nos permitirán pasar varias horas frente al fuego.
El agua podemos obtenerla en cualquier momento al hacer una hoguera, por lo que basta con llevar un litro o litro y medio encima por si las moscas, pero la comida es otro cantar. A no ser que estéis en terrenos de caza, pesca o recursos abundantes, aseguraos siempre de llevar comida de sobra. Por último, medicamentos. Llevad siempre encima mínimo 4 vendas, 2 analgésicos, 2 antisépticos y 4 analgésicos o sus equivalentes naturales ya preparados.
6.- El Tiempo y sus Efectos
En las primeras partidas es normal perder el tiempo y malgastar recursos y tiempo -lo que nos obliga a tirar de recursos- de forma poco eficiente. Recoger más leña de la cuenta, hervir litros de agua teniendo que cargarlos sin necesidad, perder el tiempo rompiendo ramas cuando el suelo está lleno de palitos, romper cajas de cartón aunque llevamos yesca de sobra en la mochila... recordad que el tiempo es oro, y a veces merece la pena perder el tiempo con diversas actividades, y otras veces, no.
El tiempo es especialmente importante a la hora de montar las fogatas o de decidir si realizar o no una acción según nuestros parametros de salud. Cortar una pila de palés tomará tan sólo unos segundos de nuestra vida, pero en tiempo de juego pasará una hora y media, por lo que si estamos heridos o con poca salud y con algún parámetro bajo, es posible que muramos durante la acción.
Intentad siempre llevar a cabo acciones en tiempo real y dejad las acciones largas como descuartizar animales, cortar leña y despellejar presas para cuando éstas sean realmente necesarias, tengáis tiempo de sobra y los parámetros al máximo o casi. Un tiempo mal contado puede suponer la muerte y cargaros la partida que tanto estabais cuidando.
7.- Consejos generales
-Ropa: La ropa es uno de los bienes más preciados de The Long Dark y nuestra protección frente a la hipotermia, el frío, la lluvia, el viento y los ataques, a la vez que influye en nuestra velocidad y cómo afecta al cansancio y otros parámetros. Importante: en cuanto os hagáis con un kit de costura pilláos unos buenos retales y cuero y arreglad las prendas de ropa siguiendo siempre el orden de las que tienen mayor valor calorífico al menor. Un gorro de lana puede llegar a daros una bonificación de 2 grados, mientras unas mallas térmicas apenas llegan a 1, por lo que hay que mejorar siempre primero las prendas más calentitas, que pueden llegar a sorprenderos con sus valores térmicos al llegar al 100%.
-Obtener carne de animales: al principio os será imposible cazar, y en ocasiones véis a los lobos ahí, junto a los venados, y se os hace la boca agua. ¿Qué hacer? Pues tenéis varias opciones. Una es esperar a que los lobos se vayan y volver a por los despojos, pero otra, mucho mejor, es asustarlos con la ayuda del fuego -las bengalas son especialmente efectivas- y montar una fogata junto al cadáver para que los depredadores no se acerquen mientras lo descuartizamos. Aseguráos de que la fogata dure lo suficiente para el tiempo que os va a tomar la operación.
-Dormir: En el modo historia, dependiendo de la plataforma en la que juguéis, el tema de dormir es más o menos peliagudo. Si estáis jugando en Xbox One, -en PC y PS4 hay un saco de dormir casi nada más empezar-, no encontraréis el saco de dormir hasta llegar a la gasolinera, una vez conocida Madre Gris, por lo que os merece la pena moveros rápido hasta encontrar una cama antes de explorar a vuestro aire.
-Fuentes de luz: La oscuridad en The Long Dark es real, así que aseguraos de haceros pronto con una buena fuente de luz o los planos de las antorchas antes de pasar la noche fuera. Es impresionante cómo una sencilla ventisca de noche puede acabar con nuestro sentido de la orientación -y nuestra vida- incluso estando a pocos metros del refugio en noche cerrada.
Y por último, pensad. The Long Dark es un juego amable con quienes piensan y planifican sus acciones, pero despiadado y voraz para los que están acostumbrados a jugar a lo loco. Sed imaginativos, id explorando poco a poco y aseguráos de que estáis preparados antes de una partida de exploración. Y sobre todo, disfrutad. Yo lo estoy haciendo.
¡Nos leemos!
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