Tomodachi Life: la necesidad de dar vida a los Miis
Tomodachi es la excusa perfecta para cumplimentar algo que se le venía negando a los Miis desde que nacieron con Wii: tener vida. La cuestión es que desde que se convirtieron en los avatares de los usuarios de consola de Nintendo con la anteriormente conocida como Revolution, el que esos Miis hiciesen algo y tuviesen una oportunidad de protagonizar un juego de verdad más allá de su paso por escenarios de invitado o de mera comparsa para el gozo y disfrute de los jugadores de muchas de las aventuras en las que se han visto involucrados los personajes.
En Tomodachi Collection no será el caso: el jugador es el Mii, y el Mii intervendrá a lo largo del relato aportando su psique y chocando y participando en los distintos eventos que componen el gloso final del juego. ¿Qué quiere decir eso? Básicamente que la experiencia de Tomodachi es más pasiva que activa, pero eso no tendría que ser necesariamente negativo para que se convierta, finalmente, en una experiencia a la altura de las expectativas y que pueda englobarse como un producto genuino de la marca Nintendo. Otros recorrieron el mismo camino que el que ahora comienza Tomodachi y se acabaron quedando, y de hecho, dos de los importantes vienen firmados por el productor del presente videojuego: Rythm Paradise y Wario Ware.
En Japón venía con el terreno ganado y absolutamente arado: El primer título logró endosar más de tres millones de unidades en Japón; el que saldrá en junio lleva algo más de un año en el territorio japonés y ha logrado estar largos meses de forma ininterrumpida entre los 10 más vendidos de allí y colar más de un millón de juegos en las 3DS japonesas. Lo que comentaba líneas más arriba: ni es la primera vez que una extravagancia nintendera cruza el charco y logra hacerse un hueco en el mercado. Diré más: si Animal Crossing acabó resultando en semejante éxito, no se me ocurre ningún motivo para pensar que Tomodachi no repetirá el exitazo de Tom Nook y compañía.
Además, es que viene a ser un videojuego muy similar en cuanto a concepción: no creo que a nadie se le ocurriese usar Tomodachi como juego principal de nada, estamos, como pasaba con Animal Crossing, con un juego que acompaña a la perfección otras experiencias de juego más tradicionales. Aquí extraeremos risas y circunstancias graciosas con Miis de nuestra familia, amigos y famoseo aleatorio. Será interesante, y en menos de dos meses podrás echarle el guante en tu Nintendo 3DS. Hasta entonces, quedará conformarse con el Nintendo Direct especial que ha llegado hoy por sorpresa.
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