Truco para no morir en los videojuegos retro: pasa el mando
¿Harto de quedar como mancos en los videojuegos retro? ¿Cansado de ser el blanco de las burlas de amigos y familiares? ¿Es usted más torpe que el tipo del vídeo jugando a Cuphead? Tras analizar concienzudamente SEGA Mega Drive Classics, en Mundogamers tenemos la solución para sus desvelos. Sólo tiene que aprender a Pasar el Mando, una práctica sencilla que, una vez dominada, le dará la llave del éxito. Nuestros resultados avalan que esta técnica -que se remonta a los años 70 y a las primeras cabinets o máquinas arcade- solucionará en cuestión de horas cualquier problema de torpeza con los juegos retro gracias a una serie de mecanismos psicológicos que aquí, en Mundogamers, conocemos como el Factor JIBIA.
¿Qué es la técnica de pasar el mando?
Una perogrullada como un piano, un clásico de los ochenta que, con la llegada de los nuevos juegos y su evolución a partir de las plataformas de nuevo milenio, ha ido cayendo en el olvido. Mientras los juegos actuales optan por largas experiencias individuales en el modo single player que incluyen mecanismos para evitar la frustración como el guardado automático, y el punto de control a escasos segundos de la zona de muerte del personaje; los viejos videojuegos de los años 70, 80 y 90 tenían una jugabilidad más centrada a la acción frenética, la dificultad puñetera, las vidas limitadas y unos puntos de control muy lejanos entre sí.
Con esto en mente, la técnica de 'pasar el mando' es una evolución de los primeros modos de dos jugadores de algunos juegos. Estos, lejos de poner en pantalla a ambos jugadores a la vez, usaban el juego por turnos y un único mando que los jugadores debían 'pasarse' entre ellos cuando el jugador 1 moría y le tocaba el turno al jugador 2. La técnica de pasar el mando, por tanto, nace con los primeros juegos 2 players por turnos, y evoluciona en el sofá de la casa del vecino. Una evolución que responde a los siguientes factores:
-Una única consola u ordenador.
-Juegos de un solo jugador -o 2 por turnos- como Super Mario Bros. 3, Alex Kid o Sonic.
-Dos, tres e incluso cuatro amigos gorroneando bocatas de Nocilla y vasos de Cola-Cao en casa.
-Una norma única para atarlos a todos y sumirlos en la partida: 'Una vida cada uno y pasa el mando'.
El secreto de su éxito
El secreto del éxito de esta técnica retro, por tanto, radica en el mencionado factor JIBIA: la necesidad de durar lo máximo posible para poder jugar lo máximo posible. Parece estúpido, pero no lo es: al saber que después de ti iban tus tres amigos y que lo más seguro es que tras morir lo más seguro es que no volvieras a catar el mando en toda la tarde, el factor JIBIA te llevaba a alcanzar grandes cotas de concentración, caminar con cuidado, estar atento a cualquier cosa que oliera a trampas y avanzar a golpes para ir viendo lo que iba apareciendo en el camino antes de chocarte con una pared de pinchos, caer a un foso sin fondo o ser pasto del fuego.
Hay quien dice que esta técnica de pasar el mando era tan sólo una ramificación de la filosofía del Insert Coin que nos obligaba a apurar al máxima las monedas de cinco pavitos en los arcade, pero hay diferencias sustanciales en ambos movimientos motivacionales. Mientras la pérdida del dinero en las arcade significaba retirarte de la zona de juego y hablar con los amigos, echar un ojo a las partidas de los demás e irte a casa o de fiesta a otra zona, la pérdida de una vida en casa y el correspondiente pasar el mando significaba dejar de jugar y mirar fijamente la pantalla con la única consolación del bocata de nocilla si es que aún quedaba alguno.
Resumiendo: si a día de hoy eres un manco en los juegos retro es porque te has acomodado, porque has olvidado los viejos tiempos, o porque nunca los conociste. Para los viejos, recordad esa sensación de querer jugar, de necesitar jugar, y pensad que una vez el personaje pierda una vida, vais a tener que pasar el mando. A los más jóvenes, quedad con amigos y probad a jugar pasando el mando. Aunque tengáis online, aunque todos tengáis consolas... probadlo. Os servirá para entender tiempos más honestos y complicados, y aumentará mucho vuestra capacidad de concentración y reacción en los videojuegos. Es una promesa.
¡Nos leemos!
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