Titanfall resucita viejas mecánicas
Tras la conferencia de EA hay uno de los títulos que para más de uno puede significar un cambio de concepto para todo un género. Ese es Titanfall. Quizá con las primeras imágenes pensarán en un shooter futurista más, con robots y mochilas de propulsión, pero el título de Respawn Entertainment ofrece algo diferente, una resurrección.
Se ha mostrado otro video gameplay de este Titanfall en el que sentimos que un juego de guerra aparta esa intención de realismo bélico donde se pretende reflejar un posible conflicto real. El título pasa de todo eso y, cuando se empieza a mostrar una secuencia entera de la acción que muestra, se puede percibir el regreso del pasado del shooter. Recordamos un Quake III Arena donde se podía dar saltos poco realistas sólo para favorecer la experiencia jugable. Eso es lo que premia aquí. Caminar a pie por mitad de la calle, saltar a una pared y caminar por ella o introducirse en un robot para acabar de forma contundente con todo lo que se ponga en el camino. No parece que utilizar un recurso u otro de ventaja a alguno de los bandos sino que, es la forma de jugar la que conduce a la victoria o la derrota.
Frenetismo, rapidez y tener en cuenta que no hay una sola forma de lograr un objetivo. No es necesario adentrarse en las tripas de un robot para acabar con otro e incluso este hecho no nos hace invencibles. Simplemente un soldado que sepa colocarse, trepando por una pared u ocultándose tras ella puede acabar con ese complejo de dios. Ya se sabe, cuanto más grande más dura es la caída.
El caso es que es un cambio del concepto jugable para un género demasiado trillado. Se cambia cierto hábito estratégico establecido para pasar a un estilo más arcade que se centre en la diversión y no tanto en la imagen del mundo tal y como lo vemos en las noticias. En Titanfall se ve algo que en otras franquicias de disparos no está tan claro y es que da una oportunidad de desafiar a las reglas actuales para, con unos artilugios que todos pueden utilizar desde un comienzo, ofrecer una experiencia diferente. La desarrolladora trae de nuevo ideas y opciones ya olvidadas al género, más allá de cambiar los colores y los skins.
Con lo visto hoy en la conferencia de Electronic Arts, respecto a Titanfall, es posible reconocer una actitud que tiene como objetivo presentar un juego arcade con mecánicas destinadas a que el usuario tenga experiencias fluidas y diferentes a lo que ha visto a la saciedad. Todo lejos de la idea vigente en esta generación de tratar de abrazar el realismo para acabar en una experiencia superficial.
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