Todo el mundo tiene sus propias primeras impresiones de No Man's Sky
Ya está, todos los que estamos interesados en No Man's Sky ya tenemos el juego y estamos sumergidos a lo loco en él. Hemos esperado un montón de tiempo y hemos estado casi sin información, así que las ganas con las que lo han pillado algunos – yo tengo ganas, pero, por desgracia, no tiempo – han sido impresionantes. Sin embargo, ha ocurrido algo muy bonito y curioso: todo el mundo ha visto cosas completamente distintas y ha tenido impresiones casi opuestas.
Las primeras impresiones de un juego que es totalmente aleatorio son una gozada de leer, casi tanto como una parte más de la experiencia del juego en sí. Me he pasado bastante rato leyendo sobre gente que ha aparecido en su primer planeta y apenas se ha podido mover con facilidad porque era muy oscuro. Mi caso, como muchos amigos en Twitter me ha dicho, es bastante único: estuve en un planeta muy floral y lleno de animales, con una temperatura agradable. No todo el mundo ha tenido mi suerte, por lo visto.
Y aquí radica ahora mismo mi mayor interés por No Man's Sky: en hablar con mis amigos, que tres de ellos se han hecho también con el juego, para ver qué van descubriendo y cómo puedo yo más o menos interpretar lo que han descubierto para seguir adelante con mi partida. Al fin y al cabo, todos vamos a cumplir unos objetivos parecidos pese a estar separados por millones de unidades indeterminadas de distancia. Y todos vamos a construir unas historias propias que nos dirigen sin embargo a un objetivo similar.
Esta es parte de la gracia de los videojuegos como medios de historias. A veces, con tan solo dejarnos solos y un poco a nuestra bola, con los elementos justos para que vayamos montándonos nuestra historia, nos lo pasamos tan bien como con juegos narrativos y directos como Uncharted o Call of Duty. Soy muy fan de esta clase de experiencia, y con No Man's Sky creo que estamos ante un nuevo punto de inflexión porque no solo la historia es indeterminada y la montamos nosotros, sino que el juego también monta los planetas de una forma aleatoria y tiene solo unas leves consignas.
Es muy pronto como para decir que estamos ante una revolución, o siquiera ante algo significativo, pero por lo poco que he jugado y lo que he visto hasta el momento, me da la sensación de que este juego va a gustar a mucha gente que, por ejemplo, estuviera enganchada a Terraria o Minecraft. Parece un pasito más allá de la ambición de estos fantásticos juegos donde puedes estar jugando de manera infinita, con la novedad de que hay una historia construida con la misma amplitud.
Veremos hacia dónde nos lleva a todos el juego, porque serán experiencias distintas y hay valor en su intercambio. Si algo me ha enseñado Dark Souls, por citar un ejemplo conocido, es que las historias construidas a cachos y esparcidas por los juegos es que crean comunidades de gente que se mueren de ganas por darles un sentido y hacerlas lineales de modo que las entendamos. Me muero de ganas por ver qué movidas se monta la gente con No Man's Sky, la verdad.
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